Seguramente te suene el concepto burn in o quemado de pantalla, un fenómeno que sufren algunos tipos de pantallas que resulta en que se queda una especie de imagen residual, producida cuando una imagen estática ha estado mostrándose durante mucho tiempo. En este artículo vamos a contarte qué es, qué lo causa y si es algo de lo que deberías preocuparte si de repente lo ves en tu pantalla.
Seguramente habréis visto muchos ejemplos de este fenómeno, en el que en una pantalla se ve como de fondo, «quemado», una imagen «fantasma» de otra cosa que no es lo que se está mostrando en la pantalla. Por ejemplo, puede que en una TV que ha tenido puesto el canal de noticias durante mucho tiempo aparezca de fondo el logotipo de la cadena y el banner inferior que muestra información. Este fenómeno se da sobre todo en las pantallas del tipo OLED y derivados y se ha convertido en un problema para sus usuarios con el paso del tiempo que, por suerte, cada vez tiene menos riesgo de producirse con modelos más recientes que ya se curan en salud ante defectos similares a este.
¿Qué es el burn in o quemado de la pantalla y qué lo causa?
La causa de las quemaduras de pantalla tiene que ver con el ciclo de vida variable de los componentes que producen la luz en la misma. A medida que estas partes envejecen, su brillo cambia y por lo tanto su representación de los colores también lo hace. Cuando una imagen ha estado estática mucho tiempo en la pantalla, los píxeles que la componen han estado trabajando a un ritmo diferente que los demás y, por lo tanto, han envejecido más de la cuenta al tener un mayor desgaste.
Esto significa que en pantallas con componentes orgánicos como las OLED, el burn in de pantalla es bastante más acusado, ya que estos componentes «sufren» un mayor desgaste, especialmente en imágenes estáticas. Por supuesto, este efecto también es acusado en las pantallas AMOLED, si bien estas son más frecuentes en smartphones que en monitores o pantallas de PC. El motivo es que los píxeles cambian mucho menos en un PC, donde excepto en los videojuegos, las aplicaciones no suelen cambiar mucho.
Es más, si tenéis una pantalla OLED o derivada, os recomendamos que actives el modo Stand-By con la pantalla apagada, lo cual os ayudará a retrasar la aparición del quemado de pantalla. Esto hará que vuestro monitor, smartphone o cualquier dispositivo con pantalla OLED os dure mucho más tiempo y no tengáis que temer por un quemado como el que os mostramos en las imágenes que ilustran el artículo.
¿Es un fallo de cálculo de los fabricantes?
No, en realidad no lo es y hemos de tener en cuenta que pese a que las pantallas OLED tienen una vida útil más corta que las LCD, estas otorgan una calidad en el colorido mucho más alta, lo que les permite ser vendidas más fácilmente a los usuarios de a pie, quienes quedan prendados por el colorido de las demostraciones que ven en los puntos de venta en comparación con sus viejas LCD.
A la industria de la electrónica de consumo no le interesa que los ciclos de producto sean muy largos y que la gente tarde años en cambiar de televisor. Algo que ocurrió con los CRT, en especial en los años 90, donde hubo un estancamiento general en el mercado después de que la patente de la SONY Trinitron terminase y todo el mundo se pusiera a fabricar clones. La adopción de las pantallas LCD a mediados de los 2000 no vino con todos los problemas solucionados, las CRT seguían siendo mejores en algunos aspectos y es por ello que se buscaron varias tecnologías de panel para solventar los problemas.
Lo que a los fabricantes les interesa es que no te quedes siempre con el mismo producto y por eso buscan lo que se ha dado en llamar como «obsolescencia programada», para que el flujo de consumo sea más rápido y la entrada de capital mayor a lo largo de periodos más cortos de tiempo. Lo cual también han conseguido con la adopción masiva del 4K y que buscan, a continuación, conseguir algo parecido con el 8K.
¿Se puede reparar pantalla quemada?
