Sapphire Technology, uno de los socios principales de Radeon Technologies Group (RTG) en la fabricación de tarjetas gráficas, ha presentado su nuevo modelo Sapphire Radeon R9 Fury NITRO al cual se le ha dotado de un nuevo circuito impreso (PCB) diferente al que llevan usando el resto de fabricantes desde el lanzamiento de las Radeon R9 Fury y dotándola a su vez de nuevas salidas de vídeo, aumentando de esta manera la compatibilidad con monitores antiguos.
Desde el lanzamiento de la serie Fury, todos los modelos de las diferentes marcas se han tenido que guiar por unos estándar de diseño dictados por RTG de los cuales no se podían desviar lo más mínimo, lo cual ha dado lugar a que todos los modelos daban rendimientos muy parejos. Pero recientemente se ha sabido que RTG ha levantado ya un poco más la mano en ese aspecto y está comenzando a permitir que sus principales AIB creen sus propios circuitos impresos con los componentes que ellos consideren convenientes para sus modelos, siempre y cuando no disminuya el estándar de calidad y de rendimiento de la tarjeta.
Sapphire Technology ha sido la primera en aceptar este reto y recientemente ha presentado su modelo Sapphire Radeon R9 Fury NITRO, que viene a sustituir a su actual modelo Tri-X.
La nueva tarjeta gráfica de Saphhire cuenta con un PCB más largo que el que lleva originalmente la R9 Fury al que se le ha incluido una placa de refuerzo en su parte trasera para evitar la flexión que induce en la placa el empleo del disipador Tri-X de tres ventiladores. Aunque no sabemos cuál es el motivo del aumento del tamaño del PCB, la opción más lógica de pensar sería que se ha modificado y mejorado la circuitería del sistema de entrega de potencia a la tarjeta, lo que a su vez permitiría aumentar el rango de los overclocks que se podrían conseguir con esta tarjeta. De serie, la tarjeta viene con un pequeño overclock del núcleo, que sube a los 1050 Mhz desde los 1000 Mhz que emplea la Radeon R9 Fury original.
Una manera más de diferenciarse de la competencia que empleará esta tarjeta gráfica es la adición de una salida de vídeo tipo DVI-D. La R9 Fury original contaba tan «solo» con una salida HDMI y tres salidas tipo DisplayPort. Con esa configuración, cualquier usario cuyo monitor solo poseyera entradas de vídeo DVI no podía emplear la tarjeta si no era con el uso de adaptadores. Sapphire ha corregido ésto añadiendo una salida de vídeo DVI-D a su nueva tarjeta y conservando todas las antiguas para permitir la máxima compatibilidad posible. Lo «malo» es que al hacerlo, han ocupado casi la mitad de la abertura destinada a la refrigeración de la gráfica.
Los requerimientos de alimentación de la nueva Sapphire Radeon R9 Fury NITRO permanecen inalterados en tanto que se requieren dos conectores de 8 pines para suministrar los 375 W que consume y una fuente de al menos 750 W de potencia para mover el sistema sin problemas generales.