Se acaba de dar una filtración que, como mínimo, es cuanto menos curiosa y bastante poco habitual. Parece ser que Intel ha cancelado un procesador Arrow Lake Refresh que se lanzaría a finales del próximo año 2025. Al parecer uno de los nuevos procesadores iba a tener una configuración de 8 P-Cores y 32 E-Cores, pero Intel lo ha cancelado por ser demasiado bueno.
Está previsto que durante el mes de octubre Intel presente los nuevos procesadores Core Ultra 200 Arrow Lake-S. Inicialmente lanzará los modelos Core-K y Core-KF, dejando el resto de modelos para el primer trimestre del próximo año.
Como gran particularidad de estos nuevos procesadores Arrow Lake, estos pierden los hilos de procesamiento. La función de los hilos pasará a ser realizada por parte de los núcleos de eficiencia. Teóricamente, este ajuste permite aumentar sustancialmente el rendimiento en tareas complejas y pesadas, como puedan ser los videojuegos, streaming y similares.
Intel cancela un procesador por ser demasiado bueno
La familia de procesadores Arrow Lake Refresh que se lanzará en 2025, será una actualización de los chips de 14a Generación. Vendrán con un proceso de fabricación más pulido que debería ofrecer una mejora de rendimiento. Mantendrán estos nuevos chips el socket LGA1851 que se estrenará en unas semanas.
Parece ser que Intel ha estado trabajando en un procesador Arrow Lake Refresh con 8 P-Cores y 32 E-Cores. Los núcleos de potencia (P-Cores) se basan en el diseño Lion Cove y los núcleos de eficiencia (E-Cores) se basan en el diseño Skymont.
Según parece, la compañía ha conseguido un gran aumento de IPC en sus núcleos de eficiencia Skymont. Al parecer, ha sido tan grande el aumento de rendimiento en estos núcleos, que el salto de potencia habría sido una monstruosidad en multiproceso.
Hay tres motivos por los cuales podría haber cancelado este procesador 8P+32E. El primero es el mencionado, un salto de rendimiento bestial. La otra información apunta a que el Core Ultra 9 285K sería competitivo con el Ryzen 9 9950X en cargas de productividad. Como último motivo, estaría la reducción de costes para el próximo ciclo de chips.
Independientemente del motivo, Intel ha decidido pasarle la tijera a estos nuevos procesadores. Apuntan a que, simplemente, aumentarán las frecuencias y listo. También hay la posibilidad que se lance un procesador de 8 P-Cores y 24 P-Cores.
Estos nuevos procesadores Arrow Lake Refresh se tendrán que enfrentan a los procesadores AMD Zen 6. Su principal competidor ya ha dicho que entre finales de 2025 y principios de 2026 lanzarán una nueva generación de chips. No sabemos mucho al respecto de los nuevos procesadores Ryzen, pero apuntan muy bien.
Lanzar al mercado un procesador mucho más potente que su competidor podría, en teoría, potenciar las ventas. Algo que Intel necesita urgentemente, ya que AMD les ha comido una gran parte de la cuota de mercado. Los usuarios están cansados de pagar de más por procesadores inferiores a su competencia.
Además, la situación financiera global de Intel es bastante mala. Incluso, han surgido rumores sobre que Qualcomm podría presentar una oferta de adquisición. Destacar que tendría escaso recorrido, ya que no se permitirá por los organismos antimonopolio internacionales, como paso con la operación NVIDIA-ARM.