Queramos o no, comienzan ya los rumores de cara a la próxima generación de consolas y en el caso de Microsoft con Xbox, todo lo que se diga será crucial para saber si tiene oportunidades de quitarle a Sony algo de su hegemonía, al menos en el mercado de las máquinas de sobremesa. Así que es normal que los medios se estén llenando de leaks que vienen a decirnos qué podemos esperar de esos nuevos artefactos que, por momentos, llegan a parecer mercados persas donde se vende prácticamente de todo.
Sea como fuere, es evidente que en Microsoft deben estar estrujando sus cerebros para imaginar qué es lo que pueden añadir a su futura Xbox para que tenga oportunidades de triunfar, para que los jugadores acaben por comprarse una en vez de ir a la tienda de enfrente a por una PS6. Y lo último que hemos conocido suena tan extraño y forzado, que no sabemos todavía si llegar a tomárnoslo completamente en serio o interpretarlo como una genialidad que podría dar resultado.
Steam, Epic Games y Microsoft juntos en una Xbox
El caso es que las últimas filtraciones vienen a decir que existe sobre la mesa la posibilidad de que Microsoft saque todos los cañones imaginables para alimentar a su futura Xbox, y para ello no va a dudar en permitir que dos competidores acaben por tener presencia en su futuro hardware de alguna manera. Así, hay quien asegura que para la next-gen tendremos, no solo la tienda de Microsoft disponible para comprar juegos sino también todo lo que tengamos en Steam o en Epic Games Store.
El rastro que se ha encontrado parece iniciarse en la tienda de Microsoft de Windows donde hay un registro de algo llamado «Steam DF» que bien podría servir de inicio para integrar dentro de la aplicación de Xbox todo lo que tenemos comprado en Steam. Eso sería un salto enorme porque supondría poder gestionar en un único lugar todas nuestras compras, como ya ocurre con Ubisoft, que su plataforma Connect también podemos usarla a través de este recurso de Microsoft.
Pero todos estaréis pensando, «ok, ¿pero estamos hablando de Windows?». Pue sí, y aquí viene la segunda revelación, porque esas filtraciones apuntan a que la próxima Xbox se va a dejar de experimentos y va a tener una instalación de Windows en su interior, precisamente para permitir hacer realidad este interés de Microsoft por agultinar en su consola todo el ocio disponible en lo PC y hacer frente a Sony con su futura PS6, que, si nada cambia, parece que volverá a arrasar a la competencia.
Es evidente que este camino que podría iniciar Microsoft tiene sus riesgos, pero en el horizonte parece una buena solución para aquellos que quieran tener un dispositivo capaz de aprovechar sus compras en tiendas como las de Steam y Epic Games Store. De tal forma que, de inicio, contaría con muchos más juegos que los que vayan llegando al nuevo hardware que, por otra parte, debería mantener la retrocompatibilidad con máquinas anteriores de Microsoft para no montar líos. ¿No os parece?