El uso del ancho de banda de la interfaz PCI Express para la transferencia de datos entre las unidades de estado sólido y la RAM del sistema es una de las piezas clave de cara el rendimiento de este tipo de almacenamiento. Mientras esperamos la salida de los primeros SSD NVMe PCIe Gen 5 FADU anuncia que ha conseguido la máxima velocidad posible bajo dicho estándar.
FADU es una empresa emergente surcoreana que acaba de sorprender a todo el mundo lanzando su controladora Flash FC5161 para interfaces PCI Express 5.0 y sus SSD NVMe a los que han bautizado como Echo. ¿Que tienen de especial? Pues que pretenden revolucionar el mercado de los SSD NVMe gracias a su controladora Flash FC5161 y las nombradas unidades de almacenamiento Echo, veamos por tanto que tienen de especial.
FADU FC5161, el controlador Flash más rápido
La controladora flash es la pieza más importante de cara al rendimiento de un SSD NVMe y podemos decir que la FADU FC5161 es una impresionante pieza de hardware en este aspecto. El mercado objetivo de estas unidades es el de la computación en la nube, ya que son compatibles con el estándar OCP NVMe Cloud 2.0 y el SSD NVMe FADU Echo se venderá en varios factores forma como E1.S, E1.L, E3 y U.2.
¿Y qué hay de las cifras de rendimiento del FADU FC5161? Empezando por sus velocidades secuenciales tenemos tasas de 14.6 GB/s para escritura y 10.4 GB/s en lectura. Si hablamos del rendimiento de acceso aleatorio estamos en 3.4 millones de IOPS en lecturas y 735.000 en escritura. Todo ello bajo un consumo por debajo de los 5,2 W, algo a destacar dado que en cada generación el consumo de la interfaz PCI Express va aumentando.
¿Su fecha de lanzamiento? Su plan es desplegarlos para finales de 2022, pero su mercado objetivo no serían los PC domésticos sino el mercado empresarial de cara a aplicaciones de inteligencia artificial y de computación en la nube.
Lo interesante de su propuesta
La propuesta de FADU con su controlador FC5161 es simplificar el proceso de traslado de direcciones virtuales a físicas para acceder al contenido del almacenamiento NAND Flash en los SSD NVMe. ¿Cómo lo pretenden hacer? Pues con el uso de un núcleo RISC-V y una serie de aceleradores con tal de proveer la calidad de servicio necesaria y descargando con ello parte de las tareas que son típicas en la CPU o la GPU que acceda al SSD NVMe a la controladora.
Estos cambios son clave para reducir el consumo energético de este tipo de unidades de almacenamiento, ya que es importante en centros de datos y servidores que sean capaces de ofrecer una tasa de transferencia continua, la cual se puede ver afectada por las altas temperaturas producto del alto consumo energético. Siendo por tanto uno de los puntos clave la calidad de servicio.
Veremos que tal le va a FADU, en todo caso esto también pone de manifiesto la emergencia de las soluciones de hardware basadas en RISC-V de cara al desarrollo de soluciones por parte de empresas de pequeño tamaño para afrontar problemas puntuales.