El precio de los procesadores AMD se mantiene plano, mientras que el de Intel no para de moverse
Múltiples factores están marcando la guerra de precios que se mantiene desde el verano en las CPUs. Aunque pueda parecer que existe un claro vencedor, lo cierto es que el usuario de a pie sigue pidiendo procesadores Intel en contra de AMD. Podemos pensar miles de razones para justificar esto, pero fuera de opiniones de este estilo la realidad es que los procesadores AMD mantienen un precio plano frente a los vaivenes de Intel.
La estabilidad ayuda a las ventas de procesadores AMD
Las CPU Ryzen han ido ganando poco a poco cuota de mercado frente a los procesadores Intel, dato que tiene mayor valor si contamos con la de momento poquísima introducción de los mismos en dispositivos portátiles.
La cuota de los de Lisa Su supera el 10% y sigue creciendo, arañando día a día el trozo del pastel que por rendimiento y precio merecen. Pero también es cierto que los problemas de Intel les están favoreciendo en dicha carrera contra el gigante de los microprocesadores.
Ya conocemos muchos de los problemas a los que Intel se está enfrentando y por ello sus CPUs están en continuo ascenso y descenso en el precio de los minoristas, lo que hace difícil no sólo su compra en un momento determinado, sino los pronósticos acertados sobre la tendencia.
Así, CPUs como el i7-8700K han tenido una auténtica montaña rusa de precios en el año y poco que lleva en el mercado. PCPartPicker ha recopilado datos de 17 minoristas de Reino Unido donde se aprecian dichas subidas y bajadas de forma más clara.
Así, encontramos un precio mínimo de 276 libras en mayo de este año mientras que en octubre marcó su máximo histórico con 513 libras, donde la escalada de precios ha sido brutal desde agosto, cuando el precio fue más estable para los 17 minoristas.
El historial de precios de AMD es sólido
En cambio si miramos desde la óptica de AMD, los datos son realmente increíbles, sobre todo teniendo en cuenta la cantidad de minoristas tratados.
El precio no ha variado apenas desde mitad del mes de abril, donde solo un minorista elevó el precio hasta el absurdo, por lo que entendemos que es un error puntual ya que duró apenas días.
Estos escenarios no son puntuales de estas dos CPUs, se repiten con casi todos los microprocesadores disponibles de ambas compañías. Si bien podemos encontrar alguna disparidad, como por ejemplo entre el i5-8500 y el i5-8600, no encontramos estas variaciones en la gama Ryzen.
Todo apunta a una mejor planificación de AMD con TSMC, donde ambas compañías han logrado mantener un suministro fuerte de obleas y chips, mientras que Intel se ha dormido al no poder siquiera prever la fuerte demanda que les llegaba a partir de verano.
Si los problemas persisten en unos y no en otros es posible que AMD siga robando cuota a base de un buen roadmap con sus socios y una respuesta de los usuarios ante tales ratios de rendimiento/precio.