Intel promete que no va a repetir los problemas de stock con los procesadores de 10 y 7 nm
El vice presidente ejecutivo de Intel ha asegurado, durante una conferencia celebrada en Morgan Stanley, que los problemas de suministro que Intel lleva acusando desde hace meses con sus procesadores y chipsets fabricados en el nodo de 14 nm, no se volverán a repetir con los nuevos nodos de 10 y posteriores. De esta manera, Intel se asegurará que los problemas de desabastecimiento y sobreprecio que han tenido que sufrir los clientes de la compañía, quedarán en el pasado.
Es innegable que los problemas de suministro que ha sufrido Intel con respecto a sus procesadores y chipsets durante el reinado del presente nodo de 14 nm, han afectado a la compañía y a sus clientes de alguna manera más o menos directa. Por un lado, los clientes de Intel han visto como el precio de los productos se llegaban a elevar hasta unos límites que hacían prohibitiva la compra de estos. Por otro lado, y aunque este incremento de precios ha beneficiado a Intel, también ha forzado a que muchos de sus clientes se vieran obligados a buscar otras alternativas. Especialmente ahora, cuando sí hay realmente una alternativa, de la mano de AMD.
Intel ha intentado combatir estos problemas de suministro de varias maneras. Una de ellas ha sido una gran inversión de más de 1.000 millones de dólares en sus actuales fábricas, para poder incrementar las capacidades de sus líneas de producción. A la vez que, el pasado mes de diciembre, anunciaban la expansión de sus fábricas de Oregon e Israel, de manera que se incrementara no solo la capacidad de responder a los problemas. Sino, también, que se acortara el tiempo que tardan los productos en llegar al mercado.
Intel habría aprendido la lección de los problemas de suministro actuales
Sun Nanyong ha afirmado durante la conferencia TMT Technology Conference, que estos problemas de suministro que se han producido a partir de tercer trimestre del pasado año 2018, no se volverán a repetir con el nuevo nodo de 10 nm. Ni en los nodos que vengan después. Aunque no es la primera vez que la marca ha tenido problemas de suministro, dado que en el 2015 pasamos por una situación similar con los procesadores Skylake-S. En cualquier caso, tampoco ha querido entrar en detalles específicos sobre cuáles son las medidas que la compañía ha adoptado para que estos problemas no se vuelvan a repetir.
Como es obvio, las inversiones que han hecho en la actualidad para reforzar el nodo de 14 nm se trasladarán al nuevo nodo de 10 nm, en el momento en el que se comiencen a transformar las cadenas de montajes al nuevo nodo (aunque esto no va a ser algo que se realice de la noche a la mañana). Luego está el tema del nuevo nodo de 7 nm que estará investigando Intel en este momento, y para el que la compañía habría estado comprando las máquinas EUV que fabrica la empresa ASML. Pero, por el momento, Intel no ha anunciado este nuevo nodo, ni qué procesadores serán fabricados en él. Una táctica lógica, dado que no quiere que sus clientes decidan saltarse el nodo de 10 nm, esperando al nuevo nodo de 7 nm.