ASUS ROG THOR Platinum II, probamos la mejor fuente de ASUS

Como su nombre sugiere, la ASUS ROG THOR Platinum II es una fuente de alimentación que porta el sello de eficiencia 80 Plus Platinum, el segundo más alto que podemos encontrar en fuentes de alimentación para PC. Pero como producto dentro de la familia ROG, además de ofrecer un buen rendimiento y una estética sin parangón, esta fuente esconde una gran cantidad de detalles que, sin lugar a dudas, marcan la diferencia con respecto a la competencia. Vamos a ello.

ASUS ROG THOR Platinum II, especificaciones técnicas

ASUS nos ha enviado el modelo de 850W de potencia, si bien tienen otros modelos más potentes en su catálogo; con todo, 850W es más que de sobra para manejar la potencia necesaria para un PC gaming de altas prestaciones, como el que utilizaremos para probar esta fuente de alimentación.

Destaca por su eficiencia 80 Plus Platinum, la segunda más alta posible, y su construcción 100% modular para solo tener que conectar los cables necesarios y no tener otros estorbando. Es una fuente de categoría Premium, y como tal ASUS incluye cableado del llamado sleeved para la mayoría de los cables (todos excepto los SATA y MOLEX, que son planos), y por supuesto es ATX 3.0 y PCIe 5.0 con el nuevo conector 12VHPWR que requieren las gráficas NVIDIA modernas.

Pero uno de los atractivos más destacados de esta ASUS ROG THOR Platinum II es sin lugar a dudas el display OLED instalado en un lateral, que nos mostrará en tiempo real el consumo del equipo en todo momento. Eso sí, ojo con la caja en la que pretendas instalar esta fuente porque en la mayoría de cajas modernas la fuente de alimentación queda cubierta, en cuyo caso la pantalla no se vería.

Por lo demás, es una fuente de altas prestaciones y calidad Premium en todos los sentidos, algo que va desde sus especificaciones hasta sus materiales de construcción (como veremos en breve), y conscientes de ello desde ASUS nos dan 10 años de garantía, por lo que deben estar muy seguros de su buen funcionamiento.

Unboxing y análisis externo

La ASUS ROG THOR Platinum II viene embalada en una caja de cartón duro de grandes dimensiones que está adornada con los habituales colores rojo y negro de la familia de productos ROG. En la cara frontal podemos ver la marca, el modelo, una imagen a tres cuartos de la fuente y unos iconos que destacan su iluminación Aura, su certificación de eficiencia y sus 10 años de garantía.

En la parte posterior encontramos seis de sus principales cualidades destacadas, mientras que en uno de los laterales tenemos una enumeración de los cables y conectores incluidos en este modelo de 850 vatios.

La caja se abre en forma de cofre y en el interior tenemos dos secciones separadas; a la derecha está la fuente de alimentación, mientras que a la izquierda encontraremos los accesorios y el cableado.

Comencemos viendo los accesorios. En una bolsa de tela con el logo de ROG tenemos todos los cables que en seguida vemos, pero también tenemos dos cables de corriente (americano y europeo) y una bolsa con bridas, tornillos, manuales, etc.

Esto es lo que tenemos en el interior de esa bolsita translúcida: el manual, un panfleto de cablemod (los encargados de hacer el sleeving de los cables), unos peines para estos cables sleeved, cuatro bridas de velcro reutilizables, un puñado de bridas normales, un logo de ROG con adhesivo y cuatro tornillos para anclar la fuente a la caja.

En cuanto a los cables modulares, vienen en tres bolsas separadas.

Por un lado tenemos el cable de 600W 12VHPWR, que termina en dos conectores PCIe para el lado de la fuente. Este cable es sleeved pero la cubierta no es de tela como es habitual sino de un plástico resistente al calor y al fuego.

El cable ATX de 24 pines sí tiene un sleeving convencional en color negro, y en el lado de la fuente también tiene doble conector. Atentos al detalle de calidad, porque los conectores internamente tienen baño de oro para maximizar la conductividad.

Tenemos también dos cables EPS de 8 pines cada uno, también sleeved.

Por supuesto hay también tres cables con conector PCIe de 6+2 pines para tarjetas gráficas convencionales.

Finalmente, los cables con conector SATA, MOLEX y Floppy no son sleeved, pero al menos sí que son planos para facilitar su canalización en el interior de la caja; de todos modos, en un montaje de PC moderno estos cables no son ya necesarios.

Ahora sí, aquí tenéis la ASUS ROG THOR Platinum II en una vista a tres cuartos que nos muestra una estética bastante bonita, gracias a esa rejilla plateada que protege la zona del ventilador.

