Ayer domingo tuvimos en España un dilema importante: seguir con el partidazo de Alcaraz contra Sinner en la final de Roland Garros 2025, o poner el ojo en la famosa conferencia del Summer Game Fest centrado en las novedades de Microsoft. Y cuando decimos Microsoft, no lo decimos al azar: ayer, oficialmente, los norteamericanos le perdieron el miedo a sus fans y mostraron ya definitivamente que eso de hacer solo juegos para sus máquinas ha quedado atrás.
Recordad el evento digital con Sarah Bond y Phil Spencer de hace apenas 12 meses, cuando tuvieron que salir a la carrera para jurarnos por Snoopy que no iban a llevar sus sagas a PS5 porque sí. Que alguna caería, pero que los xboxers estuvieran tranquilos porque los iban a seguir cuidando. En junio de 2025, eso ha saltado por los aires salvo por unos pocos casos que, parece, van a seguir solo en PC y Xbox. Pero todo lo demás, a lo bestia, terminará donde les dejen, incluyendo obviamente Nintendo Switch 2.
Y Microsoft le perdió el miedo a sus fans
El de ayer no fue un evento cualquiera. Fue el primero en el que Microsoft exhibe ya su poder como third party, es decir, como empresa que va a surtir de juegos a todo aquel que tenga una consola o máquina de juego y quiera que sus grandes sagas lleguen a todas partes. Y las tienen de todos los colores, algunas un poco infravaloradas porque han estado siempre en Xbox y parece que nadie las hace caso, pero cuando salen de allí, florecen y se transforman en algo mucho más grande y valioso.
Ayer, Microsoft le perdió el miedo a sus fans, esos que montaron en cólera el año pasado y que poco menos que amenazaron con incendiarlo todo, pero desde entonces los norteamericanos han sido más listos que sus jugadores. Nos han ido administrando las dosis de analgésico poco a poco, casi sin darnos cuenta, y en el instante en el que nos han soltado todos los juegos que llegarán a PS5 de sopetón (además de Xbox, PC y Steam), ya estábamos tan dormidos que no ha hecho falta explicación alguna adicional.
Dejando a un lado los fanatismos de los xboxers o los sonyers, es una buena noticia que exista un gigante así de grande en el panorama actual de la industria. Uno que haya anunciado tantos juegos y, algunos, con especial buena pinta, tanto dentro como fuera de las sagas más reconocidas. Clockwork Revolution nos encantó, pero también el primer DLC de Indiana Jones y el Gran Círculo, o todo el trabajazo con un Xbox Game Pass y Xbox cloud Gaming que va creciendo sin descanso.
Y encima tenemos máquina nueva en la oficina, para finales de año: unas Asus ROG Ally y ROG Ally X algo así como «Xbox Edition» que llevarán el procesador Z2 Extreme, y que estrenan ese Windows a pantalla completa solo para juegos que podría ser una esperanza de cara al futuro que se presenta, lleno de máquinas portátiles que llevar a todas partes.
Y sí, Microsoft ya es una third party con todas las de la ley. ¿Y pasa algo? Pues no…