EEUU se ha gastado más dinero en fabricar chips este año que en los últimos 28 juntos
Dentro de todos los países occidentales que hay en el mundo, Estados Unidos es uno de los más desarrollados en el ámbito de la informática debido a que posee las empresas más grandes del mundo de desarrollo, tanto de hardware, como de software. Para potenciar todavía más esta industria, EEUU aprobó en 2022 una ley para aumentar el gasto en la creación de chips, fomentando que las principales empresas del sector creen una mayor cantidad de fábricas.
Existen un montón de países que crean chips, y que están dentro de un mercado que solo va en auge, pero si tenemos que destacar uno está claro que es EEUU, por el simple motivo de que la gran mayoría de las compañías que desarrollan las tecnologías más novedosas relacionadas con estos semiconductores están en este lugar. Desde la administración estadounidense saben que se trata de uno de los campos que más dominan, y el que más beneficios puede generar en el país, lo que les llevó a firmar una ley para ayudar a la industria con 280.000 millones de dólares.
Un país que busca dominar por completo las tecnologías más vanguardistas
Como bien sabemos, las principales compañías que han realizado avances en el sector de la inteligencia artificial, tanto a nivel de hardware, como de software, son empresas estadounidenses, pero esto no significa que sean las propias empresas de estados unidos las que dominen por completo el mercado. Y es que si hablamos por ejemplo a nivel de hardware, muchas de las compañías más famosas, como Apple o Intel no habrían podido desarrollar tecnologías de última generación sin una empresa que no reside en Estados Unidos, TSMC.
El paquete de gastos que firmó la administración de Biden con la ley CHIPS que hemos mencionado antes, el que ofrece una especie de subvención de 280.000 millones de dólares, tiene como objetivo que todas las empresas tanto estadounidenses como extranjeras construyan sedes en este país. Esto implica obviamente que no es únicamente una inversión para empresas de dicho país, sino que EEUU busca dominar por completo el mercado ofreciendo a otras empresas como Samsung o TSMC tener una sede financiada con el dinero de la ley CHIPS en dicho país.
Como podemos imaginar, realmente este movimiento busca apoderarse por completo de todas las tecnologías relacionadas con los chips para poder considerarlo un producto nacional, y poder prácticamente monopolizar por completo este mercado, aunque prácticamente ya es el caso.
Aunque tienen tecnologías muy avanzadas, tienen problemas que no saben como solucionar
Estados Unidos no es un país perfecto, al igual que todas las regiones del mundo tiene una gran cantidad de problemas, pero hay un gran problema que afecta directamente a la propuesta que quieren hacer para fomentar tanto a sus empresas como a las extranjeras a construir fábricas y sedes en dicho país. Aunque muchas de las plantas ya están en fabricación, hay bastantes que están experimentando grandes retrasos a la hora de construirlas, como son las de Samsung, TSMC o Intel, que llevan un año o más de retraso.
Esto principalmente está relacionado con la escasa normativa que tiene Estados Unidos para este tipo de casos, ya que aunque tiene leyes, no están estructuradas para ofrecer puntos clave que permitan agilizar los procesos, algo que termina convirtiéndolo en uno de los países más lentos del mundo en la construcción de fábricas de chips. Obviamente, si lo comparamos con la velocidad a la que China está construyendo sus decenas de fábricas y plantas de desarrollo de chips, es posible que cada vez veamos cómo el país oriental se acerca con más rapidez a estas nuevas tecnologías que pueden cambiar el mundo.