La próxima tarjeta gráfica que aterrizará en el mercado de la mano de AMD es la Radeon R9 380X, y por suerte para nosotros ya ha salido a la luz toda la información relativa a ésta e incluso una página web china ha mostrado imágenes reales de la versión que el ensamblador XFX lanzará al mercado.
El próximo lanzamiento de la Radeon R9 380X es muy importante para la compañía pues pretende ser el revulsivo que AMD está buscando para obtener una buena cuota de mercado en un segmento (el de gráficas de gama media-alta de menos de 300 dólares) que ahora mismo están copando las GeForce GTX 960 y GTX 970 de NVIDIA. Por ello, el chip «Tonga» que potenciará ésta tarjeta gráfica estará totalmente desbloqueado, ofreciendo 2.048 Stream Processors y 32 Compute Units, con 128 TMUs y 32 ROPs en total y con una cantidad de memoria de 3 y 6 GB GDDR5 a través de un bus de 384 bits.
Eso sí, existe la posibilidad de que AMD decida abaratar un poco el coste de producción de éstas Radeon R9 380X utilizando la misma memoria que emplean las R9 380, es decir, una cantidad de 4 GB a través de un bus de 256 bits. Esto reduciría ligeramente el coste de fabricación de la gráfica y permitiría a AMD lanzarla al mercado con un precio bastante más competitivo.
En lo que a XFX se refiere, ya hemos podido ver a través de la web Expreview las primeras imágenes del modelo que lanzarán al mercado, al que según parece equiparán su potente disipador «Double Dissipation». Éste disipador cuenta con dos bloques de láminas de aluminio con cuatro heatpipes de 8 mm de diámetro cada una y dos ventiladores de 100 mm de diámetro cada uno, asegurando un buen nivel de temperaturas en la GPU, VRM y memorias mientras que mantiene un bajo nivel sonoro.
Por el momento se desconoce la fecha de lanzamiento, aunque si ya se han filtrado imágenes reales del modelo personalizado por XFX significa que ya están en manos de algunos analistas de hardware y por lo tanto su lanzamiento debe de ser inminente a estas alturas. En cuanto al precio tampoco se sabe nada concreto, pero teniendo en cuenta que estará enfocada a competir con las GeForce GTX 960 y GTX 970 de NVIDIA, podemos decir a ciencia cierta que costará menos de 300 dólares, en torno a unos 280 euros seguramente (pero ya sabéis que dependerá de cada ensamblador).