Comenzamos viendo precisamente esta parte inferior, la rejilla que crea un contraste muy llamativo con colores plata y negro. En una esquina (en breve lo vemos más de cerca) tenemos una especie de pirámide que luego se iluminará, con el nombre THOR por dentro.

Este es el lateral que, con la fuente montada, debería quedar hacia fuera. Tiene acabado espejo, con el logo de ROG en un lado que luego se iluminará, y es que es justamente en esta zona (donde el acabado en espejo) donde ASUS ha instalado el pequeño display OLED para mostrarnos el consumo de la fuente en tiempo real. Luego lo vemos.

Nada especialmente destacable en el lateral opuesto, donde solo está otro logo de ROG y el modelo de la fuente.

En la parte trasera tenemos la habitual rejilla de salida de aire caliente, con el conector para el cable de corriente, el interruptor de encendido y apagado de accionamiento mecánico, y un interruptor que nos permitirá seleccionar el modo de funcionamiento del ventilador, ya que es híbrido y podemos elegir que se apague cuando el consumo es inferior al 40% para mantener el nivel sonoro al mínimo.

En la parte interna tenemos todos los conectores modulares, amén de un conector por si queremos conectar la fuente a la placa para controlar su iluminación Aura RGB.

Finalmente, en la parte que quedará hacia arriba tenemos la típica pegatina con la tabla de potencia y con los sellos de certificaciones y cumplimiento.

Análisis interno

Para acceder al interior de la fuente primero tenemos que retirar cuatro tornillos y quitar la rejilla de la zona del ventilador. Tras ello, tendremos que quitar otros seis tornillos adicionales (cuatro de ellos son los que anclan el ventilador).

Curiosamente, el ventilador de 120 mm no está fabricado por ASUS sino por Power Logic. Tiene 11 aspas bastante inclinadas para generar mucha presión estática, como es habitual, y se puede desmontar y desconectar fácilmente por si queremos cambiarlo en algún momento.

Una vez retirada la rejilla, el soporte del ventilador y el propio ventilador, ahora sí que tenemos ya acceso al interior de la fuente.

En el filtro de entrada, ASUS ha instalado no solo los habituales condensadores X e Y para filtrar la energía que recibe la fuente antes de su conversión de alterna a continua, sino que ha puesto una sisterboard de control para asegurar la máxima eficiencia ya desde el principio.

En este modelo de 850W solo tenemos un único condensador de grandes dimensiones, japonés certificado para 105ºC como corresponde a una fuente Tier 1 como es esta ASUS ROG THOR Platinum II.

El panel de conexiones tiene unas soldaduras perfectas, y está acompañada en paralelo de otra sisterboard para el circuito LLC, también orientado a mejorar la eficiencia global del aparato.

Con unos disipadores pasivos llamados «ROG Thermal Solution», tenemos los transistores y diodos así como el transformador DC-DC de la fuente. En la ASUS ROG THOR Platinum II, toda la energía que entra por la toma de corriente se transforma aquí a corriente continua de 12V, y luego mediante este transformador secundario DC-DC se crean los voltajes de +5V y +3.3V necesarios para el funcionamiento del PC.

Aquí está el transformador principal, que es el que transforma la corriente alterna en continua para que la fuente pueda trabajar con ella.

Vista la fuente por dentro y por fuera, ha llegado la hora de ponerla a prueba.

Así se instala una ASUS ROG THOR Platinum II

La instalación de esta fuente de alimentación es completamente estándar, pero hay que tener en cuenta como dijimos al principio que como tiene una pantalla OLED en un lateral, depende mucho de la caja en la que vayamos a montarla porque muchas cajas modernas cuentan con cubiertas que esconden la fuente de la vista, en cuyo caso no tendría mucho sentido tener esta fuente con pantalla.

En nuestro caso hemos utilizado una de las nuevas ASUS GT302 ARGB, una caja diseñada para el sistema ASUS BTG «sin cables» y nos sucede justo esto, que tiene una cubierta e impide ver la pantalla. La única manera de verla es instalando la fuente como veis en la imagen, pero el display queda lamentablemente dado la vuelta.

La conexión del cableado es muy cómoda y no tiene ningún misterio, ya que tanto los propios conectores como en el panel de la fuente tenemos los nombres de dónde va cada cosa (además no encajan en otro sitio que no sea el suyo, así que es imposible equivocarse).

