NVIDIA GeForce RTX 5090 FE, review: la gráfica más potente jamás creada

Tras meses de rumores y filtraciones, por fin están aquí: las NVIDIA GeForce RTX 50 Series ya son oficiales y vienen encabezadas por la RTX 5090, la gráfica comercial más potente jamás creada y la primera en superar la barrera de los 20.000 núcleos. De nuevo NVIDIA ha contado con nosotros y nos ha enviado el modelo RTX 5090 Founders Edition, así que en este artículo os la vamos a enseñar de primera mano y os vamos a contar qué tal funciona.
La RTX 5090 no solo es la gráfica más potente de esta generación de NVIDIA, sino que también viene cargada de nuevas tecnologías. Como la mayoría ya sabréis se estrena la arquitectura Blackwell, pero también otras tecnologías como DLSS 4 (con Multi Frame Generation) y un montón de cosas más, incluyendo la demostración de por qué NVIDIA ha invertido tanto en Inteligencia Artificial en los últimos tiempos. Pero dejémonos de preámbulos y vamos a entrar ya en materia.
Si quieres saber más sobre todas las novedades de la arquitectura Blackwell, te recomendamos leer el artículo específico sobre NVIDIA Blackwell que hemos publicado donde te contamos todos los detalles.
NVIDIA GeForce RTX 5090 Founders Edition, especificaciones técnicas
RTX 5090 | RTX 5080 | RTX 5070 Ti | RTX 5070 | |
---|---|---|---|---|
CUDA Cores | 21760 | 10752 | 8960 | 6144 |
Shader Cores | Blackwell | Blackwell | Blackwell | Blackwell |
Tensor Cores (IA) | 5ª Gen 3352 TOPs | 5ª Gen 1801 TOPs | 5ª Gen 1406 TOPs | 5ª Gen 988 TOPs |
Ray Tracing Cores | 4ª Gen 318 TFLOPS | 4ªGen 171 TFLOPS | 4ªGen 133 TFLOPS | 4ªGen 94 TFLOPS |
Boost Clock | 2.41 GHz | 2.62 GHz | 2.45 GHz | 2.51 GHz |
Base Clock | 2.01 GHz | 2.30 GHz | 2.30 GHz | 2.16 GHz |
Memoria | 32 GB GDDR7 | 16 GB GDDR7 | 16 GB GDDR7 | 12 GB GDDR7 |
Bus de memoria | 512 bit | 256 bit | 256 bit | 192 bit |
Ancho de banda | 1792 GB/s | 960 GB/s | 896 GB/s | 672 GB/s |
Soporte monitor | 4K a 480 Hz 8K a 120 Hz | 4K a 480 Hz 8K a 120 Hz | 4K a 480 Hz 8K a 120 Hz | 4K a 480 Hz 8K a 120 Hz |
Dimensiones (modelos Founders Edition) | 304 x 137 mm 2 slots | 304 x 137 mm 2 slots | N/A | 242 x 112 mm 2 slots |
TGP | 575W | 360W | 300W | 250W |
Alimentación | 1x600W PCIe 5 | 1x450W PCIe 5 | 1x300W PCIe 5 | 1x300W PCIe 5 |
Fuente recomendada | 1000W | 850W | 750W | 650W |
PVPR (España) | 2.369€ | 1.190€ | 889€ | 654€ |
En la tabla que hemos colocado encima de estas líneas podéis ver las especificaciones técnicas oficiales de todas las nuevas gráficas de la serie Blackwell que han presentado inicialmente, por supuesto con la RTX 5090 a la cabeza.
Estamos ante una gráfica que, por primera vez, supera la barrera de los 20.000 núcleos, concretamente aunando 21.760 núcleos CUDA en un solo chip. El chip se llama GB202 (concretamente el modelo es GB202-400-A1), fabricado por TSMC con una litografía de 4nm y que contiene la friolera de 92.200 millones de transistores.
