Es muy popular adquirir un protector de pantalla para tu móvil, sin embargo, ¿tiene algún tipo de utilidad comprarlo para un ordenador portátil? Son miles los productos de este estilo que se venden por la red, pero, su utilidad real, ¿cuál es?
Hoy vamos a ver de qué se tratan y si realmente es necesario acoplar una segunda capa a tu panel para protegerlos, o, por el contrario, tiene más inconvenientes que beneficios.
¿Protector de pantalla para portátil?
Y es que, mucha gente piensa que un protector de pantalla se utiliza para evitar que la propia pantalla se rompa en una caída, y no, no funciona así. Si tu smartphone se cae al suelo, dará igual que tengas un cristal templado o no. Este solo protegerá al original de rayaduras o arañazos externos.
Muchas veces, debido a que el material de estos es muy malo, se rompe con facilidad, y, por tanto, pensamos que nos ha salvado a la del propio móvil, pero no es así, no tienen ningún tipo de utilidad en ese aspecto. Es más, podría incluso generar más presión y hacer que sea peor todavía.
Entonces, ¿para qué se usan? Pues como acabamos de decir, este tipo de protectores se utilizan para evitar que, por ejemplo, en caso de los smartphones, al meterlo en un bolsillo de pantalón o en un bolso normal, se raye al tropezar con llaves u objetos punzantes. Algo que puede ocurrir con frecuencia y dejar nuestra pantalla bastante fea.
Ahora bien, entonces… ¿es útil para un portátil? Como explicábamos antes, existen millones de productos que se acoplan a nuestros monitores para «protegerlos», sin embargo, no tiene ningún sentido usarlos, salvo que tengamos un gato en casa al que le guste arañar todo lo que ve, por ejemplo. Ya que a diferencia de un móvil o una tablet, estos serán mucho menos propensos a estar en contacto de forma involuntaria con otros objetos.
Además, independientemente del precio o materiales del mismo, perderemos mucha calidad de pantalla, pues, estamos acoplando una segunda capa por encima de la original, por lo que, si nuestro monitor es bueno, estaremos desperdiciándolo.
En resumen, salvo ocasiones muy puntuales y específicas, los protectores de pantalla o cristales templados no tienen gran utilidad. Los paneles vienen ya con protecciones adecuadas anti rayaduras y caídas, además de tecnologías como el filtro azul para evitar daños en nuestra vista. Intentar añadir algo externo y, mayoritariamente sin una certificación y de origen asiático, puede ser peor que no poner nada, y encima estaremos gastando dinero y perdiendo calidad de imagen.
Ahora bien, existen otro tipo de cristales, como pueden ser orientados a proteger más la visión, antirreflejos, o incluso de privacidad, donde, angularmente, no se puede ver la pantalla. Ahí hablaríamos de otro tema, pues, cada uno de ellos, tiene una función principal que no conseguimos directamente con la nuestra y que, pese a perder cierta calidad, ganamos en otros detalles.
Así que ya lo sabes, a gustos colores, pero en mi opinión, disfruta de tu ordenador y olvídate de este producto el cual no tiene ninguna utilidad. Y si conoces alguna, déjamela en los comentarios, estaré encantado de leerte.