Phil Spencer es de esos directivos que prefieren cultivar su imagen de tío tolerante, integrador, que no quiere guerras para un mundo en el que preferiría que todas las consolas compartieran las mismas sagas pero, por desgracia para él, Starfield ha venido a confirmarle que sus sueños no coinciden con la realidad. Y los exclusivos son el camino más corto para hacer crecer Xbox.
Es evidente que la nueva saga de Bethesda ha dado un impulso nunca antes visto a la plataforma de Microsoft. No solo ha puesto en el mapa Xbox Series X|S sino que ha llevado a miles de usuarios en todo el mundo a dejar a un lado sus PS5 o Nintendo Switch y buscar la manera de formar parte de esa nueva epopeya espacial. Así que Phil, ¿qué vas a hacer a partir de ahora?
Un nuevo exclusivo en el horizonte
El caso es que el enfrentamiento judicial entre Sony y Microsoft a cuenta de la compra de Activision Blizzard dejó algunos documentos a la vista que ahora están saliendo definitivamente a la luz. Se trata de un calendario de lanzamientos de Bethesda con información detallada sobre características de juego y, también, si se trata de desarrollos que llegarán a otras consolas además de Xbox.
Y como podéis observar por la imagen que os dejamos justo aquí debajo, y que pertenece a ese proceso entre japoneses y norteamericanos, está claro que una nueva entrega de The Elder Scrolls está en camino. Tanto, que la continuación del mítico Skyrim que llegó a las tiendas el 11 de noviembre de 2011 no verá la luz en PlayStation 5.
El juego aparece el último de todos los que tenía previsto lanzar Bethesda en esta tanda de desarrollos destinados a la actual generación de PS5 y Xbox Series X|S. De tal forma que The Elder Scrolls VI vendrá a poner el colofón final de la manera más brillante que podáis imaginar… aunque no gustará tanto a los usuarios de PlayStation.
Nada de nada en PlayStation
Queda bien claro en ese documento que The Elder Scrolls VI no saldrá en PlayStation (aunque sí aterrizará en PC) y que, además, no ha tenido que ver el éxito de Starfield para confirmar esa decisión, ya que los papeles mostrados son anteriores a conocerse el enorme impacto que iba a tener el nuevo RPG de Bethesda.
Además, aparece en la parte inferior del documento, en la columna de The Elder Scrolls VI, otro dato relevante, como la posible ventana de lanzamiento que se abriría a partir de 2026, «o más adelante», así que no podemos esperar tener nada para comprobar cómo será hasta, al menos, 2025. Será entonces cuando nos comiencen a hablar de cómo será otro de los juegos que podrían obligar a cientos de miles de gamers a plantearse si tener una Xbox es rentable o no.
Sea como fuere, os obvio que Microsoft quiere jugar ya a lo mismo que Sony ha estado haciendo a lo largo de los últimos 25 años, donde ha gozado de extraordinarias exclusivas, no solo de sus propios estudios, sino también de compañías de terceros que le han regalado excusas suficientes para labrarse la reputación de plataforma donde puedes jugar a muchos títulos que es imposible tocar en otras. Final Fantasy XVI el ejemplo más reciente…