Los procesadores de gamas altas para ordenadores portátiles suelen tener un problema realmente grande, el hecho de que deben ofrecer una potencia bastante alta sin dejar de lado los aspectos clave de estos dispositivos que son la batería y la gestión térmica. En el caso de las CPU que ha preparado Intel para esta generación el objetivo que buscan es bastante claro, ofrecer un rendimiento superior con un consumo mucho más bajo, algo que se termina traduciendo en la optimización tanto a nivel de energía como de temperatura, y al parecer el Core Ultra 7 255H logra esto superando a su vez a la generación anterior.
Uno de los principales motivos por los que Intel ha conseguido dominar durante tanto tiempo el mercado de los procesadores para ordenadores portátiles está en los diversos contratos que consiguieron hace años con las principales marcas, pero está claro que si sus SKU fuesen malas muchas de las compañías los habrían dejado de lado. Lo que está claro en este aspecto es que no podemos echarle en cara a la compañía el rendimiento ni la eficiencia que tienen los modelos que han desarrollado para este tipo de dispositivos, ya que al final son una opción realmente buena.
Un modelo creado para ofrecer una potencia equivalente a una gama alta
Intel cuenta con una gran cantidad de variantes en su catálogo de procesadores, ya sea para ordenadores de sobremesa, para sistemas de bajo consumo e incluso para servidores, pero uno de los campos en los que todavía consiguen destacar es en el de los portátiles. En este aspecto la gran mayoría de las grandes marcas suelen recurrir a los componentes de esta marca para crear sus sistemas personalizados, ASUS, Lenovo, Samsung y muchas otras compañías tienen una gran cantidad de ordenadores de este tipo que utilizan las CPU pertenecientes a las últimas generaciones de Intel.
Y si hablamos de nuevos lanzamientos está claro que no podemos pasar por alto algunos de los modelos que mayor aumento de rendimiento tienen en comparación con la generación anterior, como es el caso del Core Ultra 7 255H. Este procesador cuenta con una configuración muy similar a la que tiene la versión anterior, hace uso de 6 P-Cores, 8 E-Cores y 2 LPE para ofrecer una configuración de 16 núcleos y 16 hilos con una frecuencia base de 2 GHz, pero que aun así logra ofrecer una puntuación un 32% superior a la de su predecesor, el 155H.
En single-core podemos observar que cuenta con 4631 puntos frente a los 3500 puntos que logró alcanzar el Core Ultra 7 155H, mientras que la mejora general que ofrece es de un 15% en las puntuaciones de CPU Mark, un aumento que realmente no es tan grande en comparación con lo que ha alcanzado en las pruebas de un solo núcleo. En este aspecto es donde la compañía consigue demostrar la mejora que supone la implementación de los P-Cores «Lion Cove» junto con E-Cores «Skymont» basados en el nodo de proceso N3B de TSMC, ofreciendo una eficiencia y rendimiento superior sin aumentar el número de núcleos.