6 cambios que debes hacer si quieres que tu viejo equipo ejecute Windows 11 con fluidez

Windows 11 es compatible con los procesadores de Intel de 8ª generación en adelante y a partir de la serie Ryzen 2000. Estos equipos cuentan con unos cuantos años en el mercado y, siendo sinceros, no se llevan muy bien con esta versión de Windows.
El 14 de octubre, Microsoft dejará de ofrecer soporte para Windows 10, por lo que, seguir en esta versión de Windows supone de un peligro para los datos almacenados en el equipo por lo que no es una opción que debamos contemplar.
Mejorar el rendimiento de Windows 11 en equipo viejos
Si tu equipo anda justo de rendimiento con Windows 11 y no tienes pensado renovarlo en los próximos meses, puedes realizar una serie de ajustes en la configuración del equipo para mejorar su rendimiento. Lo primero que debes hacer es, si todavía utilizas un HDD, reemplazarlo por un SSD, ya que estas unidades son hasta 6 veces más rápidas que los tradicionales HDD, más todavía si hablamos de unidades NVMe M.2.
Mantener Windows actualizado
Las actualizaciones de Windows, a diferencia de lo que muchos usuarios creen, no están diseñadas para empeorar el rendimiento de los equipos sino lo contrario. El principal objetivo de las actualizaciones de Windows es optimizar el funcionamiento del sistema operativo en base al hardware del PC.
También lo aprovecha Microsoft para parchear las vulnerabilidades que se han podido detectar desde el lanzamiento de actualización anterior y corregir problemas de funcionamiento independientes de la optimización.
Eliminar aplicaciones del inicio de Windows
Muchas son las aplicaciones que tienen la manía de añadirse al inicio del sistema y ejecutarse, aunque el usuario no tenga ninguna intención de utilizarlas. Revisar cuales son las aplicaciones que se inician junto con el PC es fundamental para mejorar el rendimiento eliminando todas las aplicaciones que se cargan pero que realmente no son necesarias a para el día a día.
Para acceder a listado de aplicaciones que se ejecutan al iniciar el equipo y eliminar las que no necesitamos, debemos acceder al Administrador de tareas a través del atajo de teclado Ctrl + Mayús + Esc y pulsar en la pestaña Aplicaciones de arranque. A continuación, seleccionamos las que no queremos que se ejecuten y pulsamos en el botón Deshabilitar.
Desactivar los efectos visuales
Los efectos visuales en forma de transparencias y animaciones suponen una importante carga para la gráfica del equipo y para lo único que sirven es para ofrecer un diseño estéticamente más bonito, pero su utilidad en el día a día en cuanto a prestaciones es nula.
Para desactivar tanto las animaciones como las transparencias, debemos acceder a las opciones de configuración de Windows (Win + i) > Accesibilidad > Efectos visuales. Aquí debemos desmarcar las casillas Efectos de transparencia y Efectos de animación.
Desactivar los widgets
Otro apartado visual que también debemos eliminar de Windows 11 para mejorar su rendimiento son los widgets que se muestran en la parte izquierda de la barra de tares y que muestra información del tráfico, el tiempo, la bolsa entre otros.
Para desactivar los widgets, situamos el ratón en la barra de tareas y pulsamos el botón derecho del ratón para seleccionar la opción Configuración de la barra de tareas. A continuación, desmarcamos el interruptor Widgtes y su icono desaparecerá inmediatamente de la barra de tareas.
Utilizar el plan de energía Alto rendimiento
Windows incluye, de forma predeterminada, 3 planes de energía: Economizador que reduce la velocidad del procesador al mínimo, Equilibrado que se adapta automáticamente a las necesidades del equipo y Alto rendimiento que utiliza la máxima velocidad del procesador.
El plan Alto rendimiento es el que debemos utilizar de forma predeterminada para sacarle el máximo partido al procesador y así mejorar su rendimiento, siempre y cuando lo tengamos conectado a la corriente.
Si lo utilizamos un portátil con batería, es recomendable utilizar el plan Equilibrado si no queremos que el rendimiento se vea muy perjudicado o Economizador para alargar la duración de la batería lo máximo posible. Para cambiar el plan de energía, introducimos el texto «plan de energía» (sin las comillas) en el cuadro de búsqueda de Windows y seleccionamos el primer resultado: Elegir un plan de energía.
Utilizar un navegador ligero
Microsoft ha hecho un excelente trabajo con Edge y en la actualidad es uno de los mejores que podemos encontrar en el mercado y consume muy pocos recursos ya que se encuentra integrado en el sistema. Sin embargo, si te parece que consume muchos recursos puedes probar otros navegadores más ligeros como Brave quien se autoproclama como el navegador que menos recursos consume del mercado.