No obstante, y aunque es más acusado en algunos tipos de pantalla, puede suceder en cualquier tecnología en realidad, ya que todas tienen mayor o menor desgaste de píxeles. Muchos de vosotros diréis que lleváis años con un mismo monitor LCD y no tenéis ningún tipo de quemado, y esto es cierto porque en las pantallas LCD, los cristales tienen un estado natural y este puede cambiar según la cantidad de corriente utilizada para generar el color deseado. Siempre que estos colores cambien periódicamente, los cristales de ese píxel deberían fluctuar lo suficiente para que la imagen no se quede fija en los cristales de forma permanente.
Por lo que dependiendo de cómo utilices una pantalla OLED o no, os podéis encontrar con el Burn-In o no. Por ejemplo, en videojuegos no vais a encontrar el Burn-In ya que las imágenes no son estáticas. A no ser que juguéis claro está siempre al mismo juego y el HUD del juego que marca la vida y armas del jugador sea una imagen fija, como la mosca de una cadena de televisión, aunque con la cantidad de anuncios que se muestran en las televisiones privadas y autonómicas, las posibilidades de que la pantalla pueda llegar a quemarse por este problema son muy limitadas.
Sin embargo, si tienes una pantalla –sea de la tecnología que sea– que tiene una imagen siempre fija, puedes dar por sentado que terminará teniendo efecto de quemado de pantalla antes o después. Tal y como podéis ver en la imagen que acompaña estas líneas.
Por lo tanto, y respondiendo a tus preguntas, si la pantalla de tu PC tiene tecnología OLED sí que te recomendamos tener cuidado de no dejarlo con imágenes estáticas durante demasiado tiempo, ya que las pantallas con esta tecnología son las que más sufren el burn in. Si tu monitor tiene cualquier otra tecnología de pantalla no es un fenómeno al que debas temer, salvo que lo tengas siempre encendido con una imagen estática.
Por poner un ejemplo, si tienes un PC de trabajo en el que la pantalla está encendida 10 horas al día en el escritorio, es posible que tras cierto tiempo la zona del menú inicio comience a sufrir algo de burn in. No obstante, con que también cambies esa imagen estática a menudo (por ejemplo, con un juego o un vídeo a pantalla completa), será suficiente para que la pantalla LCD «subsane» este problema por sí misma, por lo que podrás estar utilizando el monitor durante años y años sin sufrir este problema.
Este es uno de los motivos por el que en el mercado sólo podemos encontrar monitores OLED enfocados al público gaming, ya que los juegos, rara vez, muestra siempre la misma imagen de forma fija durante muchas horas. Todos los juegos tienen pantallas carga y varían continuamente el contenido que se muestra en la pantalla, por lo que la posibilidad de que se marque la pantalla es muy reducida. Aunque muchos fabricantes han introducido diferentes tecnologías para reducir los niveles de quemado, sigue sin ser suficiente para un uso de ofimática tradicional.
Este tipo de monitores todavía no está disponible para el sector de oficina debido a que todos los sistemas operativos, tanto Windows, como Linux y macOS, muestra siempre una imagen fija en la parte superior o inferior de la pantalla, imagen correspondiente al menú de acceso a las aplicaciones. Si bien es cierto que todos estos sistemas operativos permiten ocultar automáticamente la barra para que aparezca únicamente cuando acercamos el ratón, la mayoría de los usuarios no lo hace.
De ahí vienen los salvapantallas en movimiento, ya que los estáticos podían producir este error al pasar tanto tiempo con la misma imagen. No son simplemente por diseño (que también) sino por utilidad y seguramente que muchos los recordaréis de vuestros viejos tiempos del PC, cuando se pusieron de moda esos screensaver para evitar que la imagen quedará impresa, literaLmente, en el panel de nuestro equipo para siempre. Es algo parecido, solo que con un extra de quemado que no le sienta nada bien a nuestra tele.