Como ya supondréis es una gráfica que se basa mucho en la IA, y para ello NVIDIA ha incorporado 680 Tensor Cores de 5ª generación capaces de generar hasta 3.352 TOPS de potencia para IA. También tiene 170 RT Cores de 4ª generación para trazado de rayos en tiempo real, y para completar sus especificaciones técnicas, además de los 21.760 Shading Units la RTX 5090 incorpora 680 TMUs, 192 ROPs y 170 SMs, con 128 KB de caché L1 por SM y 88 MB de caché L2.
En cuanto a su configuración de memoria, la RTX 5090 estrena la generación GDDR7. Incorpora en total 32 GB de VRAM con un bus de 512 bit que ofrecen un ancho de banda de 1,79 TB/s.
Para terminar con el apartado técnico, esta gráfica requiere de un conector PCIe 5 (12VHPWR) de 16 pines para funcionar, ya que su TGP es de 575W, el más alto hasta la fecha en una tarjeta gráfica. NVIDIA recomienda contar con una fuente de alimentación de 1.000 vatios para darle servicio, aunque dependiendo del resto del hardware de tu PC podría ser necesario incluso una mayor potencia.
Unboxing y análisis externo
Aunque ya os enseñamos esta gráfica el día 20 de enero, que es cuando NVIDIA levantó el NDA para los unboxing, no podemos hacer un análisis en profundidad de un producto sin enseñároslo (además, ahora podemos enseñaros imágenes de la gráfica montada y en funcionamiento, cosa que antes no podíamos).
El modelo Founders Edition de la RTX 5090 viene en una caja de cartón duro y color neutro, en cuya zona inferior no es que haya muchas pistas de lo que hay en su interior. Bueno, hay una pegatina en la parte trasera, y bajo la tira de apertura tenemos el eslogan «Inspired by Gamers. Enhanced by AI. Build by NVIDIA».
Todo el embalaje es de cartón 100% reciclable, libre de plásticos, denotando el compromiso adquirido ahora por NVIDIA. Al abrir la caja, encontramos otra sub-caja de color blanco y con la forma de la gráfica.
Bajo esta caja blanca (o gris claro más bien) tenemos una pequeña cajita con los accesorios incluidos.



Accesorios que consisten en un adaptador de alimentación para usar cuatro (sí, cuatro) conectores PCIe de 8 pines si la fuente de alimentación no tiene conector 12VHPWR. También viene un escueto manual de instrucciones para la instalación de la gráfica.



El sub-embalaje de color gris tiene como decíamos la forma del disipador Founders Edition, y en bajorrelieve podemos ver «GeForce RTX 5090», diciéndonos ahora sí el producto que hay en el interior.
Hay que retirar ambos laterales para acceder al interior, y encontramos por supuesto la RTX 5090 Founders Edition perfectamente enclaustrada y protegida.
Aquí está el flamante nuevo buque insignia de NVIDIA. Como ya os contamos anteriormente, el disipador Founders Edition es bastante más compacto que el de la generación anterior, especialmente por su grosor, que ahora es de solo dos slots, algo muy de agradecer. Sin embargo, es una gráfica bastante pesada, pero afortunadamente es también muy rígida así que dudamos que llegue a doblarse por el peso.
En la cara inferior (o al menos la que quedará hacia abajo cuando la instalemos en el PC) encontramos los dos ventiladores axiales de 7 aspas, bastante anchas e inclinadas para generar bastante flujo y presión estática. Hay un cambio relevante en este nuevo disipador, y es que el aire que empujan los ventiladores sale por el lado opuesto sin restricción.
Si vamos al lado opuesto, encontramos las rejillas de láminas de aluminio de color negro por donde saldrá el aire caliente empujado por los ventiladores. En el centro hay una X decorativa que se iluminará en color blanco cuando el dispositivo esté en funcionamiento.
Esta es la zona que queda hacia arriba y por lo tanto la más visible, y NVIDIA ha aprovechado para poner una serigrafía plateada con el modelo: RTX 5090.
Vamos a la parte de arriba, donde encontramos el logo GeForce RTX en un lado que se iluminará en color blanco cuando la gráfica esté en funcionamiento. A su izquierda, el conector de alimentación que viene girado 90 grados y además inclinado, algo que hace que sea más fácil conectar y desconectar, pero también provoca que sea más complicado enrutar el cable para que no quede por medio. Hacia el centro, una rejilla que NVIDIA ha llamado «salida direccional lateral», que ayuda a evacuar el aire caliente del interior. Recordemos que el disipador de esta gráfica tiene tecnología de cámara de vapor.



