Increíble pero cierto. Desde mayo del año pasado no se veía algo igual y curiosamente hay un factor en la caída de esta semana como lo hubo en la de dicha fecha de 2021. El precio de las tarjetas gráficas baja, y lo hace durante este mes de enero, pero ¿es algo puntual o es una tendencia? Vamos a analizar los datos para intentar sacar algo en claro.
Ver para creer, pero es cierto: las RTX 30 y las RX 6000 comienzan a bajar su precio empujadas por, curiosamente, una nueva caída de Ethereum. Se ha pasado de unas cifras que parecían llegar al 200% de sobreprecio a unos más «interesantes» (soltar carcajada aquí) 177% y 167% respectivamente. ¿Tendencia o efectos de especulación mal planificada?
El problema de la especulación y los gamers
No hay duda que viendo como aumenta el stock de tarjetas gráficas en la actualidad donde NVIDIA y AMD se están esforzando junto con TSMC y Samsung en llenar los estantes, este hecho no afecta directamente al precio de las GPU.
Es decir, aumenta el stock y ¿aumenta el precio? Pues hemos vivido esa paradoja que como arma de doble filo se usó en no pocas ocasiones, y tenía parte de verdad, pero no era el problema. Noviembre marcó un +183% en NVIDIA y un +178% en AMD, diciembre se aumentó a +187% y +183% y en enero estamos bordando una bajada del 10% en NVIDIA y del 16% en AMD. ¿Por qué te estarás preguntando?
La explicación no tiene nada que ver con el MSRP, ni el stock ni ningún factor añadido a estos, aunque NVIDIA ha subido el precio de sus tarjetas gráficas Founders Edition este fin de semana, pero no, el único motivo tangible para explicar las subidas y bajadas es el valor de Ethereum o de criptomonedas de alta rentabilidad. En otras palabras, el valor de las tarjetas es puramente especulativo.
La inflación, Bitcoin y Ethereum
En pleno proceso evolutivo de la inflación en medio mundo con subidas del tipo de interés en las rentas fijas están haciendo una mella terrible en valores altamente volátiles o especulativos. Bitcoin cae un 50% de media en apenas unos días, Ethereum le sigue a su estela con la caída brutal casi clavada a la que sufre la criptomoneda más conocida.
¿Por qué ocurre esto? Pues en gran medida porque los inversores quieren protegerse de la crisis de inflación y han retirado su dinero de las criptos para refugiarse en valores más seguros y posiblemente rentables si esto continúa así.
Por lo tanto, se podría pensar que al menos un 50% de la subida de las tarjetas gráficas está asociada por lo explicado más arriba sobre esta especulación, pero no funciona así. El minero medio da por sentado que cuando la moneda baja hay que comprar y ampliar los rigs para conseguir más rentabilidad futura.
El problema es que en junio Ethereum pasa al modelo de prueba de participación y se prevé una espantada de mineros hacia otras criptomonedas, si no lo han hecho ya. Por lo tanto, si la situación continúa así (todo hace prever que lo hará, al menos durante un tiempo prudencial), el valor de las tarjetas gráficas debería de caer poco a poco hasta llegar a un sobre coste menor.
En cualquier caso, se descarta que lleguen a su valor MSRP, eso es a día de hoy pura fantasía y solo una debacle lo permitiría, quizás el hecho de que los países prohíban la minería por sus costes energéticos e impacto en la huella de CO2, lo cual cuesta miles de millones anuales que los gobiernos no quieren pagar para que otros se enriquezcan por pura especulación. Hagan sus apuestas…