Fueron muchos, muchísimos los usuarios que se animaron a comprar una Raspberry Pi cuando se pusieron tan de moda, pero tras «trastear» con ella durante un tiempo al final terminaron olvidándola en un cajón. Sin embargo, se trata de un dispositivo muy útil y polifacético así que te vamos a sugerir una serie de proyectos que puedes poner en marcha gracias a su hardware. ¿Quieres conocer nuestras propuestas?
¿Qué puedo hacer con una Raspberry Pi?
Si eres aficionado a este tipo de dispositivos seguramente hayas leído una cantidad ingente de posibles empleos que se les puede dar, pero algunos son demasiado complicados como para que alguien con conocimientos básicos pueda darle una verdadera aplicación que resulte útil. El más conocido de todos a nivel doméstico no es otro que el de transformar este ordenador de una sola placa en un sistema para emular sistemas de videojuegos antiguos.
¿Qué nuevos usos puedo darle?
No obstante, no es el único uso que tiene y es por ello que hemos decidido proponeros una serie de proyectos para los que podéis utilizar vuestra Raspberry Pi y darle, por tanto, una segunda vida si la tenéis abandonada. No os preocupéis, todos los ejemplos que os vamos a dar a continuación son sencillos y no requieren de conocimientos avanzados más allá de tener uno de estos Single Board Computer y haber trasteado con ellos.
Así que como suponemos que ya tenéis una Raspberry Pi, entendemos que no partís estrictamente de cero.
Conviértela en un PC de bajo coste
Se trata de una excelente idea, ya que con poco dinero puedes crearte si quieres una oficina con varios ordenadores a un coste muy bajo o improvisar una clase de informática en un instituto o una escuela. Eso sí, vas a necesitar los periféricos externos del PC como son el monitor, el teclado y el ratón. La Raspberry Pi hará las veces de torre de tu improvisado PC y te será suficientemente buena para tareas sencillas.
Eso sí, no podrás instalarle Windows a no ser que sea la versión para ARM y ni tan siquiera esta es del todo compatible, así que tendrás que hacer uso de software libre, es decir, una distribución de GNU/Linux adaptada que no te costará encontrarla y tienes para ella una gran cantidad de software.
Sin embargo, en el caso de que seas un nostálgico de ordenadores antiguos como son el Commodore Amiga o el Atari ST, podrás darle la personalidad de esos clásicos con distribuciones como Pimiga o Rastarí.
Realmente, el sistema funcionará bastante lento en comparación con un PC, pero si no tienes unas exigencias demasiado altas el trabajo puede hacerlo igual y tendrás un ordenador para ofimática, multimedia y navegación por Internet por, realmente, poquísimo dinero; y es que la Raspberry Pi, un monitor, teclado y ratón baratos lo puedes conseguir por poco más de 100 euros y conseguirás un sistema totalmente funcional, así que si no eres exigente es algo que puede llegar a merecer mucho la pena.
Un servidor de impresión
El segundo de los proyectos que te proponemos para tu Raspberry Pi te interesará, ya que te permite tener una impresora de red por muy bajo precio. Es decir, puedes complementarlo con el caso anterior y tener uno de los SBC conectados a una impresora que no sea inalámbrica y trasformarla en una que sí lo sea. Simplemente enchúfala a tu Raspberry mediante USB y. con un software como CUPS, podrás convertirla en una impresora inalámbrica, con la Raspberry Pi haciendo las veces de servidor de impresión. Esto es ideal si tienes una pequeña oficina o quieres trabajar cómodamente sin tenerla pegada al ordenador a través de un cable USB.
Tened en cuenta que una impresora de red, hace no muchos años, podría llegar a costar varios miles de euros en el mercado y esta solución es mucho mejor que las de antaño, ya que no solo nos libera de cables, sino que además nos permite imprimir documentos desde el teléfono móvil o la tableta. Por lo que se trata de uno de los proyectos más útiles para los que puedes usar tu Raspberry Pi.
Convierte tu televisión en una Smart TV
Muchas versiones de la Raspberry Pi ya venían con una tarjeta SD con Raspbian y KODI preinstalados. Como sabrás, KODI es un sistema que permite convertir la Raspberry en un servidor multimedia de manera sencilla, y por supuesto si la conectas a tu TV también sirve para transformarla en toda una Smart TV. De hecho, gracias al arranque dual con Raspbian también tendrás YouTube, Netflix, Internet, etc.
