Parece ser que los dos nuevos procesadores de la serie K que Intel va a presentar en los próximos días no son completamente idénticos a los actuales núcleos Kaby Lake que han salido hasta la fecha al mercado, si no que Intel les ha hecho una serie de retoques en sus especificaciones, entre las que se incluye el desactivar la tarjeta gráfica integrada en el procesador, elevar el consumo máximo hasta los 112 W y emplear una mejor masilla térmica en su interior.
Desde que la noticia saltara a la luz ayer sobre los dos nuevos procesadores que Intel tiene previsto presentar en breve tiempo para contrarrestar la salida al mercado de los próximos Rizen de AMD, se están escribiendo ríos de bits en nuestras pantallas a este respecto y, como ampliación de mi noticia de ayer, hoy os traigo algunos datos más sobre estos nuevos procesadores.
El primer detalle es que los nuevos i5 7640K e i7 7740K llevarán la tarjeta gráfica integrada en el núcleo desactivada, algo que no veía hacer a Intel desde los tiempos de Sandy Bridge y sus procesadores acabados con el sufijo «P», que indicaba precisamente este aspecto a sus futuros clientes. El motivo de desactivar la tarjeta gráfica integrada es algo que se me escapa, dado que entonces se fuerza a los usuarios a emplear una gráfica dedicada. No me entendáis mal, es perfectamente aceptable que un procesador requiera una gráfica dedicada para funicionar (me juego lo que queráis a que la mayoría de vosotros tiene en su equipo una gráfica dedicada), pero entonces se le quita un poco la razón de ser a estos procesadores de Intel, que en el empaquetado en el que se venden desde hace tiempo han pretendido ser un poco una solución «todo en uno». Y el motivo no es bajar el consumo del procesador y ahora entenderéis por qué.
El por qué está basado en el segundo dato que he podido conocer hoy y es que este procesador tendrá un consumo de 112 W frente a los 95 W que sabemos que tendrán los próximos Ryzen. Y tampoco entiendo muy bien a qué puede deberse el incremento en el TDP de estos procesadores cuando, en realidad, se les ha desactivado la tarjeta gráfica y debieran de consumir menos por ello, dado que el incremento de velocidades que integran, de 200 MHz para el modelo i5 y de 100 MHz para el modelo i7, no creo que justifiquen un incremento de consumo de 21 W.
Para finalizar, el último dato que he conocido es que esta vez Intel si hará caso a las críticas vertidas sobre sus actuales núcleos Kaby Lake y empleará una masilla térmica de bastante mejor calidad de la que están empleando ahora mismo, de las cuales ya hablé hace algo menos de un mes sobre los malos resultados que muchos usuarios estaban obteniendo con sus overclocks y como muchos habían recurrido al delidding de estos modelos para cambiarles el TIM que llevan en su interior.