A la hora de elegir nuestro próximo monitor gaming, es normal que intentemos buscar aquel que mejor rendimiento nos va a dar. Y, no es raro dejarnos engatusar por las altas cifras que dan algunos fabricantes. Especialmente, en lo que hace referencia a la tasa de refresco vertical de la pantalla. Sin embargo, hay un concepto en el que el valor, cuanto más pequeño es, mejor. Se trata del tiempo de respuesta del monitor. En este artículo vamos a ver de su importancia a la hora de tener un monitor gaming.
Como todos sabréis, el tiempo de respuesta de un monitor es lo que le cuesta a un píxel de su matriz, cambiar de color. Este valor se suele dar medido en ms (milisegundos). Por tanto, cuanto más rápido es este cambio, mejor es la calidad de la imagen que el monitor muestra. Porque, un tiempo de respuesta elevado en los píxeles de la matriz, puede crear imágenes borrosas. Especialmente si vuestros juegos son con acciones muy rápidas.
Qué tipos de monitores tienen mejor tiempo de respuesta
El tiempo de respuesta de un monitor es el tiempo, medido en milisegundos, entre el final del renderizado del frame por parte de la GPU hasta que nuestros ven la imagen en pantalla. Esta depende en primer lugar del método de transmisión de la GPU al monitor, del tipo de panel utilizado y el tiempo de cambio de los píxeles.
Como bien sabréis a estas alturas, los monitores gaming pueden tener diferentes tipos de matrices. Algunas suelen ser más rápidas que otras de manera natural. Por cómo se desarrollaron desde el principio. Tenemos una gran cantidad de opciones en el mercado de los monitores gaming, donde la velocidad entra en conflicto con la calidad de imagen.
Por orden de rapidez, los paneles con mejor tiempo de respuesta son:
- OLED: en este tipo de paneles, el tiempo de respuesta es prácticamente inexistente. Dado que se mide como 0,1 ms. Lo malo es que todavía son paneles bastante caros.
- TN (Twisted Nematic): es un panel barato de producir, que siempre ha sido muy rápido en su tiempo de respuesta. Su tiempo suele ser de 1 ms generalmente. Lo malo es que su calidad de imagen deja bastante que desear.
- VA (Vertical Alignment): es un panel bastante decente (unos 4 ms), que da bastante mejor calidad de imagen que los TN.
- IPS (In-Plane Switching): es el panel con peor tiempo de respuesta (entre 6 y 12 ms). Pero, también es verdad que es el panel con mejor reproducción de colores.
Tanto para los paneles VA como para los IPS se han desarrollado tecnologías que permiten que su tiempo de respuesta se acerque al 1 ms de los paneles TN. Sin embargo, hay que tener en cuenta que, al no ser una característica nativa del panel, el resultado final nunca será tan bueno como en un panel nativo.
Pero, ¿es realmente algo tan importante?
El tiempo de respuesta de los píxeles en un monitor gaming importa más o menos según el tipo de juegos que usemos. Un juego de estrategia que no sea en tiempo real, es decir, por turnos, va a tener unos movimiento muy lentos y pausados en pantalla, por lo que se hace menos crucial un tiempo de respuesta rápido. Pero un shooter por norma general es el escenario contrario, movimientos bruscos, giros de cámara abruptos y cambios continuos de escena.
Un tiempo de respuesta muy bajo implica que el monitor pueda representar correctamente en pantalla todos los movimientos sin distorsión, sin retraso y por supuesto sin efectos adversos indirectos. Y es que el tiempo de respuesta también ayuda a paliar otros efectos negativos que pueda tener un panel por su tecnología.
Como ya hemos dicho, un tiempo alto puede producir imágenes borrosas. Sin embargo, esto no es aplicable a todos los tipos de juegos. Por ejemplo, si eres de los que te gusta jugar contra el ordenador. O tus juegos suelen ser pausados. Un tiempo de respuesta alto, no va a ser molesto para ti. Ni te va a impedir disfrutar con el juego.
Pero, por otro lado, si tu tipo de juego es muy rápido. O te gusta jugar online a juegos como el CS:GO, Fornite, Overwatch, Rocket League, que requieren movimientos muy rápidos en la pantalla. En este tipo de juegos sí es posible que podáis apreciar el tiempo de respuesta menor de un monitor gaming, el cual os va a ayudar si jugáis en competitivo y en especialmente los e-sports.
También debemos de considerar que, hay usuarios con mayor o menor percepción visual. En la gran mayoría de casos, los usuarios no nos suelen llamar la atención las imágenes borrosas. Pero hay otros usuarios a los que sí les llaman poderosamente la atención. Para estos usuarios, un monitor gaming con un baja respuesta, es lo ideal. Eso sí, deben asegurarse tener una tarjeta gráfica con la suficiente potencia para renderizar a tal tasa de refresco.
G-SYNC, FreeSync y respuesta del monitor
El refresco vertical puede ser controlado tanto por el propio monitor, o en el caso de tener un sistema de refresco variable, como por las tecnologías NVIDIA G-SYNC o AMD FreeSync, con las que es controlado por la propia GPU, lo que se traduce en que que es la tarjeta gráfica la que marca cuándo empieza cada fotograma y, en definitivas cuentas, sincroniza la frecuencia de refresco con los fotogramas por segundo que se generan, eliminando los efectos de tearing y stuttering.
En los antiguos monitores de tubo existían dos periodos donde no se mostraba la imagen pero se tenían que tener en cuenta en cuanto al timing. Uno es el HBlank que mide el salto de línea y reposicionamiento a la izquierda del haz de electrones. El otro es la colocación del haz de electrones para enviar una nueva imagen. En el caso de las pantallas LCD no hay haz de electrones y el tiempo de mostrar una nueva imagen en pantalla corresponde al tiempo de cambio de los píxeles.
El pixel switch es el tiempo que tarda cada tipo de panel en cambiar el color de sus píxeles, por desgracia según el tipo de panel que utilicemos la cantidad de tiempo en cambiar cada píxel del mismo.