Arctic Country Breeze, animando a «La Roja» en el mundial

El Country Breeze es un ventilador que se alimenta de cualquier puerto USB del ordenador, con cabeza móvil para apuntar hacia la dirección que queramos, y con un potenciómetro para regular su velocidad de funcionamiento e incluso apagarlo si queremos. Con motivo del mundial de Brasil que dará comienzo en unos días, Arctic ha vestido a sus conocidos Breeze con los colores de los países participantes, y como os comentábamos hace un momento, a nosotros nos ha enviado la versión de la selección española de fútbol.

Comenzamos viendo el embalaje, en cuya cara principal y posterior podemos ver el Breeze totalmente vestido de rojo y con matices amarillos igual que la equipación de nuestra selección. Arctic ha dispuesto incluso una bandera española en la parte de arriba del embalaje, con el escudo y todo. No os asustéis porque lo han hecho bien, no han puesto «otras» banderas de España como ya hemos visto en algunos medios extranjeros.

El Arctic Country Breeze cuenta con un ventilador de 92 mm que gira a una velocidad que varía según queramos con el potenciómetro entre 800 y 1800 revoluciones por minuto. Ojo porque no tiene protección, y podría llegar a hacer daño si metiéramos el dedo, aunque los bordes de las aspas no están afilados. Cuenta con una ancha y pesada base con pies de goma que asegura que el dispositivo no se moverá aunque coloquemos el ventilador en cualquier posición posible, ya que recordad que el «cuello» es totalmente móvil y podemos ponerlo en la posición que queramos.

La base, por cierto, está también adornada con los motivos de la selección española de fútbol.

Todo el ventilador en sí es totalmente rojo mate. No habría estado de más adornarlo también un poco o ponerle una pegatina en el centro, ya que parece que se han limitado a darle con un spray de pintura y ya está, la verdad.

El cable no tiene mallado de tela, es de color blanco, y mide 1.8 metros, suficiente para colocarlo en cualquier parte de nuestro escritorio. El USB no está bañado en oro, no lo necesita dado que solo está para darle alimentación eléctrica al ventilador.

Pruebas.

¿Qué pruebas podemos hacerle a este aparato? Evidentemente lo hemos conectado al ordenador y lo hemos ubicado en el escritorio, a la derecha del ratón. El Arctic Country Breeze despide una buena corriente funcionando al mínimo de revoluciones, situación en la que no emite nada de ruido. A nivel medio, el flujo de aire aumenta, aunque no mucho, pero el ruido sí. A máximas revoluciones, el Breeze se vuelve rumoroso (que no ruidoso), pero a una distancia de unos 60 centímetros se nota el caudal de aire, y a decir verdad es muy agradable en la cara, sobre todo ahora que el verano está llegando.

CONCLUSIÓN.

El Arctic Country Breeze es sin duda una buena opción de ventilador USB de sobremesa. Tiene una buena potencia, lo suficiente como para generar una suave y agradable brisa en la cara cuando estamos delante del ordenador, y sin que su ruido llegue a ser molesto. Por otra parte, esta edición especial del mundial, y en concreto la que hemos recibido para apoyar a «La Roja» nos parece una idea genial, y que por otra parte no incrementa el precio (unos 10 euros más o menos).

PROS:

• Buen caudal de aire incluso a bajas RPM.
• Bastante silencioso.
• Base sólida.
• Se puede orientar hacia donde se quiera.
• Potenciómetro para controlar la velocidad.
• Cable USB bastante largo.

CONTRAS:

• Necesita protección para evitar posibles accidentes con las aspas.
• El acabado en rojo mate queda un poco «soso» en la parte del ventilador (el de la base nos encanta).

Por ello, desde Hardzone recomendamos este Arctic Country Breeze por su diseño. ¡A por el mundial!