En la zona exterior no está la típica rejilla de ventilación, pues como hemos explicado el disipador de este modelo Founders no lo necesita ya que el aire caliente sale hacia arriba y hacia los lados por las rejillas. Aquí tenemos las salidas de vídeo: un HDMI y tres DisplayPort.
En la zona inferior, aparte del conector PCIe 5.0 tan solo hay otra «salida direccional lateral». No sé si tiene mucho sentido colocar una rejilla ahí teniendo en cuenta que estará pegado a la placa base… quizá sea más bien para quienes coloquen la gráfica en vertical.


Como decíamos al principio, este modelo de disipador es bastante más compacto que el de la generación anterior, pero eso no significa que sea pequeño precisamente: mide 304 mm de largo, 137 mm de alto y 40 mm de ancho (dos slots).



De todos modos, es una gráfica que entra perfectamente en prácticamente cualquier caja de PC de formato semitorre, como la Corsair Obsidian 4000D que utilizamos nosotros.
Eso sí, mirad lo que os decíamos de que tenga el conector girado 90 grados: hace que el cable quede un poco «por medio» y que incluso tape el logo iluminado dependiendo del ángulo en el que lo mires. Tampoco es que haya forma de hacer que el cable quede perfectamente recto, no hay dónde engancharlo.
Vista la gráfica, ha llegado la hora de ponerla a prueba, ¿no?
Probando la NVIDIA GeForce RTX 5090 Founders Edition
Para probar esta nueva NVIDIA GeForce RTX 5090 Founders Edition hemos utilizado nuestro banco de pruebas habitual, consistente en el siguiente hardware:
- Intel Core Ultra 9 285K
- ASUS ROG MAXIMUS Z890 APEX
- 2x24GB Corsair Vengeance RGB DDR5 CUDIMM 8.400 MHz
- Corsair Nautilus 360 RS ARGB
- TeamGroup Cardea A440 Pro 2 TB
- Corsair RM1000x Swift 1000W
El sistema operativo utilizado ha sido Windows 11 Pro x64 con todas las actualizaciones instaladas, mientras que el driver gráfico empleado ha sido el que NVIDIA nos ha proporcionado para este análisis, el 571.86 Game Ready que estará disponible en el momento del lanzamiento.
Como siempre y antes de nada, toca mostraros un par de capturas para que veáis el hardware utilizado, empezando por CPU-Z para que podáis ver procesador, placa base y memoria RAM.
Y no puede faltar una captura de GPU-Z para que podáis ver los parámetros de esta RTX 5090, si bien es cierto que en el momento de analizar la gráfica, el software nos advertía de que la versión actual no la reconocía correctamente, y es obvio que no detecta datos como la litografía o la memoria.
Visto el equipo que vamos a utilizar para probar esta nueva generación de NVIDIA, pasemos con las pruebas.
Consumo, ruido y temperatura
Uno de los datos que más preocupa cuando tratamos con una tarjeta gráfica tope de gama es el consumo, y es que de hecho este modelo tiene el TGP más alto que hemos visto nunca hasta la fecha, con 575W, un dato que llevará al límite lo que el conector PCIe 5.0 de la fuente de alimentación es capaz de proporcionar.
Con la temperatura pasa un poco lo mismo: estamos ante una gráfica con un consumo muy elevado, y además NVIDIA ha reducido las dimensiones de su disipador. Aunque obviamente como hemos explicado ha mejorado notablemente la tecnología de disipación de calor, sigue siendo un aspecto muy a tener en cuenta.
Este es el resultado de temperatura y consumo máximos que hemos registrado durante nuestras pruebas; has de tener en cuenta una cosa, y es que en las pruebas a las que sometemos al equipo ponemos todo al máximo, lo que significa que no es una «situación normal de uso». Con esto queremos deciros que si os compráis una RTX 5090 FE para vuestro PC personal, generalmente nunca llegaréis ni a estos consumos ni a estas temperaturas.
