Llevamos meses avisándolo y parece que ya tenemos una respuesta de la industria de los chips de memoria RAM: los precios van a subir y lo harán de tal manera que el usuario acabará pagando hasta un 30% del precio actual por cada módulo. Volvemos por lo tanto a finales de 2018, donde el precio seguía disparado, pero a diferencia de aquel tiempo, la tendencia ahora vuelve a ser al alza ¿cuánto tiempo tenemos hasta que ocurra?
Es innegable que estamos viviendo la mejor época para comprar tanto SSD como memorias RAM, donde ya se han visto ofertas de los primeros con un tamaño de 1 TB por menos de 100 euros y de los segundos con tamaños de 16 GB en kits de 2 módulos por debajo de los 80 euros.
Estos precios parecían fantasía hace año y medio, literalmente unicornios, puesto que estaban prácticamente al doble del precio actual. Ahora la industria amenaza de nuevo: los precios en 2020 llegarán a subir hasta un 30%.
¿La subida se está dejando notar ya? ¿cuánto tiempo nos queda?
La realidad es que tras el Black Friday la tendencia se está manteniendo: los precios ya no están bajando.
Es más que previsible que veamos como las líneas de los gráficos comienzan a convertirse en lo que se conoce como encefalograma plano, es decir, una línea horizontal que evidenciaría un estancamiento de los precios y el fin de la bajada.
De momento y con objeto del BF, los precios han seguido bajando, puesto que los fabricantes necesitan liberar stock y esto influye en todas las gráficas, pero la tendencia indica que, o bien el precio se ha recuperado, o bien no hay stock disponible y se espera la llegada de más unidades, las cuales seguramente lleguen con un precio superior.
El anuncio de la subida del 30% del precio es, curiosamente, un valor por debajo de la línea que los fabricantes consideran justa para sus beneficios. Samsung, SK Hynix y Micron tienen todavía ganancias con la venta de sus chips, pero han tenido que ajustar la producción a la demanda, restringiendo la oferta.
El problema es que en 2020 se espera un salto en dicha demanda impulsada por los nuevos procesadores para servidor, smartphones con 5G y la salida al mercado de los nuevos modelos de tarjetas gráficas, así como procesadores para mainstream.
Las compañías han pospuesto algunos proyectos de expansión para memoria RAM
Aunque la demanda pueda parecer muy grande, las compañías están posponiendo tus proyectos de expansión hasta que no sea real y efectiva. Esto puede crear una escasez artificial de chips, lo que aumentaría el precio bastante más del 30% anunciado y se viviría una escalada del coste final como a principios de 2018.
El pánico no ha estallado de nuevo como en aquel tiempo, pero ya vemos la estabilización como un hecho contrastado.
Los precios seguirán bajando hasta final de año, pero el CES llegará como un soplo de aire fresco para la industria y ahí seguramente se pueda valorar de mejor manera los datos de la industria y lo que esperan vender en 2020.
En cualquier caso, esta navidad será la última donde veremos los precios arriba descritos, enero de 2020 vaticina el regreso a la escalada en los costes en la memoria RAM, en definitiva: se acabó lo bueno …