Esta semana se desvelaba y se confirmaba la fecha de salida de las nuevas CPU de Intel para el sector del gaming, la cual se fijó como sabemos el 4 de noviembre, es decir, estamos a poco más de un mes para verlas en las tiendas. Pero ahora un giro de guion hace palidecer dicha confirmación argumentando problemas externos a Intel, en concreto con la nueva memoria DDR5 y Alder Lake, ¿estamos ante una cancelación de la fecha y un frenazo al lanzamiento de Intel?
Hay tantos factores a tratar que realmente es complicado sacar algo en claro, así que lo que haremos será ponerlos todos encima de la mesa, reflexiones y pensamientos incluidos, para que cada uno opine conforme su criterio le diga. Y es que este no es de esos artículos donde se desvela o se confirma o desmiente nada, es de aquellos que presentan un escenario y posibilidades. ¿Qué ocurrirá con Intel Alder Lake-S?
¿Cuál es el problema y por qué afectaría a Intel Alder Lake la DDR5?
Todo gira a raíz de dos informaciones distintas. La primera parte de Richard Swinburne que afirma algo que intuíamos desde la redacción: hay escasez extrema de circuitos integrados para la DDR5, ya que la oferta de estos es muy inestable.
Hace solamente 24 horas en una charla de presentación con Kingston un servidor preguntaba a la compañía sus planes con DDR5 y las previsiones de ventas, pues bien, la respuesta que obtuve fue cuanto menos sorprendente.
https://twitter.com/ricswi/status/1442695639482077185
Y es que la compañía estaba a la espera de que Intel moviese ficha para su nueva plataforma y con ello ver la acogida de la DDR5 en el mercado.
Es decir, una gran compañía como Kingston no tiene nada claro los planes con DDR5 y con ello lo dicho por Richard cobra sentido, puesto que quizás el volumen de circuitos integrados es tan bajo o inexistente que los precios podrían no compensar actualmente.
Si esta teoría es válida lo que vamos a ver serán unos pocos modelos de módulos DDR5 que se podrían agotar en días o semanas, dejando a las placas base de gama alta sin soporte.
La plataforma, la compatibilidad y la escasez
Suponiendo que la escasez es tal cual se dice, los fabricantes han lanzado una serie de productos en cuanto a placas base que no tienen soporte para DDR4. Lo tratábamos hace solo una semana, y es que la mayoría de placas solo integra compatibilidad con DDR5, siendo algunos modelos compatibles con DDR4 y esta última al mismo tiempo.
Alder Lake-S como arquitectura integra un controlador de memoria o IMC dual, capaz de soportar ambos tipos de memoria, así que el tejado está en el lado de los fabricantes de placas y memorias. ¿Acaso Intel está teniendo quejas de estos por el nulo suministro y las previsibles bajas ventas que se esperan debido a la escasez?
Bueno, ya le pasó en su momento con Pentium 4 y la RDRAM, quizás esta vez Intel quiera curarse en salud y al no dar una fecha oficial pública, puede rectificar y posponer el lanzamiento. También está la posibilidad de que simplemente la situación no sea tan grave y el lanzamiento se produzca el 4 de noviembre, el stock dure lo que dure y los fabricantes agoten los circuitos lanzando todo lo que se produce al mercado con un sobreprecio que les haría ganar dinero y todos contentos.
Cábalas y más cábalas, es cierto, pero no tenemos más información de primera mano para aportar por ahora, así que toca esperar y estar atentos a los movimientos, porque si Intel lanza una plataforma donde no hay stock de su nueva RAM… El fiasco podría producir un efecto adverso y conseguir que el usuario termine por comprar una plataforma AMD. ¿Situación real, fake o sacada de contexto? El tiempo dirá si estamos en el camino y si el stock será suficiente.