Cuando Diablo IV llegó hace justo 12 meses (cumplirá años a principios de junio) muchos quedaron defraudados porque la magia de la saga, esa jugabilidad tan característica, apenas duraba unas pocas horas hasta que contemplabas la horrorosa progresión que había diseñado Blizzard. Así que la mayoría de diableros se marcharon a otras latitudes donde no hiciera tanto frío.
La respuesta de Blizzard fue la misma que con Diablo III y otros de sus juegos, y fue la de iniciar temporadas que duran unas pocas semanas pero que añaden una cantidad ingente de nuevas misiones y recompensas exclusivas que llevan al jugador a estar permanentemente pendiente del juego, lo que siempre le ha funcionado a los de Irvine. Y con Diablo IV han vuelto a hacerlo.
El botín renacido de Diablo IV, ya disponible
Efectivamente, apenas llevamos dos días con la cuarta temporada de Diablo IV, la del Botín Renacido, y ya os podemos avanzar que el juego se ha convertido en lo que muchos esperaban que hubiera sido de lanzamiento, un título ARPG lleno de desafíos, de misiones que realizar sin parar y con recompensas que van transformando nuestro tier rápidamente. Y lo mejor de todo, sin tener que volver a crearnos otro personaje para aprovechar al máximo todas esas novedades.
Si eres de los que abandonó Diablo IV a las primeras de cambio y decides regresar por esta cuarta temporada del Botín Renacido, no debes asustarte por ese mapa que está lleno de iconos, indicaciones de misión o eventos a tutiplén a los que puedes acudir, ya que simplemente siguiendo las primeras quest que te asignen, serás capaz de meterte en la rueda de hámster de este nuevo Diablo IV para, a partir de ahí, escalar dentro de la temporada (¿juegas con ratón?).
Ahora, gracias a los cambios introducidos por Blizzard, todo es más dinámico, los eventos temporales son realmente adictivos por la cantidad de recompensas que nos podemos ganar y algunos eventos multiplayer parecen sacados de cualquier MMO en los que unen sus fuerzas decenas de jugadores al mismo tiempo. Y eso siempre se agradece.
Y es que como ya hemos mencionado varias veces, desde luego Blizzard no hizo las cosas bien con su nueva punta de lanza de la franquicia. Dejó honestamente Diablo 3 en la miseria casi para obligar a que los más fans de la franquicia se pasaran a la siguiente entrega, pero lo hizo de una manera paupérrima, cargándose prácticamente ambos juegos. Les ha costado, pero por fin parece que ahora sí que tenemos el Diablo IV que estábamos pidiendo.
Un buen parche para descargar
Esta cuarta temporada del Botín Renacido no solo ha traído la alegría a los jugadores tradicionales de Diablo IV sino que deja todavía menos argumentos a los que siguen anclados a la campaña, que con buen criterio parece haber sido abandonada a su suerte por parte de Blizzard. Si aceptáis nuestro consejo y seguís dando vueltas por Santuario dentro de ese modo, salid ya de ahí y abrazad el sistema de temporadas porque es mucho más Diablo de lo que os podéis imaginar.
Eso sí, parece increíble que Blizzard no hubiera caído antes en lanzar Botín Renacido, porque ya hace algunos años tuvo que recurrir a un truco de magia parecido con Diablo III para revivirlo del marasmo de aburrimiento en el que estaba metido. Y eso que en el caso de aquella entrega, de primeras, no se cometieron los errores que la compañía de Irvine ha cometido con Diablo IV.
Pero como suele decirse, «más vale tarde que nunca» y ahora sí que sí, este Diablo IV es lo que todos esperábamos ver en junio de 2023 cuando llegó a las tiendas.