Al encender el equipo, automáticamente se enciende la iluminación, aunque como hemos dicho en nuestro caso se ve al revés de como debería porque en esta caja no hay otra forma de montar la fuente.

Sin embargo, podéis haceros perfectamente una idea de cómo quedaría en una caja con un montaje adecuado; el display OLED es relativamente grande y se actualiza más o menos cada segundo, mostrándonos el consumo en tiempo real.

Pruebas de rendimiento

Para probar el rendimiento de esta ASUS ROG THOR Platinum II hemos utilizado el siguiente sistema:

• Intel Core i9-14900K
• ASUS ROG Strix LC III 240
• ASUS Z790-Plus WiFi BTF
• ASUS RTX 4070 Ti SUPER BTF
• 2×16 GB Corsair Vengeance RGB DDR5-6000
• TeamGroup Cardea A440 2 TB PCIe 4

Este sería un PC gaming con un consumo no demasiado excesivo, pues al máximo debería llegar a unos 650-700 W, motivo por el que una fuente de 850 vatios es prácticamente ideal.

Como siempre, nos apoyamos en el reporte oficial de la entidad de certificación 80 Plus para mostraros los primeros datos de esta fuente de alimentación. Cuenta con certificado 80 Plus Platinum, lo que significa que debería proporcionarnos en torno a un 92% de eficiencia en situaciones típicas de carga.

Como se puede ver en la imagen de arriba, esta ASUS ROG THOR Platinum II está prácticamente siempre ofreciendo más del 90% de eficiencia en todas las situaciones, lo que significa que la pérdida de potencia (la zona roja en la imagen de la izquierda) es mínima, y por ende también es muy baja la generación de calor.

A continuación podéis verlo representado en forma de tabla con datos empíricos.

Efectivamente, en situaciones normales de carga (del 20 al 80%) esta fuente nos proporciona una eficiencia que ronda el 92%, así que es desde luego una de las fuentes más eficientes que podemos comprar ahora mismo, con el permiso de aquellas que portan certificado 80 Plus Titanium, el más alto en la actualidad.

Vamos ahora sí con nuestras pruebas propias, y para ello no hay nada mejor que OCCT, una prueba de tortura que pondrá el PC al completo al máximo para comprobar cómo se comporta la fuente de alimentación.

En nuestra prueba, el Core i9-14900K ha llegado a consumir hasta 311W (en picos de carga), mientras que la RTX 4070 Ti SUPER ha llegado a 292 vatios como máximo. En total, este PC (hay que sumar la refrigeración líquida, ventiladores, RAM, SSD, ventiladores…) ha llegado a 702 vatios, que no es poca cosa y por ende esta fuente de 850W es idónea. En todo momento y como podéis ver en la captura de arriba, la fuente ha permanecido con unos valores estables en todos sus raíles, no ha habido pico alguno denotando una estabilidad absoluta.

Conclusión y veredicto

La familia de productos ROG de ASUS siempre se ha caracterizado por dos cosas principalmente: por un lado, por su estética agresiva obviamente gaming, y por otro lado, por proporcionar la máxima calidad y funcionalidad. Tras estar probándola, no nos cabe duda de que esta ASUS ROG THOR Platinum II cumple con ambas premisas de manera sobrada, porque no solo es una fuente de categoría y calidad Premium, sino que además tiene un rendimiento y estabilidad fuera de toda duda que la hace ideal para los equipos gaming más exigentes del mercado.

Hablando de estética y funcionalidad, esa pantalla OLED que nos muestra el consumo en tiempo real en todo momento es un añadido que nos ha gustado mucho, si bien es cierto que dependiendo de la caja en la que vayas a montar la fuente podría no tener demasiado sentido. Con todo, estas cosas siempre nos gustan mucho a los aficionados al hardware, y ver el consumo de la fuente en tiempo real en la propia fuente siempre «mola».

En definitiva, estamos ante una fuente de alimentación de primera categoría a la que solo podemos sacarle dos peros: el primero es que los cables SATA, MOLEX y Floppy carecen de tratamiento sleeved, habría estado bien que ya que lo tienen los demás cables estos también lo tuvieran. El segundo es, como casi siempre pasa con productos Premium, el precio, y es que la ASUS ROG THOR Platinum II cuesta en torno a 300 Euros, y eso el modelo de 850W (también está disponible en 1000 y 1200 vatios, y en la generación anterior tenemos hasta 1600W con certificado 80 Plus Titanium pero esa ya cuesta 600€).

Por todo ello, creemos que esta ASUS ROG THOR Platinum II se merece nuestro galardón de Oro, destacando sobre todo su diseño y su rendimiento.