Ahora es posible convertir un teléfono retro en un asistente virtual con IA

Combinar una serie de objetos del pasado con tecnologías del futuro es algo que hemos visto hacer en alguna que otra ocasión, por ejemplo tratar de utilizar una estructura similar a la que tiene una Game Boy pero con un hardware mucho más avanzado para poder jugar a cualquier título actual. Pero este proyecto lleva más allá la combinación ya que cambia por completo el uso de un teléfono retro para convertirlo en una especie de asistente virtual que utiliza ChatGPT, y todo ello potenciado mediante una Raspberry Pi.
Las Raspberry Pi son dispositivos extremadamente versátiles, la capacidad que ofrecen de poder implementar prácticamente cualquier software en un dispositivo con un tamaño realmente reducido hace que tengan un gran valor en proyectos en los que utilizar el menor espacio posible pero que necesitan una gran capacidad de computación lo es todo. Y no hay mejor ejemplo de esto que todos los proyectos que utilizan una inteligencia artificial o un LLM combinado con un SBC de este tipo para crear un dispositivo completamente nuevo.
Una llamada al pasado mediante una tecnología completamente futurista
A la hora de ver cómo evolucionan las tecnologías podemos encontrar una gran cantidad de situaciones en las que un desarrollador busca la forma de combinarlas con una serie de dispositivos vintage, y en este caso la incorporación resulta extremadamente llamativa. Y es que juntar un fragmento del pasado con uno del futuro ahora es más fácil que nunca ya que hay una gran cantidad de medios disponibles para ello, aunque en este caso Pollux Labs ha decidido hacerlo mediante una Raspberry Pi y un teléfono retro.
Pero no es lo que parece, ya que este teléfono no funciona como uno convencional principalmente por el hecho de que no permite llamar a nadie, sino que más bien sirve para hablar con ChatGPT, permitiendo tener una conversación o preguntar cualquier cosa. Aunque logra mantener ciertos aspectos del dispositivo original y es que al activarlo aparece un tono de llamada como el que aparece de normal tras el cual el usuario puede comenzar la conversación al activar la función de conversión de voz en texto y viceversa para que el LLM pueda procesarlo.
El dispositivo hace uso de una Raspberry Pi 4B que logra mantener un rendimiento bastante alto al utilizar la IA, pero no es la mejor opción ya que podría utilizarse una Raspberry Pi 5 para lograr conseguir el mejor rendimiento posible. Obviamente el resto de componentes que incluye son el propio teléfono que alberga en su interior el SBC junto con un micrófono que escucha el audio para trasladarlo luego a la IA.
Por último cabe mencionar que el software fue creado por el propio usuario de forma exclusiva para este proyecto, se basa en un script de Python que permite utilizar diversos servicios como la API Whisper que ofrece OpenAI y que básicamente permite gestionar una serie de interacciones con ChatGPT, incluida la capacidad de mantener el historial de conversaciones y la capacidad de convertir las respuestas del LLM a voz.