Ahora os voy a contar la verdadera historia de AMD Ryzen Threadripper
Se ha publicado en la revista Forbes, una entrevista con el equipo que estuvo a cargo del desarrollo del nuevo procesador HEDT AMD Ryzen Threadripper. Es una entrevista de lo más reveladora. De como un proyecto marginal, de los que se hacen en el tiempo libre, acabó convirtiéndose en uno de los mayores éxitos de AMD de esta década.
Toda la línea de procesadores Ryzen ha vuelto a poner a AMD en la palestra. Y ha puesto a Intel de cara a la realidad. A la par que les ha sacado del ensimismamiento acumulado durante 10 años de tener los procesadores más vendidos. La llegada de Ryzen al panorama lo ha revolucionado todo. Ahora Intel quiere que su gama alta de escritorio tenga seis núcleos. En lugar de los 4 con los que llevamos desde los tiempos de los Nehalem. Ahora la gama HEDT ha pasado de tener un máximo de 10 núcleos en Intel, a tener un máximo de 18 núcleos. Y esto último se lo debemos agradecir, directamente, a los AMD Rzyen Threadripper.
Erase una vez el AMD Ryzen Threadripper
El comienzo de esta historia es bastante peculiar. Porque AMD Ryzen Threadripper nunca hubiera existido si no hubiera sido por un grupo de entusiastas de AMD. Efectivamente: Threadripper no existía en los planes originales de AMD en el 2015. Originalmente, este procesador eran los sueños y deseos de un grupo de ingenieros, innovando sobre el papel, solo por el gusto de innovar. Sin presupuesto ni nada. Haciéndolo en sus ratos libres (lo que se suele llamar skunkwork project).
En este proyecto estuvieron así trabajando durante un año hasta que comenzaron a obtener los primeros resultados buenos de su nueva arquitectura Ryzen. Y se dieron cuenta que lo que estaban diseñando podía realmente funcionar si se aprobaba el diseño total.
Threadripper cubre un hueco importante que queda entre el Ryzen de escritorio más potente y EPYC
Es entonces cuando el proyecto se menciona a Jim Anderson (que acababa de incorporarse a la compañía desde Intel). El cual se muestra apasionado desde el principio. Es él el que le da la luz verde al proyecto y el que lo incluye en el roadmap por primera vez. Y a la vez se dieron cuenta que, aun a pesar de ser un proyecto «de tiempo libre» se había planificado desde el principio de la manera correcta. Mucho mejor que si se hubiera hecho de manera oficial desde el principio. El hecho es que las especificaciones iniciales fascinaron a Jim Anderson, el cual también es arquitecto de procesadores.
Lo único que originalmente no gustó demasiado del proyecto era que se esperaba sacar al mercado para 2018. Esto se cambió y se adelantó a las fechas que ya hemos visto durante Agosto.
También hubo que decidir qué socket y empaquetado usar. Aunque esta decisión fue mucho más sencilla. Dado que Threadripper está basado el EPYC, se decidió emplear una variante del socket SP3 para construir el socket TR4. Y el empaquetado mantuvo los mismos parámetros de EPYC, solo que empleando dos de los CCX únicamente como soportes estructurales para los disipadores.
Threadripper era solo el nombre privado del proyecto
El nombre de Threadripper era el que se utilizaba de manera privada entre las personas que se reunían para trabajar en el proyecto en su tiempo libre. Pero, cuando hubo que darle un nombre definitivo a estos nuevos procesadores, el que más seguía gustando cómo sonaba era ese: Threadripper. Y, al final, es con ese con el que se acabó quedando.