G.Skill ha presentado sus nuevas unidades SSD Phoenix Blade, de formato PCI-Express y de hasta 960 GB de capacidad de almacenamiento. La marca estuvo haciendo demostraciones en el Computex, y gracias a sus increíbles velocidades de 1.8 GB/s de lectura y 1.1 GB/s de escritura acaparó las miradas de muchos entusiastas del hardware que buscan una mejora sustancial de velocidad de los (ya casi) antiguos SSDs con interfaz SATA 3.
Está claro que los SSDs actuales están limitados por la interfaz SATA 3, y por ello, al menos hasta que SATA Express se establezca de forma definitiva, los fabricantes están buscando métodos alternativos de interfaz y cada vez se ven más discos duros con interfaz PCI-Express, gracias a su amplio ancho de banda. Es el caso de estos SSDs G.Skill Phoenix Blade, cuyo aspecto estético parece el de una tarjeta gráfica pero sin refrigeración, y que como hemos comentado antes alcanzan velocidades casi absurdas de 1.8 GB/s de lectura y 1.1 GB/s de escritura, con una velocidad de escritura aleatoria 4K de 275.000 IOPS, bastante más elevadas que las opciones de otros fabricantes que también tienen SSDs PCI-Express.
Estarán disponibles en capacidades de 480 y 960 GB, y aunque no se conoce todavía ni la fecha de disponibilidad ni el precio, parecen una solución óptima para usuarios que busquen la máxima velocidad sin tener en cuenta las limitaciones de espacio que suponen los actuales SSDs SATA 3 (donde unidades de 512 GB ya suelen ser el tope de gama y tienen un precio bastante elevado, teniendo en cuenta que solo los modelos de la gama más alta superan los 500 MBs/s de lectura y escritura). Lo que es seguro es que, al menos al principio, serán bastante más caros que los SSDs SATA3.