Hace unos pocos días os comentamos que Toshiba había anunciado su gama de discos duros de 3.5 pulgadas con gran capacidad de almacenamiento, en concreto de hasta 3TB. Con ese anuncio, el duopolio que tienen actualmente Seagate y Western Digital no se verá demasiado afectado, pues entre las dos compañías controlan el 85% del mercado de discos duros, y eso es mucho. Toshiba sigue dando buenas noticias, y ahora han comentado que aumentarán la producción de discos duros en un 35%, de este modo pretenden competir y hacer frente a las dos grandes compañías que controlan el mercado actualmente.
La situación de los discos duros sigue siendo mala, pero para los consumidores. Ya hemos comentado anteriormente que Seagate y Western Digital han obtenido unos buenos beneficios en el último trimestre del año, bastante buenos y desde luego no se apreciaba ningún síntoma de crisis.
Entre Seagate y Western Digital controlan actualmente el 85% del mercado de discos duros, puesto que entre ambas han comprado a prácticamente toda la competencia que había. Seagate cuenta con Maxtor, Quantum, LaCie y la división de discos duros de Samsung, aunque también habrían comprado a OCZ, pero todavía no se ha hecho oficial. Western Digital, por su parte, compró a Hitachi hace unos meses, por lo que la única empresa que puede hacerles frente es Toshiba.
El 15% restante pertenece precisamente a Toshiba, pero es una cifra muy baja y por ahora no pueden competir mano a mano con el duopolio que han formado las dos empresas. Por ello, han anunciado que aumentarán la producción de discos duros en un 35% e invertirán unos 250 millones de dólares en fabricas para hacerlo.
Actualmente Toshiba fabrica unas 11 millones de unidades de almacenamiento, y se pretende que a finales de este año esa cifra sea de 12 millones. Para el año 2015 se espera que la producción sea de 15 millones de unidades, por lo que esperamos que las cosas les vayan muy bien. Sin duda es una buena noticia y esperamos que Toshiba logre poner un poco más de competencia, lo que haría que los precios se ajusten un poco más y bajen, que al fin y al cabo es lo que los consumidores finales esperamos.