Igualmente, puedes instalar Plex Server en una Raspberry Pi para poder ver en cualquier parte tus series y películas, si bien es cierto que existen otros sistemas de gestión multimedia menos exigentes en cuanto a hardware que Plex (como KODI, el más conocido) y que funcionarán bastante mejor.
Consigue toda una consola retro
Uno de los usos más populares de Raspberry Pi es para la de crear una máquina arcade o consola retro, para lo que existen las instalaciones RetroPie y Recalbox. Tienes otros, pero todos necesitarán que cuentes con un mando compatible que necesitará una configuración previa, así que mejor no complicarse la vida. En estos sistemas se pueden emular muchas plataformas, desde los juegos clásicos de MS-DOS hasta los de Commodore 64, PS2, Dreamcast, GameCube, etc.
Igualmente, existen carcasas y proyectos completos que te permitirán convertir tu Raspberry Pi en una máquina arcade a tamaño completo, o incluso en una Game Boy (o algo parecido). Aquí ya depende de tu creatividad lo que quieras conseguir.
Servidor para Minecraft
Los posibles usos «gaming» que puedes darle a tu vieja Raspberry Pi no se limitan a los juegos retro, y es que un servidor de Minecraft no requiere ni tan siquiera una interfaz gráfica compleja, dado que se ejecuta en modo consola. Es decir, a través de una interfaz de texto. Su trabajo no es otro que el de gestionar la posición de los diferentes jugadores en un mismo mapa y lo que están haciendo, para situarlos a todos dentro de la misma partida.
Esto es ideal por el hecho de que le evita a nuestro PC tener que preguntarles al resto de jugadores uno por uno. Simplemente, el servidor envía una solicitud a todos al mismo tiempo, de tal manera que se coordinan todos los movimientos y no existen problemas. Además, dado que Minecraft Server es una aplicación Linux nativa, lo podrás hacer funcionar en cualquier versión de Raspberry Pi.
Crear un bot para Twitter, Discord u otros
Twitter es una red social de lo más variopinta, en parte porque está llena de bots: programas que se crean con la intención de publicar mensajes automáticamente. Algunos de estos bots son bastante útiles y sirven, por ejemplo, para publicar actualizaciones en tu página web, pero por desgracia muchos son molestos e incluso desagradables.
Sea cual sea la finalidad para la que quieras crear tu propio bot, podrás hacerlo con tu Raspberry Pi, aunque en este caso lo más común es utilizar una aplicación de Python (para lo que existe «Twython») que requiere ciertos conocimientos de programación. Lo mismo sucede con Discord (ya que su API es accesible) y muchos otros sitios web.
Como herramienta de monitorización
Otro de los usos más interesantes que puedes darle a la Raspberry Pi es para crear una potente herramienta de monitorización, tanto para la red local como para, por ejemplo, que te lleguen alertas por correo si la temperatura de tu CPU sobrepasa cierto límite. Una de las herramientas más populares para llevar este proyecto a cabo es Nagios, que es de código abierto y muy sencillo de instalar y configurar.
Eso sí, para llevar a cabo este proyecto te recomendamos una Raspberry Pi 2 o superior, ya que demanda bastantes recursos de procesador.
Si eres de los que en su día compró una Raspberry Pi pero la tenías abandonada en un cajón, existe una gran cantidad de posibles usos que le puedes dar, y con ellos ya no solo podrás sacarle partido, sino que conseguirás en cierto modo hacer tu vida más fácil con solo un poco de esfuerzo en la configuración.
Una impresora 3D
Uno de los usos más comunes, y paradójicamente menos conocidos para el gran público de las Raspberry Pi, es su uso industrial. Y un ejemplo de ello es que se puede crear una impresora 3D poniéndola como elemento central para controlar las diferentes partes mecánicas con este potente SBC. En realidad existen muchos dispositivos improvisados en talleres e incluso en fábricas de gran envergadura que han sido diseñados y construidos por ingenieros para una tarea concreta donde esta placa es utilizada.
En otro orden de cosas, también puedes darle la capacidad de control remoto a una impresora sencilla y de bajo coste con este proyecto.