Según un reporte publicado por una página web coreana dedicada a la economía, Samsung estaría presuntamente interesada en comprar AMD para poder competir con Intel. El reporte asegura que el gigante coreano intentará comprar AMD y la incorporará con una de sus subsidiarias para tomar el control de la propiedad intelectual de la marca en los entornos de CPU y GPU para hacer crecer sus oportunidades de mercado y colocarse en una posición más favorable para poder competir de igual a igual con Intel y su todavía rival en la industria móvil Qualcomm.
Según reza la publicación, esta no sería la primera vez que Samsung ha mostrado su interés en comprar AMD, ya que el director de telecomunicaciones de Samsung dijo allá en 2007 «Es necesario considerar la adquisición de AMD para poder asegurar un nuevo motor de crecimiento para la compañía», según la fuente.
Una cuestión inmediata nos surge sobre este tema, referente a la licencia cruzada entre AMD e Intel que permite a los primeros fabricar procesadores x86 y a los segundos x64 (recordemos que la patente x86 pertence a Intel y la patente x64 pertenece a AMD). Nos preguntamos si una supuesta adquisición de AMD por parte de Samsung violaría este acuerdo y éstos dejarían de tener derecho a fabricar componentes con arquitectura x86. Ya hubo un precedente en el pasado, cuando AMD escindió sus fábricas a Global Foundries en 2008 e Intel acusó a AMD de violar su acuerdo. Se produjo un juicio rápido y AMD no solo ganó dado que el juez estimó que no habían violado ninguna pauta del acuerdo, sino que Intel tuvo que pagar 1250 millones de dólares a AMD en concepto de daños y perjuicios.
Un acuerdo de esta envergadura potenciaría la presencia de Samsung en el mercado de PC
Samsung e Intel han tenido desde hace tiempo varios frentes abiertos entre ellos. La actual competencia en el mercado móvil actual y las capacidades de ambos a la hora de fabricar semiconductores son los ejemplos principales de esta competencia entre ambos. Además, en los últimos tiempos Intel ha demostrado un especial interés en penetrar en el mercado móvil (smartphones y tablets), lo que significa que todos los involucrados (incluyendo Samsung) están ganando menos dinero, agravado por el hecho de los precios de entrada que Intel está poniendo a su gama Atom, lo que ha obligado al resto a bajar sus precios para seguir siendo competitivos.
Si Samsung comprara AMD e integrara su propiedad intelectual de CPUs y GPUs en su arsenal, podría convertirse en un arma muy poderosa tanto en el mercado como en las batallas legales. AMD obtuvo en su día la gran mayoría de patentes cuando compró ATI, una compañía que fue fundada 8 años antes que NVIDIA, lo que significa que Samsung podría utilizar esos 8 años de ventaja para contraatacar a NVIDIA en la guerra de patentes también. Naturalmente, el objetivo de Samsung no sería solo el de ganar patentes y tener más armas para las batallas legales, sino que tendría nuevos productos para el creciente mercado de PC como la próxima arquitectura x86 AMD Zen, la arquitectura ARM de 64 bit K12, y las próximas arquitecturas gráficas AMD Volcanic Islands y Arctic Islands.
Si esta compra se produce, todavía podría haber futuro para AMD
A pesar de que el medio coreano asegura que la intención de Samsung sería combinar AMD con una de sus subsidiarias, podrían tomar otra decisión muy diferente y más parecida a la que tomó Toshiba cuando compró OCZ: mantener la empresa como tal y combinar la propiedad intelectual de ambas. Samsung tiene un elevado número de patentes que podrían mejorar significativamente la posición de AMD en el mercado. Imaginad que AMD tendría en ese caso acceso ilimiado a las fábricas de Samsung que producen chips FinFET a 14 nanómetros, además de contar con un enorme presupuesto de R&D para mejorar lo que ya tienen.
En cualquier caso, tenemos que tratar toda esta información como hipótesis, ya que aunque la fuente es un medio bastante serio, hemos tratado de contrastarla por otros medios y no hemos encontrado nada al respecto. Así pues y para no perder la costumbre, de momento solo podemos esperar a ver qué pasa.