Lara Croft es uno de los personajes icónicos de la historia de los videojuegos, que llegó en 1996 de la mano de Core Design para darle un giro completo a los viejos juegos de aventura y acción. Seguramente sea de los lanzamientos que todos los que vivimos aquella época –ya trabajando en esto– más nos impactaron pero, ¿de verdad que hacía falta un remake así a estas alturas?
Microsoft hace unos meses regaló a sus usuarios de Xbox Game Pass un remake –sería mejor llamarlos juegos maquillados– de Quake II que, por alguna razón, alguien pensaba que iba a interesar a los usuarios. Los ejercicios de nostalgia duran lo que duran, que es el momento inicial de descargar el juego, el siguiente de abrirlo y el último que es descubrir que aquellas imágenes que guardábamos en la memoria tenían más calidad que las que vemos en la pantalla.
Tres remakes en un solo juego
Como os decimos, eso mismo de Quake II es aplicable a estos tres Tomb Raider que se anunciaron ayer por la tarde para Nintendo Switch a través del Direct de los japoneses, y que no sabemos si alguien los estaba esperando. Porque a los clásicos hay que dejarlos descansar, máxime cuando el personaje principal, nuestra Lara, sigue vigente gracias a la última y soberbia trilogía survivor.
El caso es que los tres primeros Tomb Raider aparecidos entre 1996 y 1998 llegarán remasterizados y con mejores gráficos, tanto a Nintendo Switch como PS5, PS4, Xbox y PC. Será el 14 de febrero de 2024 y parece que tenéis abiertas las reservas por si la impaciencia os puede y queréis ya gastar los cerca de 30 euros que os va a costar.
Como podéis ver por el vídeo que tenéis justo encima, el juego lo que ha hecho ha sido inflar la resolución, incluir pequeños upgrades visuales (lo dicen así literalmente) y esconder algunos niveles secretos inéditos en cada uno de los juegos.
Una moda demasiado cara
No seremos nosotros los que le quitemos la ilusión a los auténticos fans de Tomb Raider sobre si esta recopilación tiene interés o no, y si tras comprarlo alguien va a aguantar a terminárselos durante todas las horas que atesoran en su interior, teniendo como hay en el mercado tantas alternativas. Es más, incluso en el remoto caso de que nos diera por querer pasar las mismas fases que ya jugamos en 1996, seguramente sería más fiel y nostálgico hacerlo con la misma instalación original en un PC de la época, para completar de verdad ese viaje al pasado.
Que Capcom haga un remake del Resident Evil de 1996 como el que lanzó en 2015 se entiende, se comprende y se agradece. O los que vinieron después de la segunda y tercera entrega. Pero traer estos Tomb Raider, que son prácticamente los originales pero maquillados y actualizados a la calidad gráfica de 2003, de PS2, no parece el camino más correcto para disfrutar de un clásico.
Así que si quieres recuperar viejas emociones, ni lo dudes: instálate el lanzamiento original de Tomb Raider para PC o PSX y juégatelo. Tiene más sentido histórico que esto que anuncian para 2024.