Comencemos hablando de la temperatura. Según los datos registrados, la gráfica ha llegado a ponerse a 82,9ºC en la GPU, una temperatura que realmente es bastante alta pero que dista de ser preocupante. Sí que es más preocupante ver que la memoria gráfica ha registrado 100ºC, aunque viendo también que el software ha registrado el hot spot a 255ºC (además, todo el tiempo, permanentemente desde el principio) es posible que el software no haya logrado detectar correctamente los sensores. En cualquier caso, según estos datos la RTX 5090 FE es una gráfica «calentita», desde luego.
En términos de ruido, hay que decir que en ningún momento es ruidosa. Para nada. Los ventiladores aumentan su velocidad a medida que sube la temperatura, y ni siquiera con la gráfica dándolo todo hacen un ruido que moleste. Para nosotros, NVIDIA tiene un sobresaliente en este aspecto.
Finalmente, hay que valorar el consumo. Ya sabíamos que con 575W de TGP esta gráfica era muy «tragona», y esto se ha visto confirmado con los datos registrados: 582,9W de consumo global, con hasta 572,7W entregados a través del conector 12VHPWR de 16 pines. Mucho, pero es lo que esperábamos, claro.
Como comentario final, hemos realizado las pruebas con una fuente de 1.000 vatios de potencia, y con un medido de consumo de pared al que solo estaba conectado el PC en su totalidad (es decir, es el consumo de todo el equipo, CPU, GPU, RAM, ventiladores, refrigeración líquida, etc.), ha llegado a un máximo de 897 vatios, por lo que efectivamente una fuente de 1.000 vatios no solo es recomendada para este equipo, es que es lo mínimo.
Benchmarks sintéticos
Vamos a comenzar con las pruebas en benchmarks sintéticos, es decir, programas diseñados para medir el rendimiento asignando puntuaciones arbitrarias, y tratándose de una tarjeta gráfica no hay nada mejor que la suite 3DMark, comenzando por Fire Strike en sus tres vertientes, una prueba que va a medir el rendimiento de la gráfica bajo la API DirectX 11 a resoluciones 1080p, 144op y 2160p.



Como podéis apreciar viendo estos resultados, la RTX 5090 se desenvuelve de forma excelente bajo DirectX 11, superando con creces a todas las demás gráficas a medida que aumenta la resolución. Eso sí, en Fire Strike normal, a 1080p, no entendemos por qué el resultado ha sido tan bajo en comparación; hemos repetido varias veces la prueba y nos hemos asegurado de que todo estuviera actualizado.
Pasamos ahora a una prueba similar pero utilizando la API gráfica DirectX 12, con Time Spy.


Estos resultados ya sí que son lo esperable, con la RTX 5090 batiendo a todas las demás por bastante margen, y demostrando su hegemonía como la tarjeta gráfica más potente del momento.
Continuamos con la suite 3DMark con la prueba Steel Nomad, que mide el rendimiento global de cualquier PC Gaming.
Y la prueba Speed Way, que mide el rendimiento utilizando trazado de rayos en tiempo real.
Continuamos con Superposition Benchmark, que aunque utiliza el motor gráfico Unigine 2 es una buena representación del rendimiento que podemos esperar de muchos juegos «no tan modernos». Realizamos la prueba con los presets optimizados para resoluciones 4K y 8K.


Bueno, pues los resultados aquí son abrumadores. Por poner un ejemplo, en la prueba 4K con una RTX 4070 Ti SUPER obtuvimos la mitad de puntos, 19.856, mientras que en 8K la diferencia es todavía más elevada, pues obtuvimos 7.332 puntos. Como podéis ver en las capturas, a resolución 4K la RTX 5090 no bajó nunca de 114 FPS, manteniendo 295 FPS de media. Pero es que a resolución 8K esta bestia no bajó de 100 FPS, manteniendo 138 FPS de media.
Pruebas con DLSS
Aunque obviamente en una sección posterior probaremos esto más a fondo en juegos, hemos querido dedicarle una sección particular a DLSS 4 porque es una de las mayores mejoras de la nueva arquitectura Blackwell, y es algo que podemos ver fácilmente representado con benchmarks como 3DMark DLSS.
Mirad, aquí tenéis la prueba de la RTX 5090 ejecutando el benchmark con DLSS 3.
La mejoría con y sin DLSS es impresionante, pero esperad a ver lo que sucede cuando usamos DLSS 4.
Como podéis apreciar, en ambas pruebas sin DLSS la gráfica saca unos 75 FPS, pero al activar DLSS 3 los FPS suben hasta 252. Ahora bien, activas DLSS 4 y los FPS casi se duplican, llegando a 450… una auténtica salvajada, y ya no solo porque pasemos de 75 a 450 FPS que es una mejora de X6, sino porque casi se duplica la mejoría con respecto a DLSS de anterior generación.
Hemos querido realizar otra prueba comparativa utilizando un juego, en este caso Cyberpunk 2077 que es uno de los más notorios cuando hablamos de rendimiento, ya que es de los títulos más exigentes gráficamente hablando pero que, a cambio, implementan DLSS.
En la captura de arriba podéis ver el resultado utilizando el benchmark interno del juego, a resolución 1440p y con DLSS4: 416 FPS de media. Como referencia, con DLSS 3 esta misma gráfica sacó 218 FPS, y sin DLSS apenas logró mantener 63 FPS de media. La mejora gracias a la tecnología DLSS es, de nuevo, abismal, y sin duda representa un impulso brutal en el rendimiento, aunque por ahora solo con los juegos que sean compatibles (de todos modos también tenemos DLSS Override, que luego vemos).
Pero esta solo ha sido una prueba, en la sección de pruebas en juegos entraremos en más detalle en términos de rendimiento y por supuesto indicaremos los resultados obtenidos en distintas resoluciones.
Rendimiento en aplicaciones
Estamos ante una gráfica que, debido a múltiples factores como su VRAM o su precio, no está pensada exclusivamente para gaming. De hecho, con la arquitectura Blackwell NVIDIA también ha actualizado muchas de sus facultades orientadas a creadores de contenido y profesionales, por lo que es de recibo ver qué desempeño tiene en estos ámbitos.
Comenzamos con Blender, una herramienta que medirá el tiempo que tarda la gráfica en renderizar escenas y arrojará un resultado contrario, es decir, no mostrará el tiempo que ha tardado sino cuántos samples ha sido capaz de renderizar por minuto. Este ha sido el resultado.
Vale, ahora diréis: ¿esto es mucho o poco? La verdad es que no utilizamos Blender para medir el rendimiento desde hace mucho, pero sí que tenemos un par de gráficas para comparar estos resultados y que podáis apreciar la diferencia.
Se ve claramente que la RTX 5090 es tremendamente superior a la RTX 4080 SUPER, y no hablemos ya de compararla con la RTX 4070 Ti SUPER. Lamentablemente no disponemos de una RTX 4090 para comparar, que sería lo ideal, pero igualmente se ve muy claramente la diferencia a la hora de renderizar escenas con Blender, ¿no?
Continuamos con V-Ray 6 Benchmark, otra aplicación capaz de utilizar la potencia de la tarjeta gráfica a la hora de renderizar imágenes, y arroja un resultado arbitrario al respecto. En este caso hemos utilizado el motor RTX (también se puede elegir CUDA, pero el resultado es inferior, va mejor con RTX).
De nuevo, seguramente el resultado seguramente no os diga mucho, así que vamos a compararlo.
De nuevo, la diferencia es más que evidente.
Vamos ahora con Procyon de UL Benchmarks, con una prueba específica de renderizado de imágenes por IA utilizando tanto FP4 como FP8. Nótese que, según los datos que nos ha proporcionado NVIDIA, Blackwell se lleva mejor con FP4.


Hay otras muchas aplicaciones de esta índole en las que la RTX 5090 destaca especialmente, como a la hora de renderizar vídeo 4:2:2 en DaVince Resolve 19. Para ello nos han proporcionado instrucciones y varias demos para poder probarlo, y así hemos hecho, pero el problema es que es algo complicado de plasmar en un dato empírico de rendimiento que pueda servir como punto de referencia ya que no son benchmarks per se.
Por ejemplo, tenemos D5 Render, un programa que sirve para navegar por escenas 3D y en el que podemos por supuesto habilitar las últimas tecnologías de NVIDIA inherentes a esta arquitectura, como Multi Frame Generation, Super Resolution o Ray Reconstruction.
El problema es el que hemos comentado, que no son benchmarks, y lo más que podemos enseñaros son los FPS medidos con NVIDIA FrameView. En este caso, pues mirad la captura de arriba… podemos movernos por una escena 3D fotorrealista de forma muy ágil y a unos 250 FPS de media, y la verdad es que se siente todo muy fluido en la RTX 5090. A modo de comparación, hemos hecho la misma prueba con una RTX 4080 SUPER y la escena se movía a unos 155-160 FPS, así que la mejoría también es notoria.
Así funciona la NVIDIA RTX 5090 en juegos
Seguramente el momento que la mayoría estabais esperando: ¿qué tal funciona en juegos? Obviamente estamos ante una gráfica que está pensada para jugar a altas resoluciones y con los gráficos al máximo, ya que al fin y al cabo dudamos que nadie se gaste los más de 2.000 euros que cuesta para jugar a resolución Full HD. De todos modos, como siempre hemos sometido a la gráfica a una batería completa de juegos y en distintas resoluciones (1080p, 1440p y 2160p), pero siempre con los ajustes gráficos al máximo.
NVIDIA nos ha sugerido probar la gráfica en algunos juegos en concreto para poder enseñaros, precisamente, las diferencias que esta gráfica es capaz de marcar. En algunos casos han sido builds específicas para poder probar ciertas tecnologías, como Multi Frame Generation, que en el momento en el que esta gráfica se lance al mercado deberían estar disponibles también para todo el público.



Aquí algunos ejemplos:
- En Cyberpunk 2077 podemos contar con todo, desde DLSS 4 a Super Resolution con Frame Generation.
- En Alan Wake 2 tenemos DLSS 4 con Frame Generation y preset Ultra para Ray Tracing.
- En Hogwarts Legacy contamos con DLSS 4 con Multi Frame Generation y Transformer model, así como con Ray Reconstruction.
- En Marvel Rivals, sin embargo, lo que tenemos es DLSS Override, es decir, podemos activarlo en NVIDIA App «forzando» al juego a usar DLSS.
- En Dragon Age: The Veilguard pasa exactamente lo mismo, lo que tenemos es DLSS Override.
Para activarlo, como decíamos hay que ir a NVIDIA App (ya no vale GeForce Experience para esto, por cierto) y «forzarlo» en la configuración del juego dentro de la App. Es algo sencillo, todo sea dicho, pero con esto lo que queremos deciros es que cada juego es un poco distinto.
Por este motivo, y porque nos gusta caracterizarnos por ser lo más honestos posible con vosotros, hemos decidido realizar dos pruebas: una siguiendo las instrucciones de NVIDIA, utilizando los ajustes y los juegos que ellos nos han recomendado probar, siempre con los ajustes al máximo y a resolución 4K, y otra con la batería de juegos habitual que hemos usado para probar todas las últimas gráficas que han pasado por nuestras manos.
Este es el resultado que hemos obtenido en las pruebas de los juegos que nos ha recomendado NVIDIA (en este caso, solo probados a resolución 4K), con y sin DLSS activo para que podáis ver la diferencia:
Sin lugar a dudas, si podemos sacar una conclusión de estos datos que hemos obtenido es que DLSS 4 es una auténtica barbaridad en términos de rendimiento. ¿Alguien se esperaba, por ejemplo, pasar de apenas 45 FPS en Cyberpunk 2077 a casi 300? ¿De 38 a 240 en Hogwarts Legacy? ¿Y esos increíbles casi 600 FPS en Marvel Rivals?
Pero veamos ahora qué sucede cuando las condiciones no son las ideales. Al fin y al cabo, esto es un poco como cuando te vas a comprar un coche y miras su consumo según el fabricante… te dan unos valores en condiciones ideales que luego difícilmente puedes replicar en la vida real. En la vida real, tú no te pones a editar los ajustes de los juegos al dedillo, a instalar builds distintas a las públicas ni a complicarte la vida en general. Te compras una RTX 5090, la instalas en el PC, pones todo al máximo y listo, lo que buscas es no complicarte la vida y tener que andar toqueteando cosas, quieres que los juegos funcionen con un rendimiento excelente y punto.
Por eso, a continuación os vamos a mostrar nuestras pruebas propias en juegos que, aunque en algunos casos sí que tienen DLSS y demás, hay otros casos en los que no. Como siempre, los hemos probado a tres resoluciones diferentes, pero siempre con los ajustes gráficos al máximo (incluyendo Ray Tracing) y, eso sí, en el caso de que el juego cuente con DLSS y demás, lo hemos activado (¿quién no lo haría teniéndolo disponible?). Este ha sido el resultado:



El resultado es más que evidente, pero también lo esperable: la RTX 5090 supera a todas las demás gráficas que hemos probado, por bastante, y en todas las resoluciones. Y ya en los juegos que admiten DLSS 4, la diferencia es abismal. Poco más que añadir, realmente hoy en día es la gráfica más potente para juegos… y para muchas otras cosas, claro.
Conclusión y veredicto
Alguna que otra vez he escuchado o leído comentarios de que la nueva generación de NVIDIA es «humo con IA», y a decir verdad yo mismo era bastante escéptico al principio. Pero ahora que he podido probar la RTX 5090 con mis propias manos, sin duda puedo decir que de humo nada, y es que NVIDIA está demostrando por qué se convirtió en la compañía más valiosa del mundo, precisamente gracias a la IA.
Es cierto que esta RTX 5090 tampoco es que haya mejorado una barbaridad con respecto a la generación anterior si nos ceñimos estrictamente a su hardware, ya que utilizan el proceso de 4 nm de TSMC, que mejorar mejora y además es una mejor gráfica aunque sea a «fuerza bruta», a base de meter más transistores y más y mejor memoria, y si analizáramos esta gráfica a igualdad de condiciones que la generación anterior, realmente tendríamos una mejora dentro de lo esperable, entre un 10 y un 15%.
Sin embargo, no hay igualdad de condiciones que valga. NVIDIA ha enfocado un esfuerzo astronómico en otro tipo de mejoras, en este caso en las tecnologías inherentes a la arquitectura Blackwell, con DLSS 4 como punta de lanza. Y es que ya lo habéis visto, los juegos y aplicaciones que admiten DLSS 4 tienen una mejora de rendimiento que simplemente se sale de las escalas… hablamos de +200 FPS en juegos a resolución 4K, y no sé vosotros pero yo no me esperaba tanta mejoría. Y encima es que se ven mejor que con DLSS 3 o 3.5…
Además, lo ha conseguido utilizando un nuevo diseño de disipador (para la Founders Edition) que consideramos sublime, ya no solo porque estéticamente nos parece una obra maestra, sino porque resulta ser bastante efectivo y eficiente a pesar de que han reducido su tamaño. La gráfica es bastante silenciosa, y logra mantener la GPU a una temperatura más que aceptable… aunque eso sí, la memoria GDDR7 sí que alcanza temperaturas cerca de ser preocupantes.
Eso sí, no todo son luces en esta gráfica, que también tiene algunas sombras. Ya hemos mencionado la temperatura de las memorias, pero el segundo factor es el consumo, y es que los más de 582 vatios de consumo solo la gráfica requieren ya no solo una fuente de alimentación de alta potencia, sino que también influirá y bastante en la factura de la luz. Eso, y por supuesto el precio, porque no todo el mundo estará dispuesto a desembolsar los 2.369€ que pide NVIDIA… al menos no solo para gaming.
Pero como ya hemos denotado varias veces, esta no es una gráfica exclusivamente para gaming, ya que por sus características está pensada para «valer para todo», o dicho de otra manera, puede perfectamente ser una gráfica dedicada para uso profesional con todas las de la ley.
Por todo ello, consideramos que esta RTX 5090 de NVIDIA se merece nuestro galardón de Oro, así como nuestra recomendación por su rendimiento y por su diseño.


