Sin duda estamos ante un fabricante de reciente creación pero que, según muestran los resultados de nuestros últimos análisis, va a dar mucho que hablar en breve. Facilidad de instalación, diseño cuidado y extraordinario rendimiento son sus señas de identidad.
Y es que a pesar de su corta edad (tan solo un año de vida) Raijintek ya ha demostrado que los resultados no son proporcionales a la experiencia. A un precio bastante contenido hablamos de disipadores que se pueden «codear» con los grandes de la refrigeración actual.
esta vez le toca al buque insignia de la marca que no es otro que el Ereboss. A pesar de sus grandes dimensiones, el diseño está muy cuidado. Externamente no presenta ninguna estética diferente de los procesadores de tipo torre habituales, pero a medida que vamos explorando sus cualidades podemos ver como han ido solucionando, una a una, todas las deficiencias de las que adolecen estos disipadores hoy en día. Si gran tamaño es sinónimo de buen rendimiento pero pobre diseño y dificultad en el montaje, Ereboss ha conseguido ser una de las pocas excepciones en el ya más que explotado mundo de los disipadores por aire.
Bienvenidos al análisis del Raijintek Ereboss.