Hay una gran cantidad de periféricos que podemos utilizar a diario, pero muchas veces se nos olvida que las pantallas táctiles forman parte de esta forma de nombrar a los dispositivos que nos permiten dar ciertas ordenes a un sistema informático para que interprete la información. Esto implica que al ser un tipo de periférico, también necesita un mantenimiento al igual que los teclados o ratones que podemos encontrar, aunque está claro que muchas veces no lo tenemos en cuenta, limpiar una pantalla táctil nos permitirá reducir problemas relacionados con la higiene e incluso con el funcionamiento del dispositivo.
Muchas de las pantallas táctiles que solemos encontrar en el mercado llegan en dispositivos que utilizamos a diario, principalmente smartphones, smartwatches y otro tipo de sistemas informáticos que pueden llegar a acumular una gran cantidad de suciedad debido a que es bastante común utilizarlos con las manos sucias. Por este motivo, de vez en cuando debemos limpiar la pantalla táctil si queremos evitar que haya marcas que puedan dificultar el uso del dispositivo, por lo que os vamos a explicar la mejor forma que tenéis de poder dejar vuestra pantalla como nueva.
Si quieres dejar tu pantalla táctil como nueva, esta es la mejor forma de limpiarla
Una de las cosas que debemos tener en cuenta cuando utilizamos una pantalla táctil está en la suciedad que pueden llegar a acumular, ya que por lo general suele estar directamente relacionada con nuestras manos, es decir, que en gran parte lo que vamos a encontrar son restos de grasa y similares. El mayor problema que hay en este aspecto está en que puede resultar bastante complicado hacerlo, ya que este tipo de marcas pueden terminar esparciéndose en caso de que no utilicemos los productos adecuados, algo que también puede terminar afectando al funcionamiento del dispositivo.
Lo mejor que podemos hacer en este caso para limpiar la pantalla es apagarla y comenzar por pasarle primero un paño de microfibra (para que no dejen pelusas y que no sean abrasivos) haciendo círculos para eliminar todos los restos superficiales, mientras que para lograr quitar por completo la grasa tendremos que pulverizar un poco de alcohol isopropílico sobre otro paño de microfibras, sin mojarlo demasiado, y repetir la misma acción que hemos hecho en el primer paso, esto eliminará por completo la grasa y la suciedad evitando cualquier posibilidad de dañar el dispositivo.
Por otra parte debemos tener en cuenta que si utilizamos una capa protectora como puede ser los protectores de pantalla podemos directamente reemplazarlos, ya que esto además nos ofrecerá la capacidad de eliminar otro tipo de marcas que han quedado sobre el mismo como podrían ser los arañazos, algún que otro golpe (siempre y cuando no haya afectado a la propia pantalla) u otro tipo de muescas que puede tener, además de ser algo bastante recomendable no solo porque permite mejorar la higiene del dispositivo al cambiarlo, sino también porque nos permitirá sustituirlo por uno que sea mejor en caso de que utilicemos uno básico.