Es prácticamente la noticia del verano, que las autoridades de los EE.UU. han dado permiso para que se complete la compra de Activision Blizzard por parte de Microsoft. Algo que ha gustado mucho a los fans xboxers y que, como era de imaginar, ha comenzado a notarse dentro del propio ecosistema de la gran X. ¿Pero sabes qué es exactamente lo que ha comenzado a ocurrir? Mirad.
Es algo que el ser humano hace prácticamente por mimetizarse con lo que le rodea, y que de alguna manera nos sirve para volver a disfrutar, cíclicamente, de maravillas que ya jugamos hace algunos años. El caso es que esta polémica de Sony contra Microsoft por aquello de no perder Call of Duty ha dado como resultado que los jugadores de Xbox se han volcado de nuevo en volver a disfrutar de viejos títulos de la saga.
¿Los perciben como propios?
No tenemos muy claro cuál será el efecto que provoca en los jugadores algo así, pero es evidente que estar escuchando durante tantas semanas noticias sobre Call of Duty termina por llevar a cualquiera a desear jugar con títulos de hace algunos años. Y eso es lo que parece que está ocurriendo, que de repente la comunidad de gamers fans de la serie de Activision los están volviendo a instalar en sus consolas para echarse unas partidas.
En total, más de 200.000 jugadores han vuelto a jugar con sus Call of Duty más clásicos, con los Black Ops, Black Ops 2 y Modern Warfare 3, que son los que están despuntando más de la cuenta en las últimas horas. Como os decimos, no hay una explicación lógica a que ocurra algo así justo en estos días en los que la saga de shooters está en boca de todos a cuenta del lío legal montado entre Sony y Microsoft.
Desglosando un poco más esas cifras, Call of Duty Black Ops es el que se lleva la palma con más de 120.000 jugadores simultáneos de media en los últimos días, lo que es un número muy apreciable. Le sigue Call of Duty Modern Warfare 3, que reúne en Xbox a más de 80.000 jugadores y, por último, Call of Duty Black Ops 2 que se contenta con una cifra cercana a los 12.000.
A falta de pan…
Sea como fuere, resulta curioso comprobar cuáles son los incentivos que estimulan una respuesta como la que se ha producido dentro del ecosistema Xbox alrededor de Call of Duty, donde los jugadores han decidido pasar estos calurosos días de verano rememorando viejas sensaciones con algunas de las entregas de más éxito planteadas por Activision. Compañía que, por cierto, está cerrando los flecos de una compra por parte de Microsoft que, justo en estos días, está llegando a su fecha límite de negociación.
Así que atentos, no sea que alguien quiera renegociar al alza y se produzca algún desencuentro que eche por tierra lo vivido a lo largo del último año. Estaría bien que después de tantos ríos de tinta la operación no se consumara, ¿verdad? Sería para que alguien en Microsoft dimitiera. O en Activision. O en Blizzard. O en todas a la vez…