Plextor ha anunciado el lanzamiento de su nueva familia de dispositivos de estado sólido SSD M6S Plus, nacidos como evolución de los anteriores Plextor M6S. Éstas unidades están orientadas a la gama de entrada, por lo que proporcionarán una excelente relación de capacidad / precio y con un rendimiento bastante decente gracias a la integración de los chips NAND Toshiba A19 fabricados con litografía de 15 nanómetros.
Los nuevos Plextor M6S Plus incorporan una controladora SSD Marvell 88SS9188, gracias a la cual son capaces de entregar una velocidad de lectura de hasta 520 MB/s y hasta 440 MB/s de escritura, dependiendo de la capacidad. Y es que Plextor ofrecerá los M6S Plus en capacidades de 128, 256 y 512 GB, siendo la velocidad de escritura de 300, 420 y 440 MB/s respectivamente en éstas, con hasta 90.000 IOPS de lectura y 80.000 IOPS de escritura.
Como decíamos son SSDs de gama de entrada por lo que aunque todavía no se ha anunciado su precio ni fecha de llegada a tiendas, se espera que sean bastante asequibles. Cabe mencionar que Plextor solo los ofrecerá en formato de 2.5 pulgadas e interfaz SATA 3, y en todos los casos se incluirán las tecnologías PlextTurbo (caché de datos) y PlexCompressor (compresión de datos) igual que en los anteriores M6S.
La gama de entrada, la reina de los SSDs
Seguramente ya os habréis fijado que últimamente muchos fabricantes de SSDs (e incluso muchos que no fabricaban SSDs hasta ahora pero se han animado a unirse al mercado) están ofreciendo como productos estrella dispositivos de estado sólido de gama de entrada. Y es que gracias a la reducción del tamaño de los procesos de fabricación, ahora son capaces de crear más unidades, más rápido y con un coste menor, lo que se ve repercutido en unos precios bastante más asequibles para el usuario.
Y claro, el usuario medio que quiere quitarse de encima los lentos discos duros mecánicos como disco del sistema saben bien que un SSD es la compra más rentable para darle una inyección de rendimiento a su equipo, pero si su presupuesto es bajo siempre van a tender a ir a por un SSD de gama de entrada, con una relación capacidad / precio muy elevada, antes que un SSD de gama alta que proporcione un rendimiento más alto.