Esta familia de SoC de Qualcomm es, probablemente, una de las que más ganas teníamos de ver, ya que la compañía prometía que sería un tipo de hardware que llegaría con grandes ventajas frente a los que ofrecen sus competidores, pero al parecer, el Snapdragon X Elite no da la talla en términos de rendimiento. Y es que uno de los primeros análisis que hemos podido ver, no es demasiado bueno y pone demasiadas dudas sobre estas arquitecturas dentro del ecosistema Windows.
Como sabéis, gracias al movimiento de Apple con sus chips Apple Silicom, se ha desatado un debate sobre el futuro de los procesadores con tecnología ARM como solución a algunos problemas de las familias que más se usan em el entorno PC/Windows. Estos chips son mucho más eficientes y han demostrado su potencia para ejecutar sin despeinarse todo tipo de tareas. Pero es lógico creer que dar un salto así en un mercado gobernado desde hace décadas por los herederos de los 8086 puede parecer complejo. Y en realidad lo es porque es modificar de arriba abajo todo lo que conocemos hasta cahora.
Aun así, es de elogiar las intenciones de Qualcomm con sus Snapdragon X elite destinados, precisamente, a convencernos de que esa transición hacia los procesadores ARM es posible. Y es que muchas compañías suelen invertir cantidades astronómicas en marketing para promocionar sus productos, pero hay ocasiones en las que lo que ofrecen no está a la altura de las expectativas de los usuarios ya que no se cumplen la mayoría de las promesas que nos hicieron. Y este parece ser el caso del Snapdragon X Elite, que tras un análisis ha demostrado que no es capaz de competir realmente frente a sus principales competidores, quedándose muy por detrás de los mismos.
Un SoC que no está a la altura de sus competidores
Una de las grandes novedades de este año como bien sabemos son todos los nuevos procesadores y SoC que se van a lanzar al mercado por parte de muchas de las grandes compañías del sector, y por parte de Qualcomm, el Snapdragon X Elite es el más esperado. Y es que este SoC ha sido anunciado como un claro competidor frente a los que nos puede ofrecer, por ejemplo, Intel en portátiles, pero realmente, en la mayoría de las pruebas se queda muy por detrás de estos, lo que resulta bastante preocupante.
La mayoría de estas pruebas se han realizado mediante un Vivobook S 15 OLED, uno de los nuevos portátiles de Asus que incorpora el Snapdragon X Elite X1E-78-100, un SoC con una configuración de 12 núcleos, 42 MB de caché total y una frecuencia máxima de 3.4 GHz, que incluye además, 16 GB de LPDDR5x a 8448 MT/s. Hay que destacar que esta configuración es la más básica que podemos encontrar en los nuevos procesadores de Qualcomm, pero la mayor diferencia con las otras versiones es que tiene una frecuencia 0,4 GHz inferior, no incorpora boost, que en los demás es de 4,1 GHz, y además cuenta con una GPU con 3.8 TFLOPS en vez de la de 4.6 de sus versiones superiores.
La duración de la batería deja mucho que desear
Uno de los factores más importantes de un portátil es la batería, y en este campo el nuevo SoC de Qualcomm presenta ciertos problemas, y es que el portátil de ASUS incorpora una batería de 70 Wh, que mejora la duración frente a algunos dispositivos de Intel y AMD, pero que se queda atrás frente al MacBook Air 15 M3 de Apple. Y es que en este campo, el portátil de Apple es capaz de ofrecer una duración un 40% superior de la batería de media, siendo más pequeña (66,5 Wh).
Podemos destacar también, que en tareas más básicas el Snapdragon X Elite ofrece una carga para la batería que aguanta bien, pero en tareas que requieren un mayor rendimiento, la duración disminuye de una forma exagerada que no tiene demasiada corelación con el caso contrario, por lo que da la sensación de que no existe un equilibrio ni relación entre uno y otro escenario.
El rendimiento en la mayoría de pruebas no es el adecuado
En términos generales, sabemos que el rendimiento general de un portátil no es demasiado grande a no ser que incorpore un procesador creado específicamente para ofrecer el mejor rendimiento posible en todas las tareas posibles, y el Snapdragon X Elite, no hace esto.
Este SoC ofrece buenos resultados en pruebas de rendimiento multinúcleo, lo que permite ver que tiene una potencia adecuada, pero en otras pruebas realizadas como codificación de vídeo, extracción de archivos o la conversión de documentos, los portátiles que incorporan un Intel Core Ultra 7 155H lo superan por bastante, ofreciendo un rendimiento un 50% superior.
En juegos, obviamente, funciona peor de lo que podíamos imaginar
Los nuevos portátiles que incluyen este tipo de SoC obviamente no están creados para jugar, es algo que todos teníamos en cuenta, pero en general, el rendimiento que ofrece en estos casos también es inferior al que tienen otros que incluyen configuraciones de Intel.
Como podemos imaginar, la mayoría de juegos no funcionan por razones obvias, pero los que lo hacen, en la mayoría de ocasiones no son capaces de llegar a ofrecer 30 FPS con una resolución 1920×1080 con todos los parámetros gráficos al mínimo. Dicho de otra manera, son lo que solemos llamar como «injugables». Cierto es que estos no son portátiles diseñados para jugar, pero por lo que parece, desde luego que en términos de rendimiento este procesador no está dando la talla.
De todos modos, esto es algo que comprobaremos nosotros mismos dentro de poco, porque ASUS ya nos ha confirmado que nos va a enviar su primer portátil equipado con uno de estos SnapDragon Elite X, así que estad atentos porque en breve tendremos pruebas propias para poder hablar de él con más fundamento.