Lo normal cuando usamos el ratón, es utilizar una alfombrilla, que están pensadas para que funcione a la perfección. Puede darse el caso que, si tienes portátil y se te haya olvidado en casa la alfombrilla. Pues que sepas que no es problema, porque hay cosas que puedes usar en el día a día que son una alternativa a la alfombrilla.
Podemos entender como alfombrilla, una pieza habitualmente rectangular acolchada sobre la que se pega una tela. La realidad es que hay alfombrillas de diferentes materiales que funciona igual de bien. Obviamente, todas estas ideas que te vamos a proponer son soluciones improvisadas para un momento de emergencia.
Debes saber, por otro lado, que los sensores de los ratones son cada vez mejores y soportan mayor cantidad de superficies «random». Pero ¿sabías que hay materiales y cosas alrededor tuyo que pueden hacer la función de alfombrilla?
Usar el ratón sin una alfombrilla
Realmente las alfombrillas estaban pensadas para los ratones de bola y los primeros ratones con sensores laser. Los sensores de los ratones actualmente son mucho mejores y compatibles con gran cantidad de superficies. Esto nos permite usar el ratón sin alfombrilla y en una infinidad de superficies diferentes, algunas, que ni te puedes imaginar. Algunas opciones son:
- Directamente sobre el escritorio: Realmente si tenemos el típico escritorio de madera, sin importar el color, no necesitamos una alfombrilla. Hay algunas excepciones y estas son que este barnizado, donde pueden darse perdida de movimiento o si la superficie es un cristal transparente. Sobre todo, en este último caso, necesitaremos obligatoriamente una alfombrilla. Debes tener en cuenta que esto es un problema para el ratón y la mesa, ya que ambos se dañaran por el roce.
- Hoja de papel: No soy muy fan del touchpad de los portátiles y siempre he usado un ratón convencional para usar el portátil y se me ha olvidado un montón de veces la alfombrilla. Una simple hoja de papel es suficiente, funciona a la perfección
- Sobre la piel: Te puede parecer un absurdo, pero puedes probarlo y veras cómo funciona. Efectivamente, cómodo no es, pero funciona sin mayores problemas
- Ropa: Debería de funcionar sin mayores problemas sobre la ropa que llevas puestas. Como en todo, algunos tejidos pueden provocar que no funcione, como pueda ser un producto que tiene lentejuelas o similar
- Cartón: Si, un pedazo cualquiera de cartón lo podemos usar a modo de alfombrilla. Debes tener en cuenta que las cajas de transporte internamente tienen plisado y este movimiento se suele transmitir a la capa externa. Esto puede generar que existan saltos, pero la cara interna de una caja de cereales funciona perfectamente
- Suelo: Efectivamente, hay muchos suelos cuyo esmaltado es mate y que pueden hacer la función de alfombrilla. Pero, esta opción tiene un gran problema, los suelos suelen acumular mucho polvo y suciedad, aunque seas muy pulcro. Así que, usarlo en el suelo puede hacer que se acumule mucha suciedad en el sensor del ratón
- Pared: Ten en cuenta que este truco solo funciona si las paredes de tu casa son lisas, como tengas gotelé, olvídalo. Es poco cómodo, lo sabemos, pero en un momento dado, sirve
- Pantalla de ordenador. Aunque sea completamente absurdo, también puedes utilizar la pantalla de tu ordenador como alfombrilla, un caro accesorio que no deberías probar para evitar dejar algún rayajo en la pantalla.
- Portátil: Puedes usarlo directamente sobre el ordenador portátil, aunque no es lo más recomendable, ya que lo puedes rayar
- Libro: Concretamente, sobre la portada, aunque esta esté satinada. Pero, como pasa en el caso anterior, puedes terminar rayando o destrozando la portada del mismo
- Bolsa: Otra superficie un poco loca que podemos usar es una bolsa. No vale cualquier tipo de bolsa, nos referíamos a las de papel que parecen un poco de cartón o incluso, algunas de tela. Valen incluso las grandes de supermercado reutilizables que son más regias
Antes de usarlo sobre el escritorio, pared u otra superficie, deberías limpiarla. La mayoría de las superficies acumulan polvo y pelos, así que es importante hacer mantenimiento preventivo. Recuerda que toda esta suciedad puede terminar en el sensor y provocar un funcionamiento deficiente del ratón. Este es uno de los puntos fuertes que tienen las alfombrillas al final, que se pueden limpiar fácilmente.
Realmente no existe ningún problema en utilizar el ratón sobre otra superficie que no sea una alfombrilla, de hecho en ocasiones puede servirnos para ahorrar un poco de dinero, pero también hay casos en los que es mejor utilizarla dependiendo también de los periféricos que utilizamos. Hay algunos inalámbricos que nos permiten cargarlos mientras los utilizamos, y para ello necesitan una alfombrilla específica que permite recargar la batería mientras el ratón se desplaza sobre ella, en estos casos por ejemplo obviamente tendríamos que utilizar la alfombrilla incluso si no queremos.
Si el problema es el precio, tampoco es que debáis preocuparos mucho, ya que hay modelos que son realmente básicos y baratos ya que tampoco es necesario gastarse una cantidad de dinero exagerada en añadirle leds o similares a algo que tiene una única función (a no ser que necesitemos que sea como la que hemos mencionado antes).
Tipos de alfombrillas para ratón
Aunque realmente el ratón funcionará sobre casi cualquier superficie (en realidad, sobre prácticamente todo menos el cristal, donde solo unos pocos sensores son capaces de funcionar), lo más recomendable es tener una alfombrilla, tanto por rendimiento y precisión como por durabilidad, ya que al final el estar arrastrando las patas de teflón de los ratones por cualquier superficie generará un desgaste en éstas que no tendría al usar una alfombrilla.
Una de las funciones de la alfombrilla es reducir la suciedad que se queda en el sensor del ratón. Parece una tontería, pero las de tela tienen una textura porosa pensada para «absorber» el polvo o parte de él. Además, es un producto que podemos poner en la lavadora sin problemas para limpiarla con poco esfuerzo, siempre y cuando se trate de una alfombrilla de tela, ya que, además de alfombrillas de tela, también podemos encontrar alfombrillas de cristal templado o incluso alfombrillas de aluminio, estas últimas están diseñadas para los jugadores profesionales que necesitan reducir la resistencia del ratón en cualquier superficie.
Mientras que las alfombrillas de tela se lavan fácilmente en la lavadora, algo que podemos hacer todos los meses para evitar que sea un nido de bacterias, las alfombrillas de cristal templado de aluminio, también debemos limpiarlas con regularidad con un paño humedecido. No es necesario utilizar productos limpia cristales ya que tanto el cristal como el aluminio no son porosos.
Además, también podemos encontrar alfombrillas que incluyen una fina lámina de gomaespuma en la parte inferior y recubierta de una capa de plástico. Este tipo de alfombrilla, al menos la superficie, no recoge tanto la suciedad como una alfombrilla tradicional de tela, sin embargo, la suciedad de acumula en la parte superior en forma de pegotes de suciedad. Parar limpiar, lo único que necesitamos es un trapo con limpiacristales o simplemente un paño humedecido en agua, siendo recomendable la primera opción ya que la superficie no es completamente lisa, sino que tiene perforaciones donde se acumula la suciedad y con un poco de agua, no es suficiente.