Razer Viper V3 Pro, probamos el ratón más preciso y ligero de Razer

Con el eslogan «For the Pro» (para profesionales), el Razer Viper V3 Pro es como su nombre indica una versión Pro de la tercera iteración de la familia de ratones Viper de la marca, que tan buenos resultados le está dando tanto a nivel técnico como de ventas y popularidad entre los usuarios.

Razer Viper V3 Pro, especificaciones técnicas

Si por algo destaca este Viper V3 Pro de Razer es sin lugar a dudas por su conectividad inalámbrica HyperSpeed Wireless, capaz de ofrecer la impresionante cifra de 8.000 Hz de frecuencia de muestreo, todo un récord en tecnología inalámbrica. Esta frecuencia de muestreo implica una latencia de tan solo 0,125 ms, casi 10 veces más rápido que los ratones gaming convencionales que funcionan a 1.000 Hz (por supuesto, también podremos configurarlo a 1.000 Hz, pero también a 2.000 y 4.000 dependiendo del balance que busquemos entre rendimiento y autonomía de batería).

Razer ha instalado en este ratón su sensor Focus Pro 35K, un sensor óptico capaz de funcionar hasta a 35.000 DPI de sensibilidad, pero si esto no te impresiona piensa que también es capaz de moverse a una velocidad máxima de 750 pulgadas por segundo sin perder un detalle, y con una aceleración máxima de 70 G. Una auténtica barbaridad.

Según las cifras proporcionadas por el fabricante, este ratón es capaz de proporcionar hasta 95 horas de autonomía si lo tenemos funcionando a 1.000 Hz, que es el mínimo, pero según vayamos aumentando su frecuencia de sondeo la autonomía irá en detrimento hasta ofrecer solo 17 horas cuando lo tenemos funcionando a 8.000 Hz. Por cierto, que no hay iluminación RGB en este Viper V3 Pro, por lo que esto no influirá en su autonomía.

Finalmente, en términos de diseño hay que decir que el ratón es muy sencillo, con una forma simétrica pero ergonómicamente diseñado para usuarios diestros puesto que solo tiene botones laterales en el lado izquierdo. Tiene 5 botones en total (los dos principales con interruptores ópticos), como hemos dicho antes carece de iluminación, está disponible en colores negro y blanco, y es uno de los ratones inalámbricos más ligeros del mercado con tan solo 55 gramos de peso (54 gramos el modelo negro, por algún motivo).

Unboxing y análisis externo

Como es habitual en este fabricante, el periférico viene en una caja de cartón duro con los colores negro y verde corporativos. En la cara frontal podemos ver una imagen desde arriba del ratón donde podemos ver que se trata del modelo en blanco. Viene acompañado, como siempre, de la marca y el modelo, así como algunas de sus principales bondades en forma de icono.

En la parte trasera, el fabricante nos muestra una imagen a tres cuartos del ratón junto con el receptor HyperSpeed Wireless. También destaca los interruptores ópticos en los botones principales.

Como siempre, en uno de los laterales solo encontramos un logo de la marca, pero en el otro tenemos los logos de los equipos profesionales que colaboran con Razer, así como un croquis y un listado del contenido de la caja.

El embalaje se abre retirando la parte superior, y tras hacerlo nos deja acceso directo al ratón y al receptor, que vienen ya directamente en la parte de arriba.

Pero antes de nada, veamos qué accesorios incluye. En este caso, Razer nos brinda el habitual manual de instrucciones y las pegatinas con su logo, pero también un set de grips (agarres) adhesivos por si queremos mejorar el agarre del ratón, ya que la carcasa externa que tiene de serie no incorpora inserciones de goma para fomentar un mejor agarre.

Así mismo, se incluye un cable de 1,8 metros de longitud mallado con hilo de nailon, con USB-A por un lado y USB-C por el otro que sirve tanto para cargar la batería como para utilizar el ratón por cable si se quiere.

El receptor HyperSpeed Wireless no es muy distinto en tamaño y forma a, por ejemplo, el adaptador para conectar el dongle USB de otros periféricos inalámbricos de la marca, con la salvedad de que tan solo tiene un USB-C hembra para conectarlo por cable al PC. Tiene una inserción de goma en la base y un LED indicador de estado.

Ahora sí, vamos con el ratón. Nada más sujetarlo con las manos sorprende mucho que sea tan sumamente ligero; tan liviano es que la sensación que da es que va a ser muy endeble, y sin embargo el plástico utilizado parece resistente y de buena calidad.

Los dos botones principales están sobredimensionados, y la rueda del scroll tiene una inserción de goma de color negro que contrasta con el blanco del ratón y que le da un plus de agarre, ya que además está estriada. En el centro podéis ver que hay otro LED indicador de estado.

En esta toma de la zona de la palma podemos ver que Razer ha dispuesto su logo, aunque en este caso no se iluminará cuando el dispositivo esté encendido. También podéis apreciar aquí su diseño simétrico, si bien es cierto que como hemos mencionado antes no es ambidiestro al llevar botones laterales solo en la izquierda.

Y es que en esta zona izquierda lo que tenemos son sendos botones, pero como comentábamos antes no hay inserciones de goma ni nada. Razer las incluye como accesorio para que seamos nosotros quienes decidamos si queremos ponerlas o no, incrementando eso sí con ello el peso del ratón.

En el lado derecho no hay botones ni nada destacable, está completamente vacío.

En cuanto a la base, tenemos dos enormes patas de teflón deslizante, al igual que en la circunferencia que rodea el sensor óptico del ratón, dispuesto en pleno centro. Al lado del sensor tenemos un botón que sirve tanto para encender y apagar el dispositivo como para cambiar entre los perfiles de DPI que tenga configurados en el software.

Visto el ratón por fuera, ha llegado la hora de conectarlo al PC y comprobar qué tal funciona.

Configurar el Viper V3 Pro con Razer Synapse

Para configurar el Razer Viper V3 Pro necesitaremos contar con la última versión de Razer Synapse, el software unificado de la marca. Nada más conectarlo su dongle HyperSpeed Wireless y encender el dispositivo, el software lo detecta automáticamente. Que tengamos conectado otro ratón de Razer al mismo tiempo no es casualidad, y en breve lo vais a entender.

Vamos a ver qué opciones nos ofrece el ratón, así que nada más hacer clic sobre él, el software nos muestra un croquis con la personalización de sus botones, así como los perfiles en la parte superior. Algo que solo hemos visto en este ratón está en la parte de abajo, pues nos permite elegir qué queremos que nos muestre el LED indicador de estado del receptor HyperSpeed.

En el apartado de rendimiento tenemos lo habitual: a la izquierda podemos configurar los distintos niveles de sensibilidad que queremos tener, y justo debajo tenemos un acceso directo a las propiedades del ratón de Windows. A la izquierda, la frecuencia de sondeo que nos permite elegir entre 125 y 8.000 Hz, mientras que en la parte de abajo tenemos un «replicador de sensibilidad».

Varias cosas que ver aquí: para empezar, si seleccionamos una frecuencia de sondeo superior a 1.000 Hz el software nos advertirá que eso requerirá un mayor trabajo para el procesador del PC, algo que podría tener cierto impacto en el rendimiento de los juegos. Aparte, como hemos visto antes también hace que la batería del ratón dure bastante menos.

Luego, en cuanto al replicador de sensibilidad, su funcionalidad es literal a su nombre: si tienes otro ratón de Razer y lo quieres cambiar por este Viper V3 Pro, puedes literalmente copiar su configuración de sensibilidad con este sencillo asistente que simplemente te pedirá que pongas un ratón al lado del otro y los muevas a la vez.

Esto es muy útil si como decíamos tienes un ratón de Razer y lo estás cambiando por uno nuevo, aunque no sabemos si funcionará también con ratones de otras marcas.

Continuamos con la configuración. En el apartado alimentación lo que podemos configurar es el periodo de inactividad para que el ratón entre en modo ahorro de batería, así como el porcentaje de batería restante a partir del que queremos que el dispositivo nos avise de que debemos conectarlo para cargar la batería.

Finalmente, tenemos como siempre la herramienta de calibración de superficie, una ventaja de utilizar un sensor óptico (que no deja de ser una cámara al fin y al cabo). En este caso, podemos configurar también la distancia de seguimiento al levantar el ratón de la mesa.

¿Qué tal funciona a la hora de la verdad?

Nada más comenzar a utilizar este Viper V3 Pro de Razer, la primera sensación que hemos sentido es que al ser tan sumamente ligero y al tener unas patas de teflón tan sobredimensionadas, se desliza por la alfombrilla como si fuera una pastilla de jabón en una bañera: el esfuerzo es cercano a cero, una maravilla, especialmente para esas largas sesiones de juego en las que terminas con las manos cansadas.

En cuanto a la ergonomía del ratón, personalmente soy una persona con las manos grandes pero que, como suelo sujetar el ratón con tipo de sujeción garra, prefiero ratones de tamaño medio.. y este V3 Pro me va perfecto para ello. Razer dice que su diseño está optimizado para agarres de tipo garra y fingertip, y no podemos sino darles la razón: para estos tipos de agarre, la ergonomía, peso y tamaño del ratón son perfectos.

En uso, como decíamos el ratón nos ha resultado bastante cómodo desde el principio, y que sea tan ligero y se deslice tan bien son dos buenos pluses especialmente para juego competitivo, que es para lo que ha sido diseñado. En términos de rendimiento, el sensor óptico Focus Pro 35K funciona excepcionalmente bien, no podemos sacarle ni una pega ya que es rápido y sumamente preciso, y la única pega que nosotros personalmente le vemos es que solo tenga botones laterales a la izquierda; nos habría gustado un diseño ambidiestro de verdad con botones también a la derecha, porque con el agarre tipo garra se utilizan mucho.

En cuanto a la autonomía de batería, tras una carga completa hemos estado utilizando el ratón con su frecuencia de muestreo configurada al máximo (8.000 Hz) y lo hemos usado durante varios días tanto para trabajar como para jugar. En total, calculamos que el ratón empezó a «quejarse» (salta el aviso de batería baja) a las 16 horas, pero pudimos estirarlo hasta 20 horas de uso antes de que terminara apagándose, seco. Eso sí, en parte es porque cuando estás trabajando no tienes la mano permanentemente en el ratón, así que a ratos el dispositivo se ponía en modo ahorro de batería, lo cual estiró un poco más su duración.

En general, consideramos que las aproximadamente 18 horas de juego cuando lo tienes a 8.000 Hz es más que sobrado para cualquier jugador de PC, y si no necesitas una latencia tan sumamente baja, las 95 horas a 1.000 Hz que promete Razer son, de nuevo, más que dignas (especialmente teniendo en cuenta que seguramente la batería interna será muy pequeña, ya que el ratón pesa poquísimo).

Conclusión y veredicto

Desde luego, Razer es uno de los fabricantes con más experiencia en el ámbito de los periféricos gaming, y cuando se trata de crear periféricos específicos para el juego competitivo, se nota y mucho. Este Viper V3 Pro es un ratón inalámbrico extremadamente ligero, con un rendimiento absolutamente abrumador y que encima tiene una excelente calidad de materiales y una autonomía que, sin ser la más amplia del mercado, sorprende en un ratón tan sumamente ligero.

El rendimiento, la rapidez, la capacidad de configuración, la comodidad, la autonomía… este ratón lo tiene todo. Es cierto que cada cual tiene sus gustos, costumbres y manías, y por ejemplo nosotros echamos de menos como mínimo botones laterales también en el lado derecho, pero de lo que no cabe duda es de que si este diseño de ratón es de tu tipo y encima juegas gaming competitivo, es una apuesta segura para la victoria.

Por todo ello, consideramos que este Razer Viper V3 Pro se merece nuestro galardón de Platino, así como nuestra recomendación por su inconmensurable rendimiento.