La llegada del nuevo procesador para gaming de AMD ha logrado conseguir algo que muchas personas creían imposible, superar al 7800X3D en términos de rendimiento y de éxito en ventas, esto tiene que ver directamente con la gran capacidad que ha demostrado esta nueva CPU en juegos. Pero desde la compañía tienen bastante claro contra qué procesador de su principal rival, Intel, compite el Ryzen 7 9800X3D, y es que aunque parezca extraño no se enfrenta a la nueva generación de la marca, sino al i9-14900K ya que creen que es bastante mejor para juegos que los nuevos.
Pese a los problemas de stock, el Ryzen 7 9800X3D ha logrado convertirse en una de las CPU más importantes de los últimos tiempos, no solo por el hecho de la polémica que hay alrededor con la especulación debido a que no hay suficientes unidades, sino también por lo que es capaz de lograr. Este procesador cuenta con un rendimiento un 8% superior al que era capaz de ofrecer el Ryzen 7 7800X3D, que logró convertirse en el rey del gaming debido a que incorpora una serie de tecnologías que funcionan perfectamente en videojuegos, logrando alcanzar una tasa mayor de FPS, teniendo además una estabilidad muy superior a otros modelos.
El mejor procesador para gaming de AMD no trata de competir frente a los Intel Core actuales
Muchas veces vemos cómo una compañía trata de competir frente a los productos más recientes de las demás empresas del mercado en términos de tecnología, algo que es común ya que supuestamente las generaciones más actuales son las que mayor rendimiento ofrecen en general. Al parecer esto no es lo que está sucediendo con el nuevo procesador para gaming de AMD, el Ryzen 7 9800X3D, ya que en lugar de competir contra el segmento de la generación actual de Intel, lo hace frente a un procesador de la anterior, el i9-14900K.
El principal motivo por el que desde AMD siguen haciendo referencia al 14900K en lugar de hacer que su mejor procesador para juegos hasta la fecha compita frente a las nuevas generaciones de Intel tiene que ver directamente con el rendimiento que tienen ambos en juegos. En este caso, el i9 de la generación anterior resultó tener una potencia base realmente alta, algo que se combinaba bastante bien con la capacidad que tenía de ofrecer un rendimiento estable y realmente bueno en juegos, algo que los actuales procesadores que ha sacado la compañía no pueden lograr.
Esto implica que desde la compañía creadora de los Ryzen no ven la generación actual de Intel como un verdadero contrincante en el mercado de los videojuegos, ya que según indican, en comparación con el i9-14900K, los procesadores actuales de la marca son mucho peores en términos de potencia para juegos. Por este mismo motivo, el 9800X3D compite directamente frente a la generación anterior mientras que, como bien sabemos, la verdadera competición que tiene este procesador es con su propio antecesor, ya que al final el motivo por el que era la CPU más esperada de los últimos años está relacionado con el hecho de que recoge el legado del 7800X3D.