Una nueva avalancha se cierne sobre el mundo del PC de escritorio y posiblemente también al de los servidores, y es que según un nuevo informe los criptomineros tienen nuevas víctimas: las CPU AMD Ryzen. El mercado de las tarjetas gráficas cambiará con RDNA 3 y al mismo tiempo con Zen 3+ y sus sucesores, porque Raptoreum está al acecho y dejará un solar donde antes había estanterías llenas de procesadores para vender.
¿Qué hace un minero cuando no tiene GPUs disponibles ni ASICs? ¿Cómo tiene que moverse cuando el precio es tan absurdo que aun habiendo unidades sobrepasa por mucho la rentabilidad mínima para minar? Muy fácil, poner su ojo en otras criptomonedas que sean rentables. El dinero no entiende de partidos políticos, países, empresas, equipos o usuarios, por ello los criptomineros se mueven y ahora centran la mirada en los procesadores de AMD.
Las criptomonedas huyen de los ASICs: Raptoreum
Raptoreum es una nueva criptomoneda que tiene una premisa muy simple: terminar con el dominio de la minería de ASIC o FPGA. Para ello esta moneda se centra en el método de minería por CPU gracias al algoritmo GhostRider, el cual es al mismo tiempo una combinación de Cryptonite y x16r con algunos cambios significativos en la codificación.
¿Qué quiere decir esto? Pues que el trabajo básicamente se ve beneficiado de una caché L3 más grande porque el algoritmo tiene más interacciones con los núcleos. Por ello, los mineros han puesto el foco en procesadores Threadripper y EPYC, siendo un buen ejemplo el 7742, pero sobre todo y sorprendentemente las CPU Ryzen.
Esto es debido a que GhostRider sigue el modelo Proof-Of-Work del que ya hemos hablado antes y lógicamente al igual que pasa con las GPU RX la Infinity Cache es determinante para lograr mayor rendimiento.
Los Ryzen comienzan a escasear
Si ya los Ryzen 9 actuales como el 5950X o el 5900X ya comienzan a escasear por su alto rendimiento y gran caché L3 de 64 MB (4247 h/s y 3557 h/s respectivamente) lo que viene con las siguientes arquitecturas Zen va a ser de órdago, porque precisamente una de las mejoras es la V-Cache, lo que aumentará drásticamente el tamaño de esta en general.
Esto se ve todavía más potenciado si tenemos en cuenta que Milan-X llegará con 768 MB de L3, así que imaginad la potencia de cálculo con un sistema de doble socket y lo apetecible que va a ser para los mineros.
Ahora mismo el mercado solo está reduciendo precios y por lo tanto las ventas de los dos Ryzen 9 son altas, lo que sumado a la criptominería hace que el stock sea mínimo o nulo. Los Threadripper comienzan a sufrir lo mismo y los EPYC llegan en unidades contadas.
El problema mayor llegará con Zen 3+ y Zen 4, donde es más que probable que entremos en la dinámica de la escasez y la especulación, porque energéticamente son más eficientes, tienen núcleos de sobra y lógicamente esos 192 MB de L3 son más que suculentos para el precio que van a tener.
¿Ganará Intel la batalla por la escasez de CPUs AMD? ¿Será imposible adquirir un Zen 3+ a un precio cercano siquiera al MSRP? Veremos…