Apple acaba de renovar la gama MacBook Air, una nueva gama que por fin recibe el procesador M3 que la compañía con sede en Cupertino presentó a finales de 2023 y que ya se encontraba disponible en la MacBook Pro. Y, siguiendo la tradición, la configuración mínima disponible es de 8 GB de RAM para un equipo que parte de 1.299 euros.
Si nuestras necesidades son más elevadas, y necesitamos 16 GB, al tratarse de memoria unificada en el procesador, no podemos comprar un módulo de memoria y añadirlo, tenemos que pagar 230 euros más en el momento de efectuar la compra.
El mismo problema nos encontramos con el almacenamiento, almacenamiento que se encuentra soldado a la placa base, por lo que, únicamente podemos ampliarlo cuando hacemos la compra. Si queremos 512 GB en lugar de 256 GB, tenemos que sumar 230 euros adicionales (casualmente, todas las ampliaciones tienen el mismo precio).
Teniendo en cuenta que la base son 256 GB, solo usuarios muy específicos podrán trabajar con tan poco espacio y no tendrán más remedio que apoyarse en la nube de Apple, iCloud. Si queremos el nuevo MacBook Air con 16 GB de RAM y 512 GB de almacenamiento, el precio que debemos pagar sube de los 1.299 euros con 8 + 256 hasta los 1.759 euros en el modelo de 13 pulgadas. Si queremos el de 15 pulgadas, el precio base es de 1.599 euros y al que tenemos sumar las ampliaciones de RAM y almacenamiento.
A no ser que necesitemos macOS para trabajar, por 1.799 euros podemos encontrar equipos de última generación con Windows que no tienen nada que enviar a los MacBook Air, ni en autonomía ni en prestaciones.
8 GB en macOS equivalen a 16 GB en Windows
Apple diseña su sistema operativo para un hardware muy concreto, lo que le permite sacarles el máximo partido a todos los componentes. Debido a que el diseño de macOS, iOS, iPadOS y demás están diseñado para un hardware muy concreto, este está optimizado para que haga un uso de la memoria mucho más efectivo que Windows, sistema operativo que está construido para funcionar en cualquier PC con componentes completamente diferentes.
Sin embargo, eso no es motivo para que la compañía con sede en Cupertino siga con una configuración base de 8 GB de RAM y 256 GB de almacenamiento, por muy rápido y efectivo que sea. La mayoría de los portátiles con Windows disponibles en el mercado, parten de la misma configuración, sin embargo, no tenemos ningún problema que ampliarlos reemplazándolos por otros de mayor capacidad, una versatilidad que Apple ofrecía hace años, mucho antes de la llegada de los procesadores M1 con mucho menos dinero.
Por mucho que Apple trate de justificarse afirmando que la gestión de la memoria que hace macOS es mucho mejor que la de Windows, el equipo siempre funcionará mejor y tendrá muchos más años más de vida si, en lugar de partir de 8 GB de RAM + 256 GB de almacenamiento parte de 16 GB de RAM y 256 GB de almacenamiento.
Viendo como Apple sigue siendo tan rácana en este sentido, está claro que el negocio de Apple está en el almacenamiento, concretamente en las ampliaciones de sus equipos además de en iCloud, la plataforma de almacenamiento de Apple.
Este movimiento no es nuevo ya que el iPhone siempre ha sido el smartphone que menor espacio de almacenamiento ofrecía en el modelo base. Cuando todo el mundo ofrecía un mínimo de 64 GB, Apple partía de 16 GB de base, aunque libres únicamente quedaban 10 quitando el espacio que ocupaba iOS.