Hemos visto a lo largo de la historia cómo varios formatos competían por dominar un segmento y al final uno prevalecía. Uno de los más recientes casos es la dura batalla entre el formato HD-DVD y el Blu-ray, el cual terminó ganando este segundo. El fracaso de los HD DVD fue tan grande (e inevitable) que prácticamente termina con la quiebra de Toshiba.
El formato HD-DVD es admitido como nuevo tipo de soporte en 2003 por parte del «Foro del DVD». Los principales desarrolladores y valedores de este formato fueron Toshiba, NEC y Microsoft. Además, contó con el apoyo de grandes productoras como Universal Studios, Paramount Pictures y Warner Bros.
Además, Microsoft agregó un lector de HD-DVD a la Xbox 360, que fue su gran entrada a la industria de los videojuegos. Pese a todo este soporte, la verdad es que lo tenía muy difícil para competir con el Blu-ray. Tanto es así que terminó desapareciendo debido a las grandes capacidades del Blu-ray y el gran soporte que recibió.
Toshiba y Microsoft, los grandes valedores del HD DVD
Para empezar, debes saber que este nuevo formato llega para dejar atrás a los DVD. El nuevo formato HD DVD ofrecía una capacidad de 15 TB en discos de una capa y llegaba a los 30 TB en los discos de doble capa. Los DVD normales tenían una capacidad de 4.7 GB y los modelos de doble capa ofrecían 8.5 GB de capacidad. Hablamos de un aumento en la capacidad de entre 4-2 veces para los HD DVD de una capa y de 8-4 veces para los de doble capa. Destacar que este formato solamente aceptaba vídeo en resolución Full HD (1080p).
El problema del HD DVD es que poco después se lanzaría el Blu-ray. Los desarrolladores de este nuevo formato fueron Sony, Panasonic, Philips y Microsoft. Este nuevo formato tenía 25 GB por disco de una capa y hasta 50 GB de capacidad por disco de doble capa.
Además, este nuevo formato ofrecía soporte para vídeo en resolución 4K. Destacar, por último, que el Blu-ray contaba con el apoyo de Disney, Warner Bros, 20th Century Fox y Sony Pictures.
Durante un año, más o menos, compitieron por hacerse con el mercado. Fue a partir de 2007 cuando empieza el declive del HD DVD, justo con el lanzamiento de la PS3. Sony lanzó esta consola con lector de Blu-ray, algo que generó un enorme problema al HD DVD. Solo un año más tarde, Toshiba anuncia el cese de la producción de estos discos ópticos y de los reproductores.
Un fracaso que casi hace quebrar a Toshiba
La compañía llevaba tiempo en una situación financiera complicada, pero el formato HD DVD la terminó de rematar. Toshiba invirtió muchísimo dinero en el desarrollo y promoción de este formato, pagando incluso para que algunas películas y juegos se lanzarán solo en este formato. Cantidades de dinero que jamás recuperarían.
Se suma al problema que la Comisión Europea presentó una demanda antimonopolio contra Toshiba por su participación en el DVD Forum. La demanda destacaba que la compañía había usado su posición para favorecer al nuevo formato frente al Blu-ray. Al final, Toshiba tuvo que pagar una multa de 129 millones de euros, algo que solo agravó más la situación.
Debido al gran fracaso de este formato, muchos inversores vendieron sus acciones. Además, tras la demanda de la Comisión Europea, los inversores no querían poner sus fondos en la empresa. Un conjunto de circunstancias que han hecho que Toshiba no termine de levantar cabeza desde entonces. El remate fue en 2015, cuando la compañía se vio envuelta en un escándalo contable que les costó decenas de millones de euros.
Como consecuencia de este escándalo y del fracaso del HD DVD, Toshiba entró en quiebra y fue adquirida por el consorcio Japan Industries Solutions Corporation. Para sacar del pozo a la compañía, este consorcio fue desmembrando la empresa y vendiendo las partes menos rentables que les podrían generar ingresos rápidamente para liquidar deudas.