En los últimos años, hemos visto sistemas que son homenajes a microordenadores de 8 y 16 bits del pasado. Hablamos de recopilatorios con emuladores y una colección de juegos para sacarle provecho a la nostalgia. Sin embargo, nos encontramos con que en este caso hablamos de un revival y ni más ni menos que de la mano del creador del estándar MSX, Kazuhiko Nishi, que varias décadas después quiere hacer una tercera generación del mismo.
Un servidor fue un fan tardío de los MSX, en España no tuvieron mucho éxito y su popularidad creció con la escena retro desarrollada que fue germinando tras la desaparición de los ordenadores de 8 bits hasta convertirse en uno de los microordenadores más conocidos por los fans. Sus siglas, al contrario de lo que muchos creen, no significan MicroSoft eXtended y tampoco Matsushita-SONY-SANYO que fueron los primeros fabricantes de estas máquinas, sino «Machines with Software Exchangeability» de la boca del creador del estándar.
¿Qué era el estándar MSX?
Por aquel entonces cualquier fabricante podía construir un MSX en las diferentes variantes del estándar que existían. Solo tenían que asegurarse montar un ordenador con una serie de chips concretos y con el llamado MSX-DOS, una versión del MS-DOS con intérprete BASIC para procesadores Z80 creada por Microsoft y ASCII. Aparte de soporte para una serie de periféricos y conectores. Es decir, no había un solo fabricante que hiciese un solo ordenador MSX, de ahí a que fuera un estándar y hubiese varios fabricantes distintos.
Obviamente con el tiempo el PC se comió al estándar MSX en todo el mundo por capacidades técnicas. Por lo que fuera de hacer un sistema retro como homenaje no parece que se pueda hacer mucha cosa. Pues eso no es lo que piensa Kazuhiko Nishi para el retorno de su MSX.
Así es el futuro del estándar MSX
La apuesta de Nishi para el futuro del MSX no es crear un ordenador desde cero, sino tomar como base un pequeño ordenador para el internet de las cosas basado en el procesador ESP32. En concreto, el M5 Stack, el cual tiene la capacidad de añadir módulos para añadir nuevas capacidades de expansión al dispositivo. Lo cual permitirá cosas como añadir un slot de cartuchos para ejecutar el software y los juegos de los sistemas clásicos o mejor todavía, reemplazar el procesador central por otro más potente y de mayor capacidad.
Por lo que Nishi a la hora de crear el futuro de su estándar ha tomado dos caminos distintos a los que ha llamado MSX0 y MSX3. En el primer caso, se trata del entorno de los sistemas originales ejecutándose en la unidad base del M5 Stack de forma emulada y que además se podrá llevar a cualquier lado como si fuese versión portátil al estilo Game Boy con varias carcasas intercambiables, dado la unidad principal incluye una pantalla integrada.
MSX3
El concepto más interesante es el del MSX de tercera generación, el cual se trata de una máquina aparte y difiere del MSX0 en algunos elementos clave. Eso sí, parte del concepto de poder apilar varias placas distintas con intercomunicador común con tal de tener el equipo al completo.
Al contrario del caso anterior y como se puede ver en la imagen, en este caso no vemos ninguna pantalla por el medio y existen algunas diferencias respecto al MSX0. La primera de ellas es el uso de una unidad FPGA para simular la circuitería de los MSX originales, la cual no se ve emulada por un procesador ESP32 debido a ello. ¿Su circuitería principal? Un NVIDIA Jetson Orin NX, lo cual le dará una capacidad técnica superior al de una Nintendo Switch y permitirá juegos como los actuales ser portados a la plataforma.
Es decir, de la misma manera que Nishi escogió a principios de los 90 el Z80 como procesador y el TMS9918A como chip de vídeo, esta vez la elección de Nishi ha sido el procesador de NVIDIA pensado para el mundo de la automoción como base para que el resto de fabricantes puedan crear sus propios MSX3.