Thermaltake lanza al mercado su nueva caja orientada al mundo Gamer, la e-SPORTS Chaser MK-I, que fue presentada en el CEBIT 2011.
Gracias a su experiencia en el mercado de refrigeración para PCs, Thermaltake ha construído un sistema de refrigeración perfecto en su nueva línea de chásis. El diseño de la Chaser MK-I está listo para instalar refrigeración líquida en su interior, permitiendo integrar radiadores de 240mm en la parte superior de la caja retirando el ventilador que viene de fábrica. También incluye agujeros para garantizar la instalación de sistemas de refrigeración líquida externos. Además, su gran espacio interior permite la instalación de disipadores de hasta 18cm de altura, e incluye dos ventiladores «colorshift» de 200mm y un ventilador extra «turbofan» de 140mm. Además, sus patas de 35mm mejoran el flujo de aire de la caja permitiendo la entrada de aire desde la parte de abajo.
Thermaltake ha pensado que los USB 3.0 frontales deben ser conectados internamente a la placa base, y así lo ha llevado a cabo en la Chaser MK-I. Además, ha implementado una docking station hot-swap para discos de 2.5″ o 3.5″. Por si fuera poco, los discos duros y las unidades ópticas se instalan sin herramientas, y cuentan con sistema antivibraciones. Gracias a su sistema de gestión de cables mejorado, se incrementa el flujo de aire global de la caja. Además, en la Chaser MK-I se pueden instalar tarjetas gráficas de hasta 33cm de longitud.
De momento, no se sabe ni el precio ni la disponibilidad de esta supertorre que cuenta con 8 ranuras de expansión PCI, cuatro bahías externas de 5.25 pulgadas, seis bahías internas para unidades de 2.5/3.5 pulgadas, y que tiene unas dimensiones de 567,9 x 237 x 581,6 mm con un peso de 11,6 kilos.