Intel Core i9-9900K vs AMD Ryzen 7 2700X: ¿cómo rinden ambos a la misma frecuencia de 4,2 GHz?

La guerra de la serie Coffee Lake Refresh de Intel y los Ryzen+ de AMD solo ha comenzado. Si bien las reviews por todo el mundo ya han situado a ambas apuestas de cada fabricante en su lugar, toca ver que rendimiento son capaces de ofrecer a misma frecuencia. Hoy os vamos a mostrar las diferencias en gaming entre este i9-9900K vs Ryzen 7 2700X a 4,2 GHz.
¿Puede el Intel Core i9-9900K superar al Ryzen 7 2700X a 4,2 GHz?
El gaming es el ambiente propicio para estas CPU, en eso debemos estar de acuerdo, están diseñadas para los más jugones y cada marca intenta extraer hasta el último MHz de cada uno de sus microprocesadores para empujar el rendimiento.
Pero cuando comparamos a ambas CPU a misma frecuencia premian otros aspectos, unos directos y otros indirectos o menos importantes. Lo primero que tenemos que tener en cuenta es el IPC (instrucciones por ciclo) que determina en buena parte el rendimiento general de una CPU.
En este caso vamos a coger (para situar a cualquier lector) los datos de IPC desde Guru3D, ya que son de los pocos que hacen comparativa de esto en un entorno imparcial como es Cinebench R15:
En este apartado clave, Intel consigue una ventaja de 3,37% frente a AMD a mismos clocks y sin mejoras de rendimiento en placa, como puede ser el Asus Multicore Enhanced o similares tecnologías.
Volviendo a lo importante del artículo, las configuraciones para las pruebas según For Gamers han sido:
Como vemos ambas CPU figuran a la citada frecuencia de 4,2 GHz con sus respectivos voltajes y placas de misma gama, pero además, encontramos que en ambos corren unas G.Skill a 3866 MHz Cas 18, por lo que o bien el IMC del Ryzen es sobresaliente o bien el voltaje que le han puesto tiene que ser muy alto para soportar dichas frecuencias de manera estable.
Consumo y temperaturas
Haciendo mención a lo que hemos comentado, otros datos menos relevantes han sido comparados, y creemos que es interesante remarcarlos. Así han podido medir el consumo del equipo completo igualando la contienda y al mismo tiempo comprobar las temperaturas de estas dos CPU soldadas:


Como se aprecia, la configuración de Intel consigue 11 vatios menos de consumo y solo un grado más de temperatura en gaming, por lo que de momento todo está muy igualado.
Entrando de lleno en el apartado de los juegos, hay datos muy curiosos y diversos factores a tener en cuenta, sobre todo el hecho de que a mayor resolución la diferencia entre una y otra CPU debe reducirse a cero si fuese la GPU la que produce el cuello de botella.
Rendimiento en juegos a 1080p, 2K y 4K
Así, aquí os dejamos todos los datos extraídos de dicha comparativa y donde comentaremos algunos de los más llamativos:
En AC Odyssey en 1080P encontramos como el 2700X se impone por la mínima al i9-9900K pero curiosamente a 2K las tornas se invierten:
Como si fuese el refrán, donde dije digo, digo diego. Las tornas a mayor resolución dan la vuelta para poner al i9-9900K por delante por 4 FPS.
En Monster Hunter World ocurre algo similar. A 1080P ambas CPU están igualadas (aunque con mejores mínimos para el Intel) pero a 2K la diferencia a favor del azul se torna en 5 FPS.


Hay casos similares en los datos que os dejamos abajo, pero como era de esperar a mejor optimización del juego y motores que aprovechen mejor el hardware mayores diferencias (no podemos comparar SOTTR con Overwach por ejemplo) incluso a 4K, donde no deberían existir ventaja alguna de uno sobre el otro, terminan por darse.
Os animamos a observar los datos detenidamente ya que no tienen desperdicio.































