Google tiene intención de realizar el desarrollo compartido de varios de los componentes de los que serán sus nuevos móviles, llegando incluso a desarrollar ellos solos los procesadores que emplearán los móviles, de manera que se aseguren que las nuevas funcionalidades que se incorporen a su sistema operativo Android, acaben teniendo disponible toda la potencia que requieran para funcionar de la manera para la que han sido diseñadas.
En un movimiento que no deja de ser bastante sorpresivo (aunque no por ello deje de ser lógico) Google ha propuesto durante una reunión con varios representantes de fabricantes de chips tipo SoC una larga lista de los requisitos que éstos deberán de cumplir para poder ser soportados por su sistema operativo Android. En esta misma reunión, Google dejó transpirar que ellos mismos comenzarán a diseñar los procesadores para asegurarse que la potencia se destine allí a donde tiene que ir.
Las nuevas versiones de Android de Google van a tener un peso bastante importante en el desarrollo de la realidad aumentada y virtual. La realidad aumentada es, precisamente, bastante dura para el procesador dado que se necesita un sistema capaz de reconocer las imágenes en tiempo real para, de manera inmediata, incluir los datos que se crean pertinentes en lo que se está viendo en ese momento. Google ya tiene un primer sistema similar funcionando con las Google Googles que puede identificar logos, cubiertas de libros y otras imágenes. Algo similar a lo que ya hace World Lens pero sin limitarse a traducir textos.
Una de las especificaciones que puso Google sobre la mesa es la de diseñar los procesadores con memoria dedicada de manera interna, de manera que en caso de necesitarla no tenga que acceder a ella fuera de él y reducir así las latencias. Lo que me lleva a pensar que sería algún tipo de memoria caché de muy gran tamaño, frente a las caché que incorporan actualmente los procesadores que suelen ser de poco tamaño.
Si Google comenzara a diseñar sus propios procesadores para móviles lo colocaría a la par de Apple en cuanto a desarrollo pero… ¿Qué sucedería con otros fabricantes de procesadores como Samsung, Hyundai, Qualcomm o Mediatek, por citar solo los más importantes? ¿Acabaríamos teniendo dos categorías de Android, una para procesadores diseñados por Google y otra para el resto que no cumplen el 100% de requisitos? Sería obvio que acabarían teniendo que comprar la licencia de fabricación, pero creo que, al final, acabarían matando en gran medida la variedad de productos con Android que hay actualmente en el mercado. Es, desde luego, un movimiento al que deberemos de prestar mucha atención en el futuro.