La impresión de documentos es una tarea común en hogares y oficinas, y el costo de los cartuchos de tinta o tóner puede ser caro. Recargar los cartuchos de tinta de una impresora láser puede ser una alternativa económica para extender la vida útil de los mismos, así que a continuación te vamos a explicar cómo puedes recargar el tóner de tu impresora láser.
Antes de nada, debes tener en cuenta que no todos los cartuchos y tóner se pueden recargar. Hay una gran diferencia con los cartuchos y es el tipo de material usado. Pese a que en los cartuchos de las impresoras domestica se usa tinta, en las impresoras láser se usa polvo (literalmente). Es una gran diferencia a la hora de manipularlo porque si no tenemos cierta maña y cuidado, podemos convertir el espacio en el que nos encontremos en un auténtico desastre cubierto por una capa de algo que parece hollín y que no es muy recomendable liberar en el aire.
Así que mirad cómo debéis hacerlo en caso de que queráis recargar vosotros vuestros propios tóner para impresoras láser.
Materiales necesarios
Sin lugar a dudas, lo más importante es el kit de recarga, ya que es el elemento fundamental que está contenido dentro del propio tóner. También serán necesarios otros elementos que te iremos detallando. Nosotros te propondremos varias opciones y tú eliges la que prefieras según tus propias necesidades.
Recarga para impresora láser
A continuación, os hemos seleccionado algunos de los estándares más comunes que podemos encontrar en el mercado de marcas que trabajan este tipo de materiales y recambios. Son los siguientes:
- Octopus 95 gramos Brother: este bote de polvo para impresora está pensado para las impresoras Brother. Es una botella de 95 gramos de polvo que incluye el embudo de llenado y que tiene una capacidad para unas 2.600 páginas.
- HEEPDD 80 gramos HP: si lo que tenemos es una impresora láser de HP, este es el producto recomendado. Nos ofrece un total de 80 gramos y tiene una capacidad para unas 2.000 páginas.
- Polvo tóner para HP: hemos encontrado esta otra opción para las impresoras HP. Podemos adquirir un bote de 80 gramos y se venden packs de hasta cuatro botes.
- VITOTC 40 gramos CMYK Epson: también hemos buscado para impresoras Epson, que es otra de las grandes marcas. Tenemos en este caso un bote de negro, de cian, de magenta y de amarillo, cada uno de 40 gramos. Se incluyen los chips necesarios para el correcto funcionamiento.
- HP 143A W1143AD: es un pack oficial de HP pensado para las Neverstop Laser 1000 y 2000 Series. Este kit viene con dos recargas, en las que cada una nos ofrece hasta 2.500 páginas impresas.
Otros materiales útiles
Además de lo anterior, que es el eje fundamental del procedimiento que os vamos a contar, sería bueno tener a mano los siguientes objetos que están enfocados a, por un lado, manipular el propio tóner para extraer el polvo y, por otro, protegernos nosotros de esas partículas que podrían quedar en suspensión una vez que nos metemos en faena:
- Paños de microfibra: son muy útiles dentro de la informática para limpiar superficies. Estos son perfectos para limpiar el monitor y también, para cualquier otro uso general
- Guantes látex: el polvo de impresora mancha bastante y es tóxico. Es por esto mismo que necesitamos proteger nuestras manos debidamente. Tenemos un kit de guantes no muy grande, tampoco vamos a necesitar enormes cantidades de estos.
- Mascarillas: como decíamos, el polvo es toxico, así que no es recomendable inhalarlo. Se suele recomendar estar en una zona bien ventilada y usar mascarilla durante este proceso.
- Destornilladores: algunos tóneres requieren de este elemento para retirar el tapón de llenado o de unas pinzas. Este kit es genial, ya que tiene muchas puntas y otros elementos útiles para esta tarea y cualquier otra realizada con el mantenimiento.
Prepara la impresora y los materiales
Siempre, en la informática, antes de iniciar cualquier tarea, se requiere de una cierta preparación. Rellenar el tóner de una impresora láser también requiere de un proceso previo. Te lo vamos a detallar a continuación:
- Leer las instrucciones: lo primero será leer y seguir las instrucciones del fabricante del tóner. Antes de nada, debemos asegurarnos que se puede recargar y saber que materiales se pueden usar. También, se nos indicará por donde realizar la recarga y otras informaciones relevantes.
- Comprar los materiales: para realizar este proceso, vamos necesitar una serie de materiales. Concretamente una recarga de polvo, guantes de látex, destornilladores, trapos y un sitio adecuado para el proceso de recarga.
- Preparar la superficie: será importante que la superficie sea plana, para trabajar con mayor comodidad. Es muy recomendable, si vamos a hacerlo en la mesa de nuestro domicilio, cubrirla con un plástico. Dicho proceso evitara ensuciar y dañar la mesa.
- Quitar el tóner de la impresora: deberemos en todos los casos retirar el tóner de la impresora láser. Es raro que actualmente un cartucho de tóner no permita la recarga, pero si fuera así, deberemos buscar uno según el modelo de la impresora láser.
- Proteger las áreas sensibles: debemos saber que el tóner tiene algunas áreas sensibles que no se pueden dañar. Lo habitual y más recomendable, es cubrir las zonas que se puedan dañar con cinta o plástico. Estas áreas más delicadas son: los circuitos eléctricos, los contactos y los orificios de llenado.
Tras estos pasos de preparación, se podrá comenzar con el proceso de recarga el tóner de la impresora láser.
Cómo rellenar un cartucho o tóner
Cada fabricante de impresora láser tiene un método propio de recarga del tóner, así que varía según marca e, incluso, según modelo. Es importante leer las instrucciones del fabricante o buscar información. Normalmente, el proceso esencialmente es este:
- Tener una recarga de tóner, como las que hemos comentado. Habitualmente, estas recargas suelen ser una botella con un pequeño embudo y un manual de instrucciones (que ocasionalmente no se incluye).
- Prepararemos la zona de trabajo, cubriendo la superficie de trabajo con un plástico o materiales similares que protejan la zona. También, deberemos equiparnos con los guantes y la mascarilla.
- Vamos a situar la impresora en una superficie plana, limpia y estable, pare poder retirar el tóner con seguridad.
- Debemos abrir la tapa donde se encuentra el tóner, que normalmente está en la zona superior de la impresora.
- Procedemos retirar el tóner con cuidado de no dañar este elemento y la propia impresora.
- Buscar el tapón de llenado del tóner, que suele estar en la zona superior del tóner o en un lateral.
- Seguimos las instrucciones del fabricante de la impresora o del kit de recarga (si se incluye) para el llenado.
- Limpiamos el cartucho con un paño para eliminar el exceso de tóner que se haya podido dar.
- Colocamos nuevamente el tapón y verificaremos que este bien puesto.
- Localiza la tapa de recarga en el cartucho de tóner. Esta tapa se encuentra generalmente en la parte superior o lateral del cartucho y se puede quitar con facilidad.
- Sigue las instrucciones del kit de recarga de tóner para preparar el tóner en polvo.
- Limpia el cartucho de tóner con una toalla de papel para eliminar cualquier exceso de tóner.
- Colocamos otra vez la tapa y verificamos que está bien ajustada.
- Introducimos el tóner nuevamente en la impresora y cerramos la cubierta.
- Ahora, realizaremos una prueba de impresión para verificar que funciona correctamente.
Siempre hay que seguir las instrucciones del kit de recarga y actuar con precaución, ya que el polvo de impresión mancha y es tóxico. En caso de no sentirte seguro con este proceso, puedes buscar un servicio de recarga que haga el trabajo.
Cuidados posteriores tras recargar el tóner
Tras finalizar la recarga del tóner, hay ciertas cosas que podemos hacer para su mantenimiento. Esto sirve para alargar la vida del cartucho y también obtener una mejor calidad en la impresión. Estas prácticas son:
- Agitar el tóner antes de volverlo a instalar en la impresora, para verificar que el polvo este uniformemente distribuido y no apelmazado, por lo que la impresora se vería en dificultades para llevar a cabo cualquier trabajo de impresión.
- No tocar la superficie del tambor del cartucho del tóner con las manos, algo que puede generar manchas y afectar a la calidad de la impresión.
- Antes problemas en la calidad de la impresión, como puedan ser manchas o líneas borrosas, realizaremos una limpieza del cartucho. Dentro del manual de la impresora debería aparecer el proceso.
- Almacenar el cartucho en un lugar fresco y seco, evitando la luz directa del Sol y la humedad.
- No someter el cartucho a temperaturas extremas. Por ejemplo: dejarlo dentro del coche en un día muy caluroso.
Obviamente, nada garantiza que siguiendo estos pasos alargues la vida útil del tóner. Lo que haces es tratar de que dure la mayor cantidad de tiempo posible en las mejores condiciones.
Rellenar de cartuchos de tinta
No, para nada. Por si no lo sabes, una impresora láser basa su funcionamiento en un tóner que tiene tinta en polvo, que se calienta y se adhiere al papel mediante este proceso, mientras que una impresora de inyección o chorro de tinta utiliza cartuchos que tienen tinta líquida en su interior. A grandes rasgos, la mayoría de los cartuchos de tinta para impresoras de inyección no permiten recarga, pero los que sí la admiten tienen un proceso bastante más sencillo que este que os hemos contado.
Si quieres hacer una recarga de cartuchos de tinta, lo primero que debes saber es que casi ningún cartucho original permite hacerlo, así que te tocará buscar y comprar cartuchos compatibles con tu impresora que sí que permitan rellenar. Cuando los tengas, luego es cuestión de comprar la tinta, que viene en unos pequeños paquetes de plástico, y con la ayuda de un pequeño embudo que suele venir incluido se mete el líquido en el cartucho, y listo.
Es un proceso bastante sencillo, pero con el que hay que tener cuidado, ya que es bastante fácil que de lo contrario la tinta salte y termine poniéndolo todo perdido, pero a grandes rasgos el proceso es fácil y los riesgos mucho menores, solo hay que tener en cuenta lo que ya os hemos comentado, que hay que comprar unos cartuchos especiales que permiten rellenarlos.
Cómo rellenar los tanques de tinta de una impresora
En el mercado podemos encontrar impresoras de 3 tipos: láser, de cartuchos de tinta y de tanques de tinta. Como hemos comentado más arriba, recargar el cartucho de una impresa láser es un proceso relativamente sencillo, sin embargo, únicamente podemos hacerlo cuando se trata de cartuchos de negro. Rellenar los cartuchos de tinta ya gastados es un proceso bastante más laborioso y no siempre funciona, ya que los fabricantes de impresoras no paran de introducir nuevas funciones en los chips para evitar que se reutilicen cartuchos ya gastados.
Si realmente queremos ahorrar mucho dinero a la hora de imprimir, lo mejor que podemos hacer es utilizar una impresora con tanques de tinta. Este tipo de impresoras son la mejor opción si realmente queremos ahorrar mucho dinero ya que un pack de 4 botellas de tinta equivale a 72 cartuchos de cualquier impresora y cuestan exactamente lo mismo que un simple cartucho para una impresora, tanto de color como de negro.
Si bien es cierto que estas impresoras son más caras que las del tipo láser y las que funcionan con cartuchos, a la larga, merece la pena realizar la inversión, especialmente si imprimimos muchos documentos e incluso fotografías. Los fabricantes que ofrecen un mayor número de impresoras de tanques de tinta son tanto Canon como Epson, Recargar un tanque de tinta de este tipo de impresoras, es un proceso muy sencillo ya que estás impresoras están diseñadas para permitir que los usuarios los recarguen de forma sencilla.
Lo único que hay que hacer, una vez hemos comprado los correspondientes recambios (vienen en cuatro colores independientes) es extraer el tanque de tinta y vaciar el tuyo con la tinta en el interior, un proceso que nos llevará unos pocos segundos para cada uno. Además, podemos utilizar cualquier tipo de tinta, siempre y cuando sea compatible, por lo que no necesariamente debemos comprar la tinta original que nos propone el fabricante.