Si tienes un reloj smartwatch seguro que posee la función de medir tus pulsaciones, hasta los más económicos lo traen. Sin embargo, modelos superiores venden la característica de que los suyos realizan electrocardiogramas (ECG). Ahora bien, ¿son realmente fiables?, ¿los resultados son reales?
Hoy vamos a analizar todo lo que sabemos sobre ellos para poder tener seguridad a la hora de interpretar los resultados y conocer qué datos son los que podemos obtener de forma real y cuáles orientativos.
¿Mi reloj marca bien las pulsaciones?
Lo primero que tendremos que comprobar es si nuestro smartwatch marca bien las pulsaciones, de no ser así ya no hará falta continuar para demostrar que es imposible que realice un electro de forma satisfactoria. Para ello es muy simple, solo tendremos que medirlas manualmente y ver que se aproximan al valor que nos muestra el reloj.
Una vez que sepamos que al menos nos podemos fiar de eso, es hora de pasar al EGC. Son muchos los modelos que existen. Nosotros realizaremos una prueba con el Apple Watch Series 8. Aquí os dejamos los resultados.
Según el propio dispositivo de Apple, no sufrimos ningún tipo de problema cardiaco, sin embargo, ¿eso significa que no estamos teniendo un infarto? Pues bien, nos ponemos en contacto con un médico especialista del SESPA (Servicio de salud del Principado de Asturias) desde donde nos indica lo siguiente.
La medición de un aparato de estas características es real, y viendo el resultado anterior (la imagen) puede detectar perfectamente un infarto, ya que las ondas se ven claras y no estarían así, ni las podría generar de forma inventada, sino fuera real.
Por tanto, ¿genial no? Pero aún no ha acabado, falta un pequeño detalle.
Sin embargo, lo que nos está dando es la derivación de nuestro brazo izquierdo o derecho, donde tengamos el reloj. Eso no significa que no estemos sufriendo un infarto en otra parte del cuerpo. Los electros que nosotros utilizamos muestran 12. Por lo tanto, me creería la fiabilidad si nos dice que lo estamos sufriendo, pero no al revés, porque no puede medir todo el cuerpo en un simple punto.
En resumen, su eficacia es real, sin embargo, no podemos depender de él para poder prevenir un problema cardiaco.
Un médico del servicio público de salud de Madrid explica en YouTube como podríamos realizar un ECG completo y así poder saber de verdad el estado real de nuestro corazón, sin embargo, es un poco tedioso y para cuando acabemos, igual ya no nos encontramos bien si realmente estamos sufriendo un infarto. Os lo dejamos porque igualmente es curioso.
Parece interesante, pero volvemos a decir lo mismo, no es realista y salvo casualidad, no vamos a poder prevenir nada con él. Ni ahora ni nunca, por mucho que mejoren los sistemas, necesitaríamos un dispositivo para cada parte del cuerpo. Al menos sabemos que el Apple Watch genera una derivación casi idéntica a uno real, pero claro, solo la primera de ellas.
Así que si estabas pensando en hacerte con uno debido a esta función, ya sabes que no es tan preciso como nos gustaría, aunque tampoco es culpa de él. Pero a veces nos lo venden de una forma que no es la correcta. Hacer los hace, sí, pero no sirven de mucho.
La función ECG de los dispositivos móviles se ha diseñado para notar alteraciones en el ritmo del corazón en base a las pulsaciones y detectar posible problemas de corazón. Apple fue el primer fabricante que la lanzó al mercado en un reloj inteligente, sin embargo, en la actualidad no es el único que la ofrece, por lo que no es necesario comprar un Apple Watch para poder disfrutar de esta, cualquier smartwatch de Samsung también incluye esta función, al igual que otros fabricantes como Xiaomi. Todos estos fabricante analizan los datos obtenidos a través de una aplicación en nuestro dispositivos móviles contrastando las medidas históricas que tiene registradas.
Si el smartwatch nos indica que existe una anomalía en el funcionamiento del corazón, debemos acudir a un centro médico donde nos realizarán un ECG completo, con máquinas específicamente diseñadas para esta función y así salir de dudas. El ECG de los móviles es un indicativo de que algo no funciona bien, no es una medida infalible que nos vaya a salvar la vida.