Microsoft ya está probando la instalación de actualizaciones sin tener que reiniciar el PC

Uno de los problemas más molestos relacionados con el funcionamiento de Windows se encuentra en las actualizaciones. Hasta hace unos pocos años, Windows decidía cuando quería instalar una actualización y reiniciaba el equipo sin que el usuario pudiera hacer nada para impedirlo. Afortunadamente, eso cambió y ahora, tanto Windows 10 como Windows 11 permiten a los usuarios programar cuando quieren descargar e instalar las actualizaciones.
Este problema no es exclusivo de Windows, ya que también lo podemos encontrar tanto en macOS, como en iOS y en Android. Cuando Microsoft lanza un nuevo parche para corregir problemas, en la bandeja del sistema aparece un icono que nos invita a reiniciar el equipo para finalizar la instalación.
Si trabajamos con el ordenador, esto puede ser un incordio, no solo visual sino también de funcionamiento, ya que el equipo va más lento de lo normal, por lo que siempre acabamos pausando nuestra actividad para reiniciar el equipo y finalizar la instalación antes de seguir.
Se acabó el reiniciar el PC tras instalar una actualización
Para usuarios domésticos es una molestia con la que nos hemos acostumbrado a vivir. Sin embargo, en entornos profesionales, supone detener completamente la actividad. Para evitarlo Microsoft acaba de anunciar las versiones Windows 11 Enterprise permitirá aplicar estos parches sin tener que interrumpir la actividad de los usuarios, es decir, sin que tenga que reiniciar el equipo.
De momento, esta nueva función de la versión de Windows 11 para empresas y centros educativos, solo es compatible con los equipos gestionados por procesadores de AMD y de Intel. Los equipos gestionados por procesadores con arquitectura ARM, tendrá que esperar un poco más para poder utilizarla.
Todos los meses Microsoft lanza una nueva actualización de seguridad y corrección de errores que conlleva obligatoriamente un reinicio, un reinicio que los equipos con la versión Enterprise de Windows 11 ya no tendrán que hacer, ya que se aplican en «caliente», es decir, que entran en funcionamiento nada más instalarse sin necesidad de reiniciar el equipo.
De momento, esta funcionalidad, solo está disponible para los parches mensuales. Las actualizaciones que Microsoft lanza cada 3 meses para añadir mejoras y nuevas funciones seguirán implicando reiniciar el equipo. Esta nueva funcionalidad está disponible para todos los equipos con Windows que con la compilación número 26100.2033 o posterior.
Estos equipos se gestionan por el departamento de IT a través de Microsoft Intune, departamento que debe configurar una directiva de actualización para la instalación de parches en caliente. Intune analizará todos los equipos que gestiona y se encarga de habilitar el proceso en los equipos compatibles.
¿Cuándo llegará a los usuarios domésticos?
El tipo de usuarios que más necesitaban de esta función, las empresas, han sido los primeros en recibirla. Esta no es la primera vez que Microsoft lanza una nueva función en Windows inicialmente para este colectivo para, poco después, implementarla de forma global en todas las versiones de Windows.
Teniendo en cuenta esto que estamos comentando, lo más probable es que los usuarios de Windows 11 Home y Pro también puedan disfrutar de esta funcionalidad en próximas actualizaciones de Windows, aunque, de momento, Microsoft no se ha pronunciado al respecto.