Plextor ha anunciado la disponibilidad de sus nuevos dispositivos de estado sólido (SSD) M6V Series, de formato 2.5 pulgadas y M.2 (M6GV Series) e interfaces SATA 3 y mSATA (M6MV Series). Son SSDs que comparados con los otros dispositivos del mercado tienen unos precios bastante buenos, mejorando la relación de €/GB actual.
Los Plextor M6V Series estarán disponibles en capacidades de 128 GB, 256 GB y 512 GB. Todos los modelos, incluyendo los M.2 y mSATA, emplean una controladora Silicon Motion SMI-2246 y memoria NAND Flash Toshiba de 16 nanómetros de probada eficiencia, haciendo de los Plextor M6V Series unos dispositivos bastante versátiles.
Ahora bien, se trata de una gama considerada de entrada dentro del catálogo de Plextor y por lo tanto tampoco es que sean la panacea, pues la intención del fabricante con esta serie de SSDs es la de proporcionar altas capacidades de almacenamiento a buenos precios.
Teniendo esto en cuenta, el rendimiento teórico de la serie M6V depende de la capacidad, pues cada uno de los SSD cuenta con una cantidad de memoria DRAM integrada distinta que le proporciona un rendimiento mayor o menor. Según lo especifica el fabricante, el rendimiento teórico queda de la siguiente manera:
- El modelo de 128 GB tiene 128 MB de caché DRAM, y su rendimiento teórico es de 535 MB/s de lectura y 170 MB/s de escritura.
- El modelo de 256 GB tiene 256 MB de caché DRAM, por lo que su rendimiento se ve aumentado considerablemente hasta los 525 MB/s de lectura y 335 MB/s de escritura.
- Por último, el modelo de 512 GB tiene 512 MB de memoria caché, y lógicamente es el que más rendimiento teórico proporciona: 535 MB/s de lectura y 455 MB/s de escritura.
Eso sí, en estos términos todas las variantes tienen un rendimiento de unos 83.000 IOPS de lectura y 80.000 IOPS de escritura.
Precio y disponibilidad
En teoría Plextor debería de poner esta nueva familia de SSDs M6V en las tiendas entre esta semana y la que viene, a un precio recomendado de 69 euros para el modelo de 128 GB, 115 euros por el de 256GB y 245 euros por el modelo de 512 GB, todos con IVA incluido.
En nuestra opinión, estamos llegando ya a un momento en el que los precios de los SSDs ya sí permiten que merezca la pena tener medio terabyte de SSD en nuestro sistema, casi prescindiendo de un disco mecánico en este caso a no ser que vayamos a utilizar el equipo como estación multimedia y necesitemos almacenamiento masivo.