A pesar que los fabricantes de memoria NAND Flash han comenzado a disminuir su límite de inversión destinado a este tipo de memoria de almacenamiento sólido, el mercado sigue teniendo una importante saturación de chips de memoria, lo que va a provocar que el precio de los SSD siga cayendo. Esto podría llevar a que, durante este nuevo año 2019, los precios de estos dispositivos de almacenamiento sólido llegaran a reducirse a la mitad de los que son actualmente.
Si por algo se ha caracterizado el año 2018, en cuanto al almacenamiento sólido, es que ha sido el año en el que el precio de los SSD ha caído a mínimos históricos. Y es que, durante ese año, hemos visto como los SSD de 500 GB, que costaban sobre los 200 euros cuando comenzaba el año, han ido bajando durante todo él, hasta llegar a situarse en torno a los 80 euros.
Esto ha propiciado que se haya renovado el interés de los usuarios por montar este tipo de dispositivos en el interior de sus ordenadores personales. Tanto a nivel de sistemas de escritorio, como de ordenadores portátiles. Lo cual tiene todo el sentido del mundo, dado que el incremento prestacional que permiten este tipo de dispositivos, frente a los tradicionales mecánicos, es bastante considerable.
El precio de la NAND Flash para los SSD caería más de lo previsto inicialmente
A pesar de la caída de precios que hemos visto en el pasado, diferentes fuentes coinciden en afirmar que el exceso de stock de memoria NAND Flash que hay ahora mismo va a hacer que los precios sigan bajando durante todo este nuevo año 2019. Hasta el punto que es muy probable que, para finales de año, el precio de los SSD se haya reducido a la mitad del que tienen actualmente. Y es que los precios no se comenzarán a normalizar hasta que el exceso de stock se reduzca de manera significativa por parte de los fabricantes de memoria. De hecho, ya comentábamos el pasado 2018, que 2019 podría ser el año en el que los SSD y los HDD alcanzaran la paridad de precios entre ambas plataformas.
A este respecto, y a pesar que los fabricantes ya han hecho descender el límite de inversión en un 10% durante el pasado 2018, se espera que durante el 2019 este límite baje todavía un 2% más. De esta manera, los fabricantes intentarán equilibrar en gran manera el mercado de oferta y demanda, dado que las ventas de ordenadores portátiles dotados con SSD, así como la venta de teléfonos móviles, han sido bastante inferiores, en ambos mercados, a las previsiones que se tenían para ellos a principios del